Así lo anuncian los responsables de la empresa, quienes tienen prevista una inversión inicial de 120.000 euros para abrir las puertas de la estación «dentro de este año». La fecha no está definida, porque antes queda mucho trabajo por delante, como acondicionar los remontes para que obtengan los permisos indispensables para su puesta en marcha, equipar el bar-cafetería o comprar los cerca de cuatrocientos equipos para niños desde seis años hasta adultos, que Lunada Montaña Viva tiene previsto adquirir antes de su apertura. El material necesario para practicar esquí alpino, de fondo, de travesía o Telemark, así como snowboards, roscos, trineos, biciski y raquetas están entre sus primeras adquisiciones.
En Lunada Motaña Viva todo va estos días a contrarreloj para abrir una estación, donde «la familia va a constituir una de las líneas de trabajo principales» y a la se ofrecerán bonificaciones de precios, cursos específicos, menús infantiles, servicio de guardería o monitores para los niños en la zona de ocio familiar. Para atraer cada vez a más niños y jóvenes a Lunada, sus nuevos gestores también tienen previsto recuperar los antiguos convenios que se firmaban con los colegios e institutos de la comarca con el fin de ofrecerles cursos «con precios mínimos», transporte, alimentación, materiales y monitores.
Pero los amantes del snowboard están de suerte, porque ésta será una de las disciplinas que más se potencie en Lunada, dado que «las condiciones de calidad de la nieve y la longitud de las pistas esquiables resultan menos limitantes para el ejercicio» de esta disciplina. La intención de los responsables de la estación es preparar las pistas para adaptarlas a esta modalidad deportiva. Y ya de cara a próximas temporadas se creará un Snowpark acotado dotado de loop, módulos de salto y otros obstáculos.
En conjunto, la empresa se propone invertir 392.000 euros en el plazo de tres a cinco años, aunque este periodo «podrá modificarse en el caso de que la escasez de nieve y la reducción de los ritmos económicos no permita» afrontar la inversión. En general, la estrategia de los nuevos gestores de Lunada pasa por trabajar con «tarifas reducidas» para «ofrecer una imagen de espacio accesible a todos».
Todo el año.
Crear alianzas con su entorno y formar paquetes turísticos con la colaboración de la hostelería espinosiega y de Medina y Villarcayo también está entre sus planes y será una forma de convertir a Lunada en un destino más atractivo para un público potencial que se sitúa, sobre todo, en Vizcaya.Los nuevos gestores de Lunada quieren complementar las propuestas invernales con nuevos servicios que permitan mantener la estación abierta, en principio, «todos los fines de semana y periodos de vacaciones y en el futuro, todos los días del año». No obstante, el Ayuntamiento solo plantea la obligación de abrir durante un mínimo de nueve meses al año los fines de semana. Para alcanzar ese objetivo tan ambicioso, Lunada Montaña Viva entiende que debe existir «un esfuerzo colectivo» y plantea la necesidad de que se vayan sumando «nuevos socios trabajadores» al proyecto.
Con ellos se potenciarán actividades como rutas, espeleología, escalada, ornitología, micología o reconocimientos ambientales, así como talleres de producción de queso, cerveza, mantequilla, panadería, oficios tradicionales pasiegos y un larga lista de ideas.
Merece la pena entrar a su nueva página web y ver su proyecto y como lo piensan tirar adelante. Un proyecto colaborativo que permitirá dinamizar la comarca: estacionlunada.com/
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la ilusión es el inicio de muchas cosas.
la petan!!!!!