La mala temporada que están padeciendo las estaciones de esquí debido a la falta de nieve en las pistas, está repercutiendo directamente en la ocupación hotelera de la zona.
El presidente de la Federació d’Hosteleria de Lleida, Juan Antonio Serrano, aseguró ayer que esta escasez de nieve en las principales pistas de esquí, a excepción de la Val d’Aran está comportando un importante descenso en la ocupación hotelera al año pasado. Así, según Serrano, en el Pallars Sobirà y el Jussà la ocupación hotelera ha descendido entre un 30 y un 20% según los establecimientos. “En la mayoría de los hoteles no han conseguido llegar al 30% como consecuencia de la falta de nieve en las pistas, mientras el año pasado en estas fechas la ocupación rondaba el 50%”.
Precisamente esta falta de nieve es la que ha obligado a los organizadores de la XVIII Marxa d’Esquí de Fons prevista para el próximo 23 de este mes a aplazarla hasta el 19 y 20 de febrero.
Un ejemplo de la situación que vive la gran mayoría de los hoteles de montaña, y más los que están cerca de las pistas, a excepción de los de la Val d’Aran que se mantiene con un 85% de ocupación porque es la única comarca que dispone de sus pistas abiertas y en buena condiciones, es el Hotel Condes del Pallars de Rialp que se encuentra al 70% de su capacidad, cuando en las mismas fechas del 2004 estaba al 100%. El responsable del complejo explicó que el turismo cultural se está manteniendo. No obstante éste sólo representa el 10% del total en estas fechas.
El director del Patronat de Turisme de la Diputación de Lleida, Xavier Moncayo, aseguró que el turismo cultural y de naturaleza se está manteniendo en la montaña con unas cifras similares en general a las de 2004, porque corresponde a un tipo de turismo que no busca el esquí. Moncayo reconoció sin embargo que las solicitudes de información en las oficinas de turismo de montaña han experimentado un ligero descenso respecto a la temporada pasada.
En general durante la semana los hoteles registran una ocupación del 50% gracias a los grupos de escolares que esquían, mientras que en los fines de semana las reservas descienden porque los turistas optan por instalaciones en las hay nieve para esquiar. Sin embargo, por el momento no se han registrado importantes anulaciones. Respecto a las reservas, éstas han descendido en más de un 40% esta temporada como consecuencia directa de la falta de nieve en las pistas.
Por otro lado, en l’Alta Ribagorça, después de otoño poco generoso en lluvias y, por tanto, en setas, los establecimientos de hostelería de la comarca están sufriendo un annus horribilis en lo que a turismo de invierno se refiere, ya que la falta de nieve en la estación de Boí Taüll está perjudicando no sólo a las pistas de esquí, sino a todos los agentes socioeconómicos que viven de esta práctica.
Debido a esta crisis, que algunos achacan no sólo a la falta de nieve, sino a la falta de euros en los bolsillos, está afectando a comercios, bares, restaurantes, hoteles y casas de turismo rural de toda l’Alta Ribagorça, que no consiguen llenar ni la mitad de sus instalaciones.
Según el responsable de la Federació de Hosteleria, la ocupación en los hoteles de la comarca es del 30%, un 40% inferior a la del 2004, que rondaba el 70%. Dos de los hoteles más grandes de la Vall de Boí son un buen ejemplo de ello, porque ambos sólo cuentan este fin de semana con una o dos habitaciones ocupadas, menos de media docena de personas hospedadas, lo que da una idea de la debacle que se avecina si al cerrar la temporada todavía no ha nevado.
En bares, restaurantes y tiendas no recuerdan un invierno tan penoso durante la última década y se resignan a mantener abierto aunque no haya clientela. Todos esperan a que nieva a finales de este mes o principios de febrero para asegurar, almenos, la ocupación durante los días de Carnaval y la Semana Santa que este año cae a mediados de marzo. Serrano subraya que como consecuencia de que la Semana Santa se adelanta por cuestiones de calendario, se recortará la temporada con lo que el sector teme importantes pérdidas económicas si no nieva en las próximas semanas.
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