Argentina se queda sin material de esquí
La medida busca incentivar la exportación de productos argentinos, y complicar la importación para que se consuman productos nacionales. En muchos casos los efectos son devastadores, ya que los fabricantes y distribuidores de productos nacionales aprovechan para subir los precios al saber que la competencia no puede vender en el país.
El sector del esquí tampoco se ha escapado. Argentina no se caracteriza por la fabricación de material para deportes de invierno. Es algo que por tradición siempre se ha elaborado en países centroeuropeos, preferentemente junto a los Alpes (Francia, Austria, Suiza, Alemania e Italia) y en los últimos años se han ido apuntando los escandinavos, mientras que empresas norteamericanas han diversificado sus productos al sector del invierno.
Así, con las trabas a la importación de productos para deportes de invierno, tanto chaquetas como pantalones e incluso algo tan básico y fabricado en muy pocos países como son los esquís, los precios se han disparado. Este año la situación todavía se nota mas después de que el invierno pasado se encontraran con el mismo problema. El 90% del material textil es importado y apenas hay alguna empresa que fabrique en el país, y en cuanto al material duro, es el 100% de importación. Algunas tiendas han podido apañarse entre los pocos fabricantes de chaquetas de Argentina, pero se lo han vendido a u 30% mas caro.
En general en las tiendas especializadas se encuentran con poco stock. Cuentan en el medio digital Losandes.com.ar, que faltan máscaras de esquí, calcetines térmicos y hasta guantes, porque no se fabrican en el país y nadie ha querido arriesgar a traer nada de fuera. La solución que han encontrado algunos comerciantes es comprar material del año pasado de negocios que tuvieron que cerrar.
En concreto, accesorios como una máscara para esquiar ha pasado de costar 20 pesos argentinos a 60, y alguien que quiera comprar un equipo completo (esquís bastones y botas) deberá gastarse de 3.300 a 4.500 pesos argentinos, unos 800 euros. Lo que no ha subido demasiado son los alquileres, con 'solo' un 10% mas que el año pasado, poco teniendo en cuanta que la inflación del último lustro ronda del 22 al 24% anual.