La noticia ha llegado a los dirigentes de Grandvalira y al Gobierno, que han dado su apoyo a pesar de no tener la confirmación oficial. España saldría perjudicada de esta decisión, ya que se quedaría sin una prueba de Copa del Mundo en la estación de La Molina. La pista Avet se ha convertido así en uno de los escenarios óptimos para acoger pruebas internacionales. Tanto es así que la Copa de Europa (femenina o masculina) seguirá parando en el país cada año hasta la esperada cita de Copa del Mundo. El 25 de febrero del próximo año se disputará el gigante de la Copa de Europa femenina.
Este invierno, la estación y los esfuerzos de toda la gente implicada supusieron una inmejorable respuesta inmediata (en pocas horas) para acoger un segundo slalom gigante, ya que como estaba previsto, no se pudo disputar en La Molina por las malas condiciones meteorológicas. "Que nos den finalmente dos pruebas sería increíble para los intereses de todos. Cabe decir que inicialmente nosotros lo pedimos, pero nos dijeron que no, y ahora ha sido la misma FIS quien nos lo ha propuesto", señala Visa.
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