Aramón ya reconoció su deuda con los antiguos dueños de Cerler

Aramón ha admitido en diversas ocasiones que tiene pendiente una deuda con los antiguos dueños de los terrenos en los que se asienta la urbanización de Cerler. Aunque fuentes del grupo aragonés de la nieve consideran que esos compromisos podrían haber prescrito, este periódico ha tenido acceso a dos cartas fechadas en junio de 2006 en las que el consejero delegado de la empresa, Javier Blecua, reconocía que Montañas de Aragón S. A. debía entregar varias parcelas a los anteriores propietarios de los suelos.

La asunción por parte de Aramón de esas obligaciones se produjo siete meses antes de la demanda judicial presentada el pasado viernes por una treintena de vecinos del núcleo de Cerler. Los antiguos dueños de los suelos en los que se levanta la urbanización reclaman al holding aragonés de la nieve la devolución de unas 32 hectáreas de terreno, lo que le impediría ingresar unos 120 millones de euros y le haría perder otros 100 millones entre pagos y reversiones.

Los demandantes basan su solicitud en que las sucesivas empresas responsables de Cerler -la última, Aramón- han incumplido los contratos firmados en 1967 entre la promotora de la estación y los dueños de los terrenos. Siempre según su versión, esos acuerdos preveían que en un futuro no concretado los vecinos recibirían el equivalente al 10% del suelo rústico que vendieron, pero ya urbanizado y revalorizado.

"Total voluntad de acuerdo"
Los propietarios consideran que, al haber pasado 40 años sin que se haya cumplido esa parte del acuerdo, el contrato puede darse por roto. Por eso piden al Juzgado de Boltaña que obligue a Aramón a dejar las cosas como estaban en 1967: la empresa tendría que devolver los terrenos a los vecinos y éstos deberían devolver el dinero que cobraron entonces, entre 9 y 12,4 pesetas por metro, debidamente actualizado.

Aunque fuentes del grupo insistieron ayer en que Aramón tiene "toda la voluntad de llegar a un acuerdo con los demandantes y plena confianza en que ese acuerdo será posible", las mismas fuentes volvieron a decir que los contratos firmados en 1967 podrían haber prescrito.

Sin embargo, esa posibilidad no parece encajar con la actuación reciente del holding de la nieve. En junio del año pasado, su consejero delegado, Javier Blecua, envió distintas cartas a varios de los actuales demandantes en las que reconocía que la empresa responsable de la estación de Cerler, perteneciente al grupo Aramón, debía dar varias parcelas a los antiguos propietarios de los terrenos de la urbanización.

De hecho, en esos escritos se daba a elegir a los destinatarios entre la entrega inmediata de los terrenos reclamados por cada uno de ellos, aunque sin urbanizar, y la entrega cuando las obras de urbanización estuviesen finalizadas. Los demandantes ni siquiera tuvieron en cuenta esa propuesta porque para entonces ya habían notificado a Montañas de Aragón que daban por rotos los contratos de 1967. En cualquier caso, el ofrecimiento de Blecua contrasta con la tesis de que los antiguos propietarios carecen de respaldo legal.

Aparece en el plan parcial
Por otra parte, varios vecinos de Cerler aseguraron ayer a El Heraldo que los representantes de Aramón nunca han dejado de admitir que el holding tiene una deuda con este núcleo del Pirineo oscense. El alcalde de Benasque, municipio del que depende el pueblo, confirma este extremo: "No podía ser otra forma, las empresas responsables de la estación de esquí siempre lo han reconocido -manifestó ayer Ignacio Abadías-. Aramón siempre ha dicho que iba a entregar esos suelos urbanizados, y de hecho en la revisión del plan parcial de la urbanización aprobada hace dos años aparecen esas parcelas".

Tal y como se recoge en las cartas enviadas por Blecua, en 1991 la empresa responsable de la estación de Cerler (Fomento y Desarrollo del Valle de Benasque) segregó de una finca matriz varias parcelas que a partir de ese momento pasaron a denominarse Devolución de Vivienda Unifamiliar (DVA) y que están contempladas en el plan parcial.

En los escritos de Aramón de junio se dice que son esas parcelas DVA las que Fomento y Desarrollo del Valle de Benasque debía entregar a los anteriores propietarios del terreno. Según los demandantes, eso equivale a reconocer que la petición de los vecinos de Cerler tiene fundamentos jurídicos. Además, los vecinos que se han sumado al procedimiento judicial consideran que este tipo de documentos son los que impiden la prescripción temporal del caso.

Iglesias no entra a valorarlo
El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, eludió ayer valorar la demanda. "Como en todos estos casos, estaremos a lo que digan los jueces -dijo al ser preguntado durante una visita a Zuera-. Si hay una demanda, lo que valdrá será lo que diga la Justicia".

No obstante, fuentes próximas al Gobierno de Aragón señalaron a El Heraldo de Aragón que el Ejecutivo autonómico considera, a priori, que Aramón no ha incurrido en ningún incumplimiento de contrato que justifique la reclamación de los demandantes. "Lo que han hecho el grupo Montañas de Aragón y el Ayuntamiento de Benasque ha sido agilizar un plan parcial que llevaba muchos años atascado", indicaron.