La gran expansión urbanística de San Isidro y la construcción de la estación de Fuentes de Invierno, procesos que ya están en marcha, marcan un punto de inflexión en el devenir de las instalaciones invernales de la Cordillera, cuyo futuro pasa por la creación de un dominio esquiable común con forfaits únicos y, más a largo plazo, por una gestión conjunta a través de una sola empresa que, para el gusto del Gobierno del Principado, debería aunar capital público y privado.
La Dirección General de Deportes del Principado considera que la construcción de Fuentes de Invierno, a escasos metros de San Isidro, supone un buen punto de partida para comenzar a negociar con Castilla y León el futuro de los complejos invernales del Cantábrico. Un primer paso será acordar la conexión entre San Isidro y Fuentes de Invierno, operación que está incluida en el proyecto de la estación de esquí, diseñado por la empresa andorrana Semsa.
De acuerdo con este documento, la unión de ambos complejos se efectuaría a través de las vertientes orientadas al Suroeste del valle de Riopinos, donde, debido a la fuerte pendiente, está prevista la apertura de caminos que faciliten el trasvase de una a otra estación a los esquiadores menos expertos. Además, las condiciones orográficas del terreno y la considerable altura sobre el nivel del mar obligarán a determinar dos puntos de confluencia, unidos por un telesilla de tipo desembragable.
El Gobierno regional considera que la conexión entre ambas estaciones debe iniciar una política de colaboración que lleve a una gestión conjunta de las instalaciones y, a posteriori, a la creación de un organismo que gestione todas las instalaciones invernales de la Cordillera, incluyendo la que un grupo de empresarios privados quiere construir en el puerto de San Glorio, para lo que cuenta con el apoyo de la Diputación de León, y la de Leitariegos.
Otras experiencias
La gestión conjunta de áreas esquiables es una experiencia que se viene desarrollando con notable éxito en Andorra, donde, por poner sólo un ejemplo, la conexión física de Soldeu y Pas de la Casa formando el dominio de Grandvalira ha obtenido un magnífico resultado. Además, en el Principado pirenaico también es frecuente que instalaciones cercanas se unan para ofrecer a los visitantes forfaits únicos.
Aragón también se ha apuntado a este sistema. Las estaciones de esa comunidad autónoma dependen de Montañas de Aragón, S. A. (Aramon), una sociedad holding que está integrada a partes iguales por el Gobierno regional e Ibercaja.
Aramon integra las instalaciones de Cerler, Formigal, Javalambre, Panticosa y Valdelinares, que, en conjunto, representan la mayor superficie esquiable de España. Los principales objetivos de Aramon son consolidar y potenciar la economía de las montañas aragonesas, con especial atención al sector de la nieve, aunque sin renunciar a otras actividades de diversificación que permitan romper con la estacionalidad actual de muchas zonas.
La presencia de la Administración regional vela por el carácter público de la oferta de la sociedad.
Fuente: