La afluencia esta temporada se ha doblado respecto a otros años, y esto ha provocado que los aparcamientos se hayan saturado. Como consecuencia tuvieron que alquilar unos terrenos para estacionamiento de vehículos en Boulder y poner un bus lanzadera para los esquiadores. Además han tenido que incrementar el servicio de control de tráfico, y allí estas cosas se cobran. El Departamento de tránsito les ha pasado una factura a través del Sheriff local, que tendrá que abonar por los costes de colocar agentes cada fin de semana.
La estación no se atreve a confirmar si este excedente de esquiadores es debido a estar dentro del Epic Pass o porque este año ha nevado mucho mas de lo normal, pero afirma que no le salen las cuentas, y prefieren seguir trabajando independientemente. Vail Resorts pagaba un tanto por cada esquiador que accediese a los remontes de Eldora con el Epic Pass.
Lo que resta de temporada los poseedores de este abono podrán seguir accediendo, pero el próximo invierno ya no.