En mi familia nunca fuimos de Attenhofer. Aquella marca de esquís abundaba por doquier a nuestro alrededor durante los años sesenta y principios de los setenta, pero nadie en casa tuvo Attenhofer. Hubo antiguos Skandy, básicos Silver Streak y Regency, y, enseguida, Elan de madera, Fischer o Rossignol, pero nunca Attenhofer (ni tampoco Sancheski), supongo que cuestión de a quién le compraba los equipos mi padre. La verdad es que, para aquella época, los Attenhofer no disfrutaban de verdadera reputación de calidad. Era demasiado tarde para ello. Había sido una marca de gran prestigio en décadas precedentes, pero, a partir de los sesenta, los esquís que la firma comercializaba en España eran de fabricación nacional, basada en tecnología ya superada por otros competidores y por la propia casa madre en Suiza. En cualquier caso, la abundancia de ejemplares a mi alrededor durante mi infancia me ha hecho sentir curiosidad retrospectiva y me ha motivado para indagar sobre la marca.
Adolf Attenhofer nació en Davos en 1892 y falleció en 1955 en Zúrich. Se formó como tapicero en Bruselas y Praga, antes de titularse profesionalmente en 1918. Mientras el joven Adolf trabajaba como aprendiz en la tienda de deportes y talleres Ettinger en Davos, ganó un título combinado de salto y slalom en los Campeonatos de Suiza de 1917. Ese tipo de campeonato integral sugiere cierta influencia de los orígenes noruegos de las pioneras competiciones del esquí, pues era muy común, en las inmediaciones de Kristiania (ahora Oslo), aglutinar concurso de saltos con recorridos de habilidad sobre esquís. Aquel negocio de Rudolf Ettinger tenía un taller de esquís y trineos, no en vano a su propietario se le consideraba como el inventor del trineo de Davos. En su empleo, Attenhofer desarrollaba mejoras en los esquís, fijaciones, bastones y algunos otros elementos de equipamiento para la práctica. Por ejemplo, estableció un método para determinar la localización de la puntera de la fijación en relación con la competencia del esquiador.
A lo largo de su vida, Adolf Attenhofer registró unas 60 patentes (entre 1915 y 1955) relativas, principalmente, a equipamiento para el esquí (incluyendo cantos y fijaciones), ropa, artículos para limpiar zapatos e incluso resortes para colchones y otras piezas no relacionadas con el deporte.
En 1924, Attenhofer abrió una pequeña tienda de artículos deportivos en Zúrich. En 1925 dejó Ettinger para empezar a fabricar sus propios esquís en Zumikon (cerca de Zúrich). Además, ofertaba esquís desmontables, así como una base roja llamada Temporit, más dura que el hickory (nogal americano). En aquella década adquirió las exitosas fijaciones Alpina. En 1934 levantó una fábrica en Zumikon, que se acabó convirtiendo en la segunda factoría de esquí más grande de Suiza a lo largo de las décadas siguientes (alguna fuente asegura que llegó a ser el principal productor de esquís del país). Aparte de esquís de alpino, desmontables y de fondo, vendía otro tipo de material como cantos, bases para las suelas, ropa, gafas de sol e incluso piolets. En los años treinta se hizo con la licencia de uso de Splitkein (una estructura para esquís compuesta por hasta 21 partes de maderas ligeras y pesadas pegadas), innovación de la compañía noruega Oestbye en 1936. Así que aquel mismo año (1936) Attenhofer comercializó su modelo Splitkein «considerados para la época como los Rolls Royce de los esquís». Aquello, sus esquís de madera laminada, fue lo que le hizo más famoso en su primera fase como industrial autónomo del esquí. Siempre en actitud de innovación y desarrollo, en seguida se dio cuenta de que podía mejorar el rendimiento de giro de los esquís de alpino haciendo los esquís laminados más blandos a la flexión, sin sacrificar su durabilidad. Su descubrimiento lideró una generación de esquís de madera de primer orden para slalom. De su imitación surgieron ejemplares tan exitosos como el Rossignol Olympic 41 y, tras la II Guerra mundial, los laureados Kastle.
Fijaciones Alpina colocadas en unos antiguos Attenhoher. (Imagen: antiqueskishop.com).
