Corría el año 1938, en concreto el 19 de octubre, cuando el Servicio Forestal de Estados Unidos concedió el permiso a la Salt Lake Winter Sports Association, para instalar un remonte en Alta. Como en aquella época montarlos era cosa más sencilla, en diciembre de ese mismo año los primeros esquiadores pudieron hacer uso de el para remontar la colina que querían descender. Pero problemas técnicos hicieron que ese mismo día se tuviera que parar, y no fue hasta unos días después, el 15 de enero de 1939, que definitivamente arrancó con todas las seguridades aquel tele-arrastre.Para subirse a el los aficionados tenían que pagar 25 centavos por uso o 1,5 dólares por un día entero de esquí. Aquel remonte se pudo montar gracias a los esfuerzos de la Salt Lake Winter Sports Association, ahora Alta Ski Lifts Company, la Cámara de Comercio del Estado de Utah y el Servicio Forestal. Fie la Asociación deportista la que compró un remonte a la compañía "Minas Michigan-Utah", con el que se llevaba mineral desde Alta a un lugar llamado Cañón de Tanners Flat en 1900. La Asociación logró recaudar 10.000 dólares de la época para trasladar ese remonte hasta la montaña, siendo de esta manera el segundo remonte destinado al esquí que se instaló en Estados Unidos.
