El Cable de Fuente Dé, el Chamonix cántabro
Con cierto retraso, pero al fin saco un ratillo para contar la que parece que ha sido la última esquiada de la temporada. Hace unos cuantos días, recibo un whatsapp de Markitos López con un plan algo suicida pero con una pinta irresistible: ir a Fuente Dé, subir a última hora al refugio de Cabaña Verónica, dormir, esquiar algo al día siguiente y volver pitando a Madrid. Por una vez, la cordillera Cantábrica es la única zona del país que se libra de las tormentas, así que hay que aprovechar la oportunidad!
Sábado 19 de mayo, tras darle unas cuantas vueltas a qué llevar en la mochila, cogemos la última cabina antes del cierre del teleférico a las 18h. Solete, buena temperatura, y porteo nulo, ya que hay nieve desde el plano donde se asienta la estación superior del Cable (1850m)
Recorriendo la Vueltona, un buen horno a esas horas de la tarde...
Cogemos altura poco a poco, se avanza cómodamente! En frente la Montaña Palentina, con tormentas desde el mediodía
Rápidamente se llega a Cabaña Verónica (2330m)
La historia de este refugio es curiosa, pues es la cúpula de una batería antiaérea del portaaviones americano USS Palau. Es extremadamente pequeño (4 literas, una pequeña mesa y una pequeña cocina), y durante años estuvo guardado por Mariano Sánchez. A día de hoy es un refugio libre, y desconozco si habrá pronto un guarda. En cualquier caso, es un sitio espectacular para pasar una noche, ya sea dentro o con una tienda fuera, pues la sensación es de estar en un lugar único.
Secador de botas y pieles natural
Las literas del interior. No es una cama de agua, peeeero...ça va! 
Cerveza, fuet y frutos secos mientras atardece sobre Peña Vieja
Vista desde el interior por el ojo de buey, mirando hacia Torre Blanca
Nos juntamos en la Cabaña nosotros dos, otro par de esquiadores de Durango y un grupo de montañeros y grandes fotógrafos. Alucinante el trabajo que hay detrás de una buena foto, especialmente cuando te toca estar fuera del saco media noche...
Tras un buen atardecer con picoteo, momento cena (vivan los Yatekomo!! ), batallitas y al sobre!
Últimas luces
Espectacular foto de esa noche de Pablo Ruiz. El arco de la Vía Láctea al completo, con las tiendas y la Cabaña en el medio. Si os gusta la fotografía de naturaleza (y si no también), mirad su perfil en Instagram
Amanecer al día siguiente, con la bruma matina sobre Potes y todo el valle del Deva
Tras una noche un poco toledana, despertar al amanecer y un buen desayuno mientras nos activamos con calma, sobaos pasiegos! Tienda no traeremos, pero comida y bebida...
Tras darle unas cuantas vueltas, salimos hacia el pico Torre Blanca, una cara este que le da bien el Sol por la mañana y que habrá transformado lo suficiente para bajarla.
Bajando a los Jous Sengros, para después remontar el valle hacia el Torre Blanca. Nieve bien dura a esta hora de la mañana.
Nos juntamos con los otros dos esquiadores de Vizcaya, otro fisico entre ellos! Gran compañía y mil historietas para contar
En el collado previo a la cima, importantes cornisas...hay que andar con ojo!
Kitos me pilla llegando a cima (2610m). Balcón espectacular
Mirando hacia el norte, Torrecerredo y el valle del Cares allá abajo
Hacia el este, el valle por donde bajaremos, Horcados Rojos, Peña Vieja...
Esperamos un poco a que suelte la nieve, y esquiamos desde la propia cima por un canalón que une la pala con la cumbre. Un poquito de pendiente y algo de hielo en la estrechez para darle un puntito ácido y acto seguido una larga pala de excelente nieve primavera. Tras volver al Jou, ponemos pieles de nuevo y nos dirigimos al pico Tesorero, otro clásico de la zona y con una cara suroeste muy incitante...
Kitos, bajando frente a Torrecerredo, cima culminante de Picos de Europa y de toda la cordillera
Subiendo tranquilamente hacia el Tesorero (2560m). Hace calor y toca empezar a elegir bien las orientaciones
Para todo primerizo en Picos de Europa, impresionante la visión del Urriellu (Naranjo de Bulnes)
Kitos en la cara SW del Tesorero. Un poquito de pendiente al año no hace daño!
Nieve excelente, lástima que los descensos se quedan un poco cortos en esta zona!
Volvemos a terminar tras una bonita bajada en los Jous Sengros. Con el calor que pega, decidimos volver hacia Cabaña Verónica y de ahí bajar tranquilamente de nuevo al teleférico. Charleta con otros esquiadores que van llegando de las primeras cabinas (abren a las 10h! Sacrilegio) y txino txano para abajo.
De vuelta al Cable. Última esquiada...?
Del cocido lebaniego que cayó un poco más tarde no hay fotos, pero os podéis imaginar la cara de satisfacción con la que nos lo comimos...
Y con esto, poco esquí creo que me queda ya esta temporada. Semanas ajetreadas a nivel universitario y el cuerpo ahora pide cambiar las tablas por las zapatillas, los senderos y los pedales. Ni tan mal, de aquel 10 de noviembre en Gourette a este 20 de mayo han sido 6 largos meses...
Hasta el próximo invierno! Foto: Superzuri
Mil gracias a:
Scott España
Que pasada de reportaje 