Según Nadal, «No tiene sentido que una empresa de ferrocarriles sea quien gestione cuatro de las nueve estaciones de esquí que hay en Catalunya» aseguró, por lo que «en cuanto podamos, crearemos un camino intermedio a través de un ente gestor de las estaciones de esquí para volver a conseguir que, sin recurrir al sector urbanístico, se vuelvan a privatizar».
Respecto a la unión de La Molina y Masella, que está entre los proyectos para el sector del esquí en Catalunya, Nadal defendió la unión de las estaciones de La Molina (empresa pública) y Masella (privada), bajo una sociedad gestora única que explotaría una sola instalación.
El proyecto incluye una ampliación hacia el Berguedà buscando la unión con la pequeña estación de Coll de Pal, creando así, el dominio de mayor entidad de todo el Pirineo Oriental.
Actualmente, existe un forfait para las dos estaciones bajo el nombre comercial de Alp 2500 que permite esquiar en las dos estaciones con un solo pase. Esta temporada, las dos estaciones han recibido más de 700.000 esquiadores.