Publicidad de fijaciones Alpina de Attenhofer, de 1929. (Imagen: swissskimuseum.com)
Bonito cartel publicitario de Attenfoffer de 1940. (Imagen: swissskimuseum.com).
Poco después de finalizar el gran conflicto bélico, simultáneamente, Attenhofer en Suiza y Paul Michal (Dynamic) en Francia estuvieron entre los primeros en dirigir su mirada hacia los plásticos como mejores superficies de deslizamiento. Tras su búsqueda y experimentación, lanzaron esquís con bases de Cellulix y Naltene. A aquellas alturas temporales, en 1947, Attenhofer adquirió la fábrica Ettinger en Diessenfohen (su antiguo patrón) y poco después se fusionó como AKA Company (una especie de holding que integraba a Attenhofer, Kandahar y Allais).
Los JJOO de St. Moritz (1948) supusieron un importante espaldarazo comercial pues el equipo austríaco ganó cinco medallas con esquís Attenhofer, y el campeón suizo Karl Molitor (11 veces vencedor de las carreras de Lauberhorn entre 1939 y 1948) obtuvo la medalla de bronce en descenso, además de la de plata en combinada, utilizando también un par de Attenhofer. ¡El mismo par!, de 220 cm de hickory, porque en aquella época el COI obligaba a correr todas las pruebas con el mismo par de esquís.
Agresivo estilo de Karl Molitor en 1930. (Imagen: jungfrauzeitung.ch; foto: zvg).
Otra imagen de Karl Molitor en acción. (Imagen: sport.ch).
Entre los modelos ofertados por Attenhofer en aquella época figuraban el Favorit, Furrer-Topflit Spitzenflizer (uno de los primeros con base sintética), Molitor, Special y Sport.
Un modelo de 1949. (Imagen: swissskimuseum.com)
Seth Masia es un prolífico historiador del esquí y su equipamiento que publica con frecuencia y generosidad informativa desde los EEUU. A continuación, resumo algunos de los aspectos más relevantes de sus explicaciones con respecto a la llegada del aluminio a Attenhofer.
La historia del aluminio en los esquís se inició en los EEUU y tuvo que ver con dos empresas dedicadas a la fabricación de aviones, principalmente militares, porque fueron muchos los adelantos y patentes relativas a materiales y adhesivos aeronáuticos desarrollados antes, durante y tras la II Guerra Mundial. Una de aquellas empresas era Vought-Sikorsky, que se mantuvo muy ocupada después, fabricando helicópteros y cazas empleados en Indochina y Corea. A causa de ello, abandonaron sus proyectos de artículos de consumo, entre los que estaban los esquís de gran componente metálico (previamente habían llegado a fabricar mil pares de su original Truflex, un sándwich Metalite con núcleo de madera que fue el primer esquí de aluminio visto en producción industrial). Así que el equipo TEY, compuesto por quienes desarrollaban aquella línea de producción dentro de Vought, salió de la corporación y puso en marcha su propia fábrica. Vought tenía una patente del diseño Metalite con núcleo de madera, así que el TEY Alu 60 era una especie de viga hueca utilizando un sección sombrero de elementos de aluminio anidados en la parte superior y una base de aluminio (inicialmente remachadas y más tarde pegadas juntas con Redux). El esquí, como si fuera un resorte no amortiguado, se mostró prácticamente inmanejable en nieve dura.
«A principios de los 50, la compañía TEY inventó la producción de nieve artificial. Aquella tecnología liquidó instantáneamente el esquí Alu 60, por lo que la compañía adjudicó una licencia de producción a Attenhofer en Suiza. Adolf Attenhofer se asoció con el fabricante de artículos deportivos Charles Dieupart para fabricar el esquí en Francia. En 1956 Dieupart, con la ayuda del corredor James Couttet, resolvió el problema de “esquiabilidad” rediseñando el esquí con un núcleo de madera bajo la placa superior que hacía de sección sombrero. Tal esquí se convirtió en el Aluflex y fue un éxito comercial en Francia. Una década después, tras la fusión de Aluflex con Starflex con la que nació Dynastar, el director deportivo Jean Liard puso una placa plana sobre el canal de la sección sombrero para crear el fabulosamente exitoso Dynastar MV2 GS de competición. Dynastar llamó “omega” a aquel nervio superior, y llegó a ser el sello de identidad de la fábrica durante décadas». (Seth Masia, traducción propia).
