Después de romper el
record de victorias en el Descenso el sábado, y hacer doblete al día siguiente ganando el Super-G, la corredora norteamericana ha anunciado que lo más probable es que la próxima temporada
deje de competir en el Slálom Gigante centrándose exclusivamente en las dos modalidades de velocidad, una alternativa que toman muchos corredores y corredores al fin de su carrera o cuando por alguna razón no se ven con las energía para afrontar las disciplinas técnicas.
No obstante el objetivo de Lindsey Vonn esta temporada sigue siendo conseguir su
quinto título de Copa del Mundo, un reto que ya tiene al alcance de la mano tras arrebatar el liderato este fin de semana a Lara Gut tras las dos victorias consecutivas en Cortina d'Ampezzo. La suiza no obstante es buena también en Descenso, Super-G y Gigante, las mismas que está disputando la norteamericana, lo que ejercerá presión hasta el final de temporada.
Lindsey Vonn ganó su último título absoluto en 2012. Al año siguiente tuvo un accidente en el Super-G de los Mundiales de Lenzerheide al que siguió dos operaciones de rodillas prácticamente seguidas que le ha impedido participar en
dos temporadas consecutivas y tampoco pudo defender su medalla olímpica de Descenso en Sochi-2014.
Vonn comentaba este fin de semana en el New York Times, que este sigue siendo un buen año para lograr el título en el Gigante, y que si finalmente se lleva el quinto globo de Cristal por la General, estará más que contenta,
"Este año tengo una buena oportunidad, pero el año que viene no sé si podré seguir en el Gigante. Se necesita una gran cantidad de energía, y es difícil para mis rodillas continuar. Además si no corro el GS podría irme a casa entre esas carreras y dormir mas. Con cinco títulos generales, yo ya sería feliz ".
La corredora del U.S. Ski Team también piensa en otro número,
el 86. Es el número de victorias logrado por el sueco Ingemar Stenmark, y que Vonn también tiene al alcance de la mano poder superar. Además parece que lo quiere hacer cuanto antes. Su número de triunfos desde que ha regresado tras sus dos operaciones lleva un ritmo imparable. En su regreso a la competición este año llevaba 59 victorias. Tras su fin de semana en Cortina se ha quedado
a solo 11 carreras de superar a Stenmark. Según los cálculos habituales debería ser para la próxima temporada, pero al ritmo que va no sería de extrañar que este invierno se fuera a casa ya con su record bajo el brazo.