Boí Taüll se presenta en Madrid apostando por el esquí sin colas

La estación leridana ha remodelado la nueva zona de principiantes e instalado dos cintas transportadoras de más de 230 metros

La estación leridana de Boí Taüll Resort, la más alta de los Pirineos (2.020-2.750 metros), apuesta por el esquiador debutante, ya que ha llevado a cabo una remodelación en la nueva zona de principiantes e instalado dos cintas transportadoras de más de 230 metros, explicó en la presentación hoy en Madrid de la temporada de esquí 2003-04 su Consejero Delegado, Jordi Sabaté.

Con las nuevas cintas transportadoras, bautizadas con el nombre de Irgo y Viuet, Boí Taüll ampliará la capacidad de transporte en 2.800 personas por hora, y pasará de los 13.830 a los 16.710. "Boí es una estación para cansarse de esquiar y no hacer colas, ni en los accesos ni en los remontes", indicó Sabaté.

De hecho, el esquí sin masificación, una estación familiar y las actividades de ocio, cultura y deporte de aventura que proporciona el único resort de montaña de España son las tres bazas que las distingue, según su Consejero Delegado, del resto de las estaciones del país.

Además, Boí Taüll Resort, que dispone de 42 kilómetros de pistas, 8 restaurantes y 1.100 plazas hoteleras, ha ampliado el material de alquiler con nuevos esquís carving de gama alta y media, cascos y snowblade, rediseñado el plano de las pistas y renovado la Q de calidad de Estaciones de Esquí y Montaña.

Durante la próxima campaña están previstas actividades especiales como un descenso popular con antorchas, un concurso de disfraces en el carnaval y una exhibición de todas las modalidades en el aniversario de la estación el 5 de enero, 21 de febrero y 6 de marzo, respectivamente.

La pasada temporada Boí amplió en 48 la red de cañones de nieve artificial con lo que se garantizó la nieve desde los 2.020 metros hasta los 2.550, dispuso de 6 kilómetros más de pistas, triplicó la superficie del Parque Infantil de Nieve y entró en funcionamiento el Xicoia Snow Park, un área de 40.000 metros cuadrados con barandillas, saltos y 'bumps' para esquiadores y snowborders expertos.