Este despido, según los trabajadores, “deja la obra del segundo túnel de Vielha bajo mínimos y sólo queda un retén de personal”, algo que no se entiende cuando esta infraestructura está considerada como urgente y prioritaria para el territorio, principalmente por temas de seguridad.
Las constructoras, según los trabajadores, culpan al Ministerio de Fomento que no las apoya económicamente en la obra, al no tramitar documentación necesaria para que lleguen fondos a la obra.
Entre los trabajadores que serán despedidos a partir del próximo martes (ayer se les dió el previo aviso) se encuentran el personal de oficinas, administración, supervisión de medio ambiente, topógrafos, personal que estaba instalando la electrificación y de tareas de la obra exterior.
De esta forma, sólo quedarían trabajando en esta faraónica obra unas 20 personas, principalmente en tareas de excavación.
“Nadie entiende cómo el Ministerio de Fomento puede no hacer correr los papeles de esta obra para que le llegue dinero. Ahora con este despido sólo quedará un retén de trabajadores ya que una obra no se puede abandonar”, afirmaron ayer fuentes de los trabajadores.
Las mismas fuentes señalaron que este despido de empleados llega en un momento en el que hay mucho trabajo en el túnel, “ahora se está revistiendo y se está poniendo la instalación eléctrica”.
Entre los trabajadores despedidos hay algunos que realizaban cometidos que estaban en pleno apogeo en la obra.
Por su parte, fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Lleida señalaron ayer que este despido de personal corresponde “a un reajuste en el régimen interno de las empresas” y insistieron en que “la obra del segundo túnel de Vielha sigue el ritmo de trabajo normal, el curso administrativo previsto y el plan establecido”.
Fuente: