En vista de que en Europa no había nieve, el comienzo de la temporada lo hicimos en Aspen. El traslado fue duro, el vuelo a Denver con escala en Filadelfia, y el transfer a Aspen requirieron mas de 24 horas, pero valió la pena.
Esta es la vista desde la habitación
La semana anterior había nevado todos los días
Llegamos a la estación con frío, sol y viento en calma
Al llegar a la estación te invitaban a café con galletas
Y arriba del remonte, a sidra caliente (sin alcohol, mas bien era zumo de manzana), con galletas energéticas
Estas son las vistas desde arriba
Había un metro de nieve
Lució el sol toda la semana
En los remontes principales te esperan los “ambassadors”, que te auxilian en cualquier tema, y te acompañan gratis a hacer un recorrido por toda la estación
Se puede hacer cualquier ruta fuera de las pistas, estando acotado el terreno seguro con carteles indicativos
Esta estación tiene fama por el sol durante el día, y sus nevadas nocturnas
Otras 24 horas de vuelta, viendo el desde el avión altiplano de Colorado (2.000 a 3.000 m) nevado
