Cualquiera que me siga ya sabe que me encanta el Freeride World Tour y la competición de Freeride en general. Creo realmente que es la forma de competición más pura de esquí y snowboard. Sin cronómetro, sin puertas, sin bajadas de reconocimiento. Solo un esquiador, una cara de una montaña y las habilidades que pueda demostrar.
Pues bien, llevaba un par de temporadas con la idea de certificarme como juez y este año por fin he dado el salto y he participado como juez de freeride en las competiciones de FWT Junior de Baqueira. Os dejo el vídeo con como fue todo y luego os sigo contando.
En mi afán de que la gente conociera más las competiciones de freeride he hecho de todo: vídeos explicando cómo se puntúa el freeride, top 5 de bajadas, entrevistas a los mejores del mundo (Hedvig Wessel, Kristofer Turdell, Aymar Navarro, Abel Moga, Tanner Hall y muchos más).
Todo esto me llevó hace un par de años a poder comentar en teledeporte la prueba de Baqueira del FWT. Un sueño que ni siquiera sabía que tenía. Me lo pasé genial y fue algo muy intenso. Pero este año me propuse algo más, aportar también de forma directa a que el deporte siga creciendo.
En otoño, el FWT anunció un curso online para certificarse como juez del FWT y me apunté, muchas de las cosas ya las conocía, pero otras eran nuevas. Estuve estudiando y practicando a fondo, de hecho en casa me dijeron que no me habían visto estudiar de esa forma nunca.
El examen consiste en evaluar 17 bajadas de distintas categorías en vídeo, puntuarlas en base a los criterios estudiados y dar un orden de cómo quedarían en la competición. Algunas líneas tienen caídas, otras son muy parecidas. Se requiere mucho detalle, porque no solo es dar un ranking final, hay que entregar las notas sobre cada una de las acciones que ha hecho cada rider durante su bajada.
Lo bueno es que no sólo te aprueban o no, si no que te dan detalles sobre lo que has anotado bien o mal, vamos, una correción en toda regla. De todas formas el examen es el examen y la prueba real era juzgar en persona. El vídeo puedes pararlo, rebobinar y repetir las veces que quieras. Las bajadas reales no.
Era la primera vez, la responsabilidad de juzgar a chavales que han estado entrenando y que para algunos era su primera competición era muy grande. Me lo tomé totalmente en serio, estuve repasando la noche anterior y el mismo día mientras esperabamos condiciones favorables en la zona de Blanhiblar.
Los paneles de jueces se componen de tres jueces. Siempre tienen un juez jefe que ha de tener experiencia previa y un nivel más alto que los otros. Su nota vale lo mismo que la de los otros dos, pero está encargado de que los criterios estén claros, que se adapten a las categorías y a las condiciones. A medida que vas juzgando competiciones, si el juez jefe te da una valoración favorable puedes ir subiendo de categoría para juzgar competiciones de más nivel.
El primer día fue bastante complicado, con algunas categorías decididas por detalles. Mis notas estaban bien, pero esa tarde, junto con el resto de jueces estuve repasando sus notas, preguntando y tomando ideas para intentar optimizar lo que escribía y tener un nivel más alto de detalle de las bajadas.
Al final, no importa tanto si en el momento sumas 3 o 4 puntos por bajar un corredor con velocidad o hacer un gran salto, lo importante es tener datos objetivos para poder comparar dos bajadas y colocar una por encima de la otra.
Una de las partes más interesantes sucede después de la entrega de premios, donde los participantes pueden acercarse a los jueces para preguntar por sus puntuaciones. Ahí es donde podemos dar feedback directo, reconstruir la bajada que hicieron y explicar los fallos o lo que podrían haber hecho mejor para subir su puntuación.
Ah, y al final de todo el finde de trabajo, tuve la suerte de poder hacer una bajada con algunos de los jueces!