Publicidad de los revolucionarios A-15, en 1955. (Imagen: galerie123.com).
De arriba hacia abajo: Attenhofer Metallic, TEY Alu 60 y Vought Truflex. (Imagen: skiinghistory.org; foto: Jeff leich, New England Ski Museum).
Acción expositiva de Attenhofer. Detalle interesante: conviven fijaciones de cable con otras "automáticas".(Imagen: bridgemanimages.com).
Fábrica Attenhoffer en 1941. (Imagen: bridgemanimages.com).
Fábrica Attenhofer en 1957. (Imagen: gettyimages.es).
1957 (Imagen: gettyimages.es).
Poster publicitario de los Attenhoer A15 Jet de 1964. (Imagen: originaleskiposters.com).
Mismo propósito y modelo de esquís del año siguiente: 1965. (Imagen: swissskimuseum.com).
Detalle de la composición de la sección central del Attenhofer Super Jet Comander. (Imagen: revista Skiing, diciembre 1966).
En aquella época (última), en los tempranos años setenta, los modelos metálicos se denominaban Jet-LSK, Jet 11, Jet 22, Jet 33, Jet 55 RS y Jet 66; mientras que los de fibra de vidrio eran Glasstar, Glasflex, Fiberglass, Topglass y A-06. Al principio de pertenecer a Maxel, esta firma comercializó durante algún tiempo un modelo denominado Team RS bajo marca Attenhofer.
Publicidad interior en revistas de 1967. Fijaciones automáticas y esquís Attenhofer. (Imagen: skitalk.com; Dave Petersen).
Publicidad de esquís Attenhofer en 1969. (Imagen: skitalk.com: Dave Petersen).
Peculiares fijaciones Alpina. Parecen una evolución entre las de cable y las automáticas. La imagen superior muestra la puntera cerrada, la siguiente abierta. Se acciona con una leva al estilo de las de cable. La imagen de abajo muestra la talonera, que es fija. Para ponerse los esquís primero hay que abrir la leva (eso mueve un poco la puntera hacia adelante), después se coloca bien el talón atrás, finalmente se cierra la leva y la puntera acaba de sujetar la bota por delante. (Imagen propia).
Colección de espátulas de Attenhofer. No están ordenadas cronológicamente, aunque no andará muy lejos si desplazamos la blanca final para colocarla delante de las dos naranjas. Las tres de la derecha de arriba corresponden (casi seguro) a modelos fabricados por INDESA en España. Las tres de la derecha de abajo, lo mismo. Pregunta que me queda en el aire ¿Es la ballesta del anagrama (en España) un homenaje a Guillermo Tell?. (Imagen: montaje propio).
Muy raros de ver en España, y desconocidos para mí hasta haber escrito este artículo, poco a poco voy encontrando pistas o imágenes de algunos ejemplares Maxel. (Imagen: recorte de una foro de una revista de sas-ski.ch de los años 70).
La trayectoria de Maxel ha sido errática. No es fácil seguirle la pista. Empieza en 1969 tras la compra de Attenhofer. Ese año presentaron equipamiento deportivo con la presencia del esquiador toscano Zeno Coló (de gran éxito en las décadas de los 40 y 50 del siglo XX). A partir de 1974 suministró material al equipo nacional italiano. Aquel mismo año, unos esquís Maxel establecieron un nuevo récord de kilómetro lanzado (164,308 km/h). Su presencia en la competición se mantuvo bastante visible a lo largo de la década de los setenta con, por ejemplo, un campeonato italiano de descenso (1976) y de gigante (1978). A partir de entonces se pierde su pista y la marca, en algún momento, llega a desaparecer hasta que, en 2007, regresa con nuevos productos. Presumiendo de capacidad de innovación, mencionan haber sido responsables de primer esquí con núcleo de ABS y de su bestia: el Maxel GS X2, rápido en los descensos de Copa del Mundo y competiciones de gigante, etc.
La actualidad vuelve a resultar incierta. Aunque hablan de «materiales de precisión, ensamblados absolutos y toques artesanales», así como de sus gamas Hot Run Pro, Max Monkey, Delta Force y Alta Mount, y de que es fácil encontrar imágenes de catálogos del siglo XXI en la Red, la verdad es que su página web oficial ha dejado de funcionar, y apenas se les puede seguir la pista mediante cuentas de Facebook ubicadas en terceros países, las cuales muestran algo de actividad (poca) hasta 2018. Únicamente una, localizada en la República Checa, parece seguir algo viva.
