Benjamin Raich en cambio se mostraba satisfecho con los cambios. Como no, al fin y al cabo él está dentro de la comisión de seguridad de la FIS que ha efectuado los cambios. Quien se mostraba algo molesto en Daniel Albrecht, quien esperaba que la Federación Internacional hubiera hablado antes con los corredores.
En cuanto a las marcas, también ha habido de todo, aunque con mucha mas cautela. Uno de los primeros en hablar ha sido Rudi Huber, Director de Atomic Race, la sección de alta competición de la firma austriaca, quien ha afirmado que Atomic apoya cualquier medida que suponga mejorar la seguridad en deportes de alto rendimiento,
"es interés nuestro también que las lesiones se reduzcan, pero hay que decir que el material no es el único responsable, sino también las redes de seguridad, la visibilidad, la preparación de pistas, y hasta la ropa y un equipo de protección completo son importantes para mejorar el tema de la seguridad".
Según el directivo, en base a pruebas realizadas por Atomic en esta última temporada con Marco Büchel, Christoph Grube, o jóvenes promesas como Matts Olsson o Justin Murisier los cambios propuestos por la FIS reducen claramente la fuerza en las curvas, lo que se tendría que traducir en una disminución de lesiones. De todas maneras Huber reflexiona con que siempre es difícil evaluar estos cambios. Si no se hace nada se dice que se pone en riesgo la seguridad del corredor. Si se hace algo, que se daña la imagen del esquí. De todas maneras el Directivo recuerda que tienen 15 meses para seguir estudiando el material y que no es hasta la temporada 2012-2013 cuando se tendrá que trabajar con él.
¿Y en cuanto al cliente final? Pues es algo que mucha gente se ha preguntado, pero Rudi Huber nos recuerda que Atomic tiene un portafolio comercial con tablas que van desde los 27 a los 25 metros de radio sobre cada categoría de esquí. El corredor profesional comprará un modelo, y el aficionado otro, pero todos podrán beneficiarse de las investigaciones en seguridad que se vayan descubriendo.