La primera carrera de la Copa del Mundo de esquí alpino FIS de la historia se organizó un 5 de enero de 1967 en la estación de Berchtesgaden (Alemania). Al año siguiente también comenzaron ese mismo mes, pero para 1969 ya se adelantó a principios de diciembre. Y así se mantuvo hasta 1986, cuando se decidió celebrar un par de Descensos en Argentina en pleno mes de agosto aprovechando que allá es invierno en ese momento.
Desde entonces se decidió ir alternando de vez en cuando alguna prueba en el hemisferio sur a mediados de agosto, así que para que la pausa no fuera tan grande, se optó también por adelantar algo el calendario. En 1986 se organizaban por primera pruebas de Copa del Mundo en el mes de noviembre. Un par de categoría masculina en Park City Mountain Resort (Utah, Estados Unidos), y otras dos en Sestriere (Italia), ambas el último fin de semana de ese mes.
En 1989 la Copa del Mundo comenzaba de nuevo en agosto, pero en esta ocasión las corredoras se fueron a Las Leñas y los corredores a Thredbo (Australia) mientras el calendario de Europa seguía comenzando el último fin de semana de noviembre.
No es hasta 1993, cuando se decide probar con adelantar el calendario a finales de octubre, organizando un Gigante masculino y otro femenino en e glaciar de Soelden (Austria). La experiencia fue tan buena, que rápidamente Tignes (Francia) quiso sumarse y en 1995 celebraba un Gigante masculino, aunque de momento todavía a mediados de noviembre.
A partir de 1996, Soelden y Tignes se alternan organizando competiciones el último fin de semana de octubre, tanto en categoría masculina como femenina, hasta que finalmente en el año 2000 la estación de esquí austriaca llega a un acuerdo para acoger siempre la carrera inaugural de la World FIS Ski Cup.
Estos días en Soelden andan preparando el estadio de competición, no sin pocas dificultades por las altas temperaturas, para las pruebas del fin de semana del 28 y 29 de octubre. Desde la organización aseguran que nada detendrá la celebración de su 30ª carrera inaugural, aunque para lograrlo han tenido que tirar de ingeniería y mucha experiencia. Desde hace unos años guardan toneladas de nieve de la primavera, y durante todo el verano se queda tapada bajo lonas térmicas junto a la pista FIS de competición.
En estos 29 años que Soelden ha organizado la prueba inaugural de la Copa del Mundo de esquí alpino, tan solo en una ocasión (en 2006) han tenido que cancelar las dos carreras (masculina y femenina) lo que da una imagen de la garantía de nieve que tienen en el glaciar. Ese año no obstante apenas había nevado, y encima a pocas horas de las pruebas, cayó una lluvia torrencial que lo acabó de estropear todo.
Pero la realidad es que tanto el año pasado como en este 2023, las cosas se han puesto muy complicadas. No solo en Soelden, sino en el resto del circuito. La semana pasada fue la presentación oficial de los integrantes del Swiss Ski de Copa del Mundo en la que los corredores recibieron su material y participaron en sesiones de fotos para sus patrocinadores. Algunos de sus corredores como Johan Clarey se mostraron a favor de mover el calendario,
"La Copa del Mundo podría empezar con las etapas en Norteamérica que empiezan el último fin de semana de noviembre, y podría prolongarse hasta abril. No necesariamente para crear más carreras. De hecho sería bueno guardarse un fin de semana de reserva, que se usaría en caso de cancelaciones o para descansar..."
Marco Odermatt añadía también en el mismo evento, que
"Mira, ya estamos en octubre, pero todos seguimos en camiseta. Se hace raro para los aficionados al esquí ver carreras, y para nosotros, psicológicamente, pensar que la temporada es inminente... Veamos qué pasa en los próximos años, pero si la tendencia continúa, tendremos que reflexionar".
Los fabricantes de esquís la quieren en octubre
Una de las razones por las que Solden logró adjudicarse todas las carreras inaugurales de la Copa del Mundo, fue por el apoyo de la potente industria del esquí de Austria. Los fabricantes de material necesitaban un evento potente que recordase a los aficionados que había llegado el momento de empezar a pensar en pasar por las tiendas. Y la estación les garantizaba que su altura y el glaciar, permitían celebrar cada año las pruebas a finales de octubre.