Parte de un catálogo antiguo de Maxel para los EEUU (Imagen: vermont-community-newspaper).
Unos Maxel del siglo XXI en acción (Imagen: maxel-ski facebook).
En cuanto a Attenhofer, la última pista que he encontrado como producto corresponde al año 1972 y es una completa frikada (una rareza superlativa). Se trata de un vinilo (single) de producción propia, que contiene dos temas que no he conseguido escuchar, pero que, según parece, proponen sonido de fondo para ejercitarse con la intención de ponerse en forma. Fueron compuestos y grabados por un músico suizo llamado Hans Peter Hising y responden al título Rythmes La Grande Forme Avec Attenhofer. Estrambótico final para lo que fue una firma de leyenda.
Carpeta del single La Grande Forme avec Attenhofer. (Imagen: discogs.com)
Contenido parcial del álbum: una tabla de ejercicios para practicar con la música. (Imagen: discogs.com).
El single en detalle. (Imagen: discogs.com).
En algún momento que no soy capaz de ubicar temporalmente, la empresa española INDESA (Industrias Deportivas SA), localizada en Barcelona, conseguía licencia para la fabricación y venta de esquís Attenhofer en nuestro país. La empresa ya mostraba actividad productiva en la década de los años cuarenta, que tengo entendido (aunque no corroborado) que fue cuando se fundó. Inicialmente fabricaba raquetas de tenis y palos de golf de madera. Además de los esquís, en la década de los años cincuenta se especializó en la fabricación de sticks de hockey sobre patines, de gran calidad, a los que adjudicó una marca propia llamada Reno. «La marca de los sticks» firmó un acuerdo de colaboración con el FC Barcelona (que por lo visto sigue vigente) por el que se convirtió en su principal proveedor. Reno sigue existiendo, ahora como marca independiente. En los años noventa, Josep Vigueras, jugador de hockey sobre patines y emprendedor, asumió la dirección de Reno ampliando la gama de productos fabricados dentro del ámbito del hockey sobre patines, y abriendo camino a nivel internacional. Probablemente, el objeto más icónico de Reno haya sido su stick Reno World Champion que, con las lógicas variaciones evolutivas de mejora, se sigue ofertando con una estética prácticamente idéntica a la que tuvo desde el momento de su puesta en el mercado. Yo mismo fui usuario de un World Champion en los años ochenta, cuando ejercí de entrenador de un equipo a orillas del Cantábrico.
Detalles de stick Reno World Champion. El de abajo era el mío, que ya desapareció. (Imagen: montaje propio).
Publicidad variada de productos fabricados por INDESA. Incluye esquís Attenhofer "made in Spain". (Imagen: todocoleccion.net).
Dentro de los modelos fabricados y vendidos en España he logrado informarme acerca de los siguientes. El Allround fue un esquí fabricado por contrato para el ejército español, que lo utilizaba indistintamente para aprendizaje en alpino y maniobras de travesía. Como la mayoría de los esquís militares posteriores, estaban acabados en blanco.
De madera, bastante básico y sencillo, también completamente blanco, estuvo el modelo Sprint. Tenemos dos pares en la familia, regalados o recuperados a través de terceros. Tienen cantos atornillados, y dos tipos diferentes de bases de deslizamiento. Como suelas, uno de los pares presenta una simple capa aparentemente pintada sobre la madera, mientras que el otro muestra una capa sintética independiente.
Basándome en mis recuerdos de niñez, puedo afirmar que abundaban mucho unos de color naranja, con la A de Attenfoher llenando toda la espátula, los cuales, al menos en el entorno de Alto Campoo, se convirtieron en superventas. Localizado uno de ellos, he visto que era un Sprint posterior, con el añadido nominal 747. También hubo otros llamados Thunderbird, con una serigrafía más moderna, con grandes letras blancas sobre superficie azul y una figura que pretendía sugerir velocidad.
