La mayoría de visitantes, unos 300, provienen sobretodo de los nuevos mercados emergentes de la Europa Oriental, que acuden a la feria en busca de alguno de los vehículos que previamente los organizadores han adquirido, revisado y preparado para que la venta tenga la mayor garantía posible. Incluso tras la compra, se hacen preparativos en las instalaciones de esquí de destino.Para este año, se espera tener unos 70 vehículos en exposición, aunque no solo es compra-venta en esta feria. Los almuerzos entre asistentes tambien empiezan a ser tradicionalmente, un momento en el que intercambiar experiencias y conocimimentos.
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