Al menos los adelantados que se animaron al primer día, a sabiendas de lo limitado de la oferta de pistas, casi no debieron soportar las interminables colas de espera para acceder a los medios de elevación, por lo que pudieron disfrutar del día a pleno.
Tamaño contraste entonces se vio con relación a los brillantes lanzamientos de temporadas pasadas, al menos en cuanto a masividad de concurrencia y clima de fiesta, aunque no todo fue negativo: la nieve que se hizo esperar por fin apareció, y el sol se mostró en todo su esplendor. No es poco, fundamentalmente pensando en lo días que vendrán.
Repasando entonces, ya funcionan medios de elevación, algunas pistas, la escuela de esquí y snowboard, restaurantes y paradores, el centro comercial y rental, y los hoteles Piscis, Aries, Acuario y Escorpio.
Los precios que se observaron en los diferentes servicios que ofrece Las Leñas no escapan a lo que podía esperarse: caros, como siempre (y como en la mayoría de los centros de esquí del país, justo es decirlo), pero consecuentes a lo que se observa todos los años y con un incremento interanual lógico debido al proceso inflacionario que vive el país.
Seguramente en estos días ya se estará habilitando la totalidad del cerro para la práctica del esquí, aunque siempre la pregunta omnipresente en la mente de todos será: ¿está abierta (la telesilla) Marte?.
Imágenes: Valle de Las Leñas
