A la espera de la nevada anunciada

La lluvia y las suaves temperaturas -inusuales para esta época del año- han provocado ya el cierre de Leitariegos y mantiene bajo mínimos las estaciones de esquí de San Isidro y Valgrande-Pajares. La escasez de las precipitaciones blancas hasta ahora, además, no ha permitido aún que los enclaves invernales de Fuentes de Invierno y El Morredero abran sus instalaciones esta temporada.

Así las cosas, las estaciones y los aficionados aguardan el frente frío y de nieve anunciado para finales de la semana, que, de acuerdo a las previsiones, dejará en las montañas de León y Asturias importantes espesores blancos. Las temperaturas comenzarán a descender el jueves, jornada en la que la cota de nieve ya baja hasta los 1.800 metros de altitud. El frente estará más activo a partir del viernes, durante el fin de semana y también el próximo lunes.

De momento, San Isidro mantiene 1,8 kilómetros esquiables: únicamente dos pistas en servicio y unos espesores que oscilan entre los 15 y los 40 centímetros de nieve húmeda. Desde la apertura de sus instalaciones -el 20 de diciembre, algo más de un més después del inicio oficial de la temporada marcado en el calendario-, la estación ha recibido alrededor de 20.000 esquiadores, a pesar de que la superficie esquiable no ha superado aún los dos kilómetros en lo que va de campaña.

Pajares, por su parte, únicamente mantiene en servicio 600 metros a lo largo de una pista. Con espesores entre los 15 y 20 centímetros.