El "aterrizaje" en Toronto ya fue complicado. El control de inmigración se nos complicó más de lo previsto. Íbamos sólo con billete de ida, nuestro fajo de pesos y algunos euros en las cuentas. Sin embargo los agentes de aduanas entendieron que íbamos a buscar trabajo sí o sí, por lo que sólo nos dejaron 2 meses para estar en Canadá. Suficiente según ellos para conocer estaciones.
Una vez superada esta etapa, y pensando en la nueva situación (nuestra idea original era pasar seis meses en Canadá ), llegamos a Calgary, desde dónde teníamos que decidir qué hacer los próximos meses. Primera parada en una casa de cambio, donde sorprendentemente no habían llegado las noticias de Argentina y nos cambiaron los pesos a dólares sin problema!
Ahora ya con dinero y muchas ganas de esquiar, teníamos que elegir estación. Las opciones eran casi infinitas Whistler-Blackcomb/Kicking Horse/Sun Peaks/Lake Louise/Panorama... Unos cuantos días de duda después, elegimos Revelstoke por varias razones: es de las estaciones más nuevas de Norteamérica, tiene el mayor desnivel esquiable (¡1713 metros!) y a la vez es pequeña (2 sillas: The Stoke & The Ripper) y una cabina (The Revelation). Y el factor clave: ¡entre 9 y 14 metros de precipitación anual!
Mapa de pistas de Revelstoke Mountain Resort
Las llegadas son increíbles. Conocimos a nuestros nuevos compañeros de piso franceses (Will, Bapt y Clem) y canadiense (Cameron). A través de ellos, a toda una comunidad de jóvenes atraidos por las montañas y la nieve, principalmente canadienses, franceses, escandinavos, e incluso dos españoles (Jaime y Víctor). También a Rudy, que viajaba con su "autocaravana". Compramos el forfait de temporada y a subir casi todos los días.
Nuestros compis de piso. Will, Clem y Cameron, falta Baptiste ("THE dude")
La ¿autocaravana? de Rudy.
El principal fuerte de Revelstoke es el terreno. En nuestra estación habitual, todos tenemos un lugar "escondido" al que ir cuando nieva. En Revelstoke esos lugares están por todos lados, vayas donde vayas tienes bosques, saltos, "pillows", palas increibles y "powder", mucho "powder"!
Fueron dos meses muy intensos, además de esquiar pudimos ir a unas termas escondidas, hacer travesía a menos 30 grados en Rogers' Pass, ganar un concurso de video y acompañar a Niki Salencón (lo conocimos en Argentina) en su primera prueba dentro del FWT.
Pero todo lo bueno se acaba, así que con nuevos proyectos en mente y mucha ilusión partimos, con escala en Nueva york.
Mucha nieve y gran montaje en el FWT. Impresionante la cara norte del Mackenzie
Primera prueba de Niki en el FWT, en la que quedó... ¡quinto! Y video ganador de VIDIOTS
Resumen de estos días dentro del Freeride World Tour.
Un día en Revelstoke, autobús para ir a la estación, amigos, mucho esquí y cena en casa.
Concurso de video "Videots". Ganamos con el video de Niki y nos bebimos el premio entre todos.
Roger's Pass
¡Probando el telemark por primera vez!
Uno de los pocos días soleados en Revelstoke, abajo el río Columbia
Esperamos que os haya gustado, adivina la próxima etapa...