La Diputación de León costeará con una partida cercana a los 130.000 euros la colocación de los necesarios paravientos de la estación de esquí del Morredero. Las obras, previstas para el mes de septiembre, permitirán que a diferencia de campañas anteriores, la nieve que caída en la zona no se disperse, y con ello mantener las condiciones idóneas de espesor para su uso público.
Concedida por la administración provincial, esta partida supondrá que a lo largo de la estación puedan ser colocados casi tres kilómetros de paravientos, vallas de madera cuyo desempeño es hacer de freno al un viento que en la pasada temporada de esquí imposibilitó que la estación abriera sus puertas con normalidad.
Precisamente, de los dos días que el Morredero estuvo abierto al público, con los nuevos medios puestos en marcha entre septiembre y agosto las previsiones apuntan entre siete y nueve fines de semana como mal menor.
Respecto al resto de objetivos para la campaña de nieve, la Asociación de Amigos del Morredero se plantea la habilitación de pequeñas estaciones así como empezar la construcción de un edificio de aseos de algo más de cien metros cuadrados, infraestructura necesaria para complementar la oferta que la estación debe empezar a aportar en los próximos ejercicios y, que según sus gestores, por sus condiciones y ubicación, tiene todas las posibilidades de convertirse en un referente en el noroeste español.
El remonte, más cerca de ser reparado
Los responsables de la Asociación de Amigos del Morredero y el Ayuntamiento de Ponferrada podrían estar muy cerca de llegar a un acuerdo para que la administración local se comprometa a arreglar el remonte estropeado desde hace tiempo. Las bajas temperaturas y el viento fueron en su día las causantes de una situación que después de varias reuniones entre las dos partes puede verse solventada y con ello beneficie al uso que las personas que acuden a la estación hacen para poder acceder a la zona más alta.
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