Pese a que se abrió el acceso con Francia, el port de Pimorent continuaba ayer por la tarde cerrado al acceso rodado. También estaba cerrado el acceso al Serrat y al port d'Envalira. En el resto de la red viaria la situación estaba totalmente normalizada por la tarde.
Las estaciones tuvieron que cerrar puertas porque las condiciones atmosfericas adversas impedieron que se llevasen a cabo los acondicionamientos necesarios para a la apertura, tal como manifestaron fuentes de Grandvalira.
Respecto a Ordino-Arcalís, al mal tiempo se añadió que el acceso a partir del Serrat estaba cerrado. De hecho, Pal-Arinsal recibió esquiadores y, aún así, las instalaciones no estuvieron abiertas al cien por cient. Así, en el sector de Pal se abrieron el 80% de las pistas y el 60% de las instalaciones, y en Arinsal, el 55% de las pistas y el 60% de las instalaciones.
Pese a los inconvenientes que el mal tiempo supuso para las estaciones, lo cierto es que la nieve caída ha hecho aumentar los grosores de nieve de manera considerable. De hecho, fuentes de Grandvalira remarcaron que solo en el sector de Pas de la Casa-Grau Roig se contaron 70 centímetros más de nieve que la jornada anterior. De hecho, esta nevada hará que las condiciones de la nieve hasta el final de la temporada sean immejorables.
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