Tampoco los técnicos de la Swiss Ski quieren oír hablar de momento de un cambio en el calendario de Copa del Mundo. A la pregunta de un periodista, el austriaco Hans Flatscher, nuevo jefe de esquí alpino de la selección suiza,
"Los organizadores y personal técnico de las carreras de otoño son capaces de garantizar el buen desarrollo de las competiciones a pesar de las temperaturas inusualmente cálidas. Tanto en Sölden, como en Zermatt, el sistema de almacenamiento de nieve y los medios de producción artificial garantizan las condiciones de las pruebas de Copa del Mundo.
En lo que a mí respecta, debemos seguir haciendo las cosas como siempre las hemos hecho. Año tras año, vemos mucho interés por parte de los aficionados al esquí en estas primeras carreras de la temporada. No estoy seguro de que hubiera tanto si las trasladáramos a la primavera".
Urs Lehmann, Presidente de Swiss-Ski se mostró algo más abierto a hacer cambios, pero más adelante, si esta tendencia se consolida, y en connivencia con la industria y marcas del material de esquí,
"En abril la gente piensa en otras cosas más que el esquí. ¿Debería posponerse la temporada? Es una pregunta legítima con el cambio climático. Pero debemos tener en cuenta todas las cuestiones. Nuestro deporte depende mucho de la industria, y la industria necesita carreras en Europa antes de Navidad, aunque sólo sea para dar ideas para los regalos.
Por supuesto, las carreras de Sölden se programan tan pronto para servir a los intereses comerciales. Y funciona. Después de las carreras, el material se vende muy bien."
A dos semanas del inicio de la Copa del Mundo
Como cada año desde 2000, la Copa del Mundo arrancará con dos Slalom Gigante en la estación austriaca de Sölden los días 28 y 29 de octubre. Continuará en noviembre con los primeros descensos en Zermatt - Cervinia. La pista Gran Becca, que une los dominios suizo e italiano, debería haberse inaugurado el invierno pasado, pero la falta de nieve y unas temperaturas demasiado altas para producirla obligaron a su cancelación. Esta vez se han programado para quince días más tarde, el 11 y 12 de noviembre para los hombres, y el 18 y 19 de noviembre para las mujeres y se ha guardado nieve de la primavera pasada para garantizar el recorrido entero.
Christian Ziörjen, responsable técnico de la Open Speed de Zermatt, informó que hasta esta semana pasada, los equipos han podido entrenarse en el tramo superior de la pista Gran Becca, donde las condiciones eran excepcionales.
"Las temperaturas son altas para principios de octubre, pero a una altitud de 3500 metros, todavía hace suficiente frío por la noche para que podamos trabajar en la Gran Becca.
Dos tercios de la pista están en el glaciar, que está listo. Durante las últimas semanas hemos estado asegurándola, en particular rellenando las grietas, que es un procedimiento normal para las zonas de esquí glaciar.
Ahora estamos empezando a instalar todas las redes, el cableado y el resto de la infraestructura relacionada con la carrera. Para preparar el último tercio de la Gran Becca, que no está en el glaciar, todavía tenemos que esperar a que bajen las temperaturas para poder dispersar la nieve que tenemos almacenada en la pista."
Si en Soelden la Copa del Mundo de Octubre es un espaldarazo reciproco a los fabricantes de material de esquí, en Zermatt buscan ayudar a la industria del turismo. La estación tiene pistas abiertas todo el año, pero aún estamos en noviembre, en temporada baja. Así que aseguran que la Copa del Mundo es buena para hoteles y restaurantes.
En cierto modo, "adelanta el verdadero comienzo del invierno". Más allá de eso, también es un mensaje para todo el mundo:
"Queremos demostrar que la nieve está ahí, en Zermatt y Cervinia. Y, por extensión, en los Alpes. Creo que todas las estaciones pueden beneficiarse de ello. Este acontecimiento tiene sentido para el turismo, el deporte y la industria invernal.
Digo yo que alguien pagará petrodollars a los atletas, para que estos tengan todo el tiempo del mundo para entrenar, en vez de tener que estar con el pico y la pala 8 horas al día para comer, más hipoteca, más vicios varios, y ya si eso lo que les quede para entrenar. ¿Pudieran ser esos malditos capitalistas de mierda los paganinis? Malditos folladineros, siempre financiando cosas inútiles solo por el ansia de ganar mas dinero.