Una colección del modelos al azar. De izquierda a derecha: Combination o Combi, fabricado por INDESA; Sprint (INDESA); Sprint 747 (INDESA); Thunderbird (INDESA); modelo desconocido (fabricados en Suiza); A15 Racing (por logotipo de espátula, edad aparente y denominación, este modelo es fabricado ya por Maxel). (Imagen: montaje propio).
Vamos a cerrar capítulo presentando al esquiador más famoso de la historia de Attenhofer. No lo fue por sus títulos deportivos, ni por sus habilidades sobre los esquís. Lo fue por otros motivos. Toda una celebridad mundial cuyo nombre sigue siendo citado hoy en día, a diario, por miles de personas de todo el mundo, y que figura estampado en algún objeto de cualquier rincón o estantería de la mayoría de los hogares del planeta, o aparece en las pantallas de las televisiones inteligentes cuando se encienden. Me estoy refiriendo a Walt Disney. Y nos acercamos a su experiencia esquiadora a través de la información aportada por Mary Beth Culler.
Disney se hizo bastante aficionado a la práctica deportiva a partir de que su médico se la recomendase para combatir los nocivos efectos del estrés. Se aficionó al esquí a mediados de los años treinta tras sufrir una lesión en el cuello jugando al polo, y pensar en buscar actividades menos peligrosas. Así que empezó a disfrutar de él en sus vacaciones familiares invernales.
Viejas fotografías de Walt Disney con esquís. (Imagen: waltdisney.org).
Disney se hizo amigo del campeón austríaco Hannes Schroll en Badger Pass, mientras recibía clases con su mujer Lily. Schroll era el director de la Escuela de Esquí Yosemite y estaba involucrado en el desarrollo de la estación de Sugar Bowl en el norte de California. Posteriormente, Disney invirtió en aquel proyecto, y el austríaco le recompensó honoríficamente cambiando de nombre al Pico Hemlock, sustituyéndolo por el de Monte Disney. Sugar Bowl se convirtió en uno de los destinos favoritos de la familia Disney para esquiar.
De izquierda a derecha: Lily, una hija de los Disney, Hannes Schroll y Walt Disney. (Imagen: sierraculture.com).
«En 1960 Disney produjo las ceremonias de apertura y clausura de los JJOO de Invierno cercanos a Lago Tahoe (California) [Squaw Valley]. Seis años más tarde propuso el desarrollo del Mineral King Valley, cerca del Parque Nacional Sequoia, como estación de esquí». El ambicioso proyecto fue finalmente abandonado tras la muerte de Disney y por la presión de los grupos ecologistas.
W. Disney exponiendo detalles del aludido proyecto de estación de esquí. (Imagen: recreati.com).
Otras prácticas deportivas habituales para la familia Disney fueron el patinaje sobre hielo, nadar y la equitación. En cierto lugar de exposición conmemorativa exhiben un par de esquís frecuentemente utilizados por Walt Disney. Son unos Attenhofer que combinan la madera y el metal en su construcción.
Más fotos de Walt Disney con (supongo) sus ¡magníficos! Attenhofer. (Imagen: waltdisney.org).
Por extraño que parezca, descartando la fabricación artesanal a pequeña escala en los primeros tiempos del afianzamiento del esquí alpino en los Alpes, Suiza ha albergado a muy pocos fabricantes de esquís a escala industrial. Aún a riesgo de olvidarnos a alguno, lo podemos dejar en tres. Dos de ellos dejaron de existir. El primero fue Attenhofer, al que hemos dedicado todo este artículo. Otro fue Authier, cuya existencia se prolongó algunos años más pero que acabó desapareciendo, pese al gran prestigio que atesoraba, probablemente por los elevados precios de sus productos. En la actualidad, Stöckli permanece como el único representante suizo que queda y quizás por ello, por orgullo patrio, homenajea a Attenhofer y Authier como predecesores, haciendo mención de ambos en el apartado de historia propia que incluye en su página web. Para los amantes de los recuerdos nostálgicos, del fetichismo del material u otros trastornos parecidos, igual va siendo hora de que localicen un par de tablas Attenhofer por ahí, para poder presumir de tener un par de esquís suizos en su colección, algo que, visto lo visto, ya no es tan común. Y como muestra, me despido con un atractivo ejemplo.
Attenhofer. (Imagen: antiqueskishop.com).
Attenhofer. (Imagen: antiqueskishop.com).