HUESCA.- La provincia de Huesca recuperó ayer el pulso, poco a poco, tras el intenso temporal en el que se había visto envuelta durante las jornadas del viernes y sábado. No obstante, el sábado por la noche volvió a nevar en algunos puntos del Pirineo, lo que propició que el domingo fuera de nuevo preciso el uso de cadenas para transitar por diez tramos carreteros, a lo largo de un total de 222,28 kilómetros. Además, en toda la provincia hizo mucho frío.
Las comunicaciones afectadas fueron la N-330, entre Jaca y la frontera; la A-1205, entre Jaca y La Peña; la A-1602, de Berdún a Ansó; la A-1603, entre Santa Cilia y Bernués; la A-2605, de Jaca a Hecho por Aísa; la A-176, Puente la Reina-Ansó; la A-132, entre Salinas y Bailo; la A-136, de Biescas a la frontera; la A-1604, desde Molino y el Puerto de Serrablo; y la A-139, entre Benasque y Los Llanos. Como se puede apreciar, la mayoría de las comunicaciones afectadas se localizaron en la comarca de la Jacetania, con siete tramos con cadenas, y en menor medida en Alto Gállego (dos tramos con cadenas) y Ribagorza (uno).
En el siguiente parte de la Subdelegación del Gobierno de Huesca, emitido una hora después, se añadía a la lista el itinerario que discurre entre Bielsa y la frontera, en el Sobrarbe, pero se había avanzado en la limpieza de la N-330, donde sólo quedaba nieve entre Villanúa y la frontera.
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