La concesión de la medalla responde al anuncio realizado por el secretario de Estado para el Deporte, Albert Soler, durante la rueda de prensa en la que María José Rienda anunció, en abril pasado, su despedida de la alta competición coincidiendo con la celebración del Campeonato de España de Esquí Alpino en el que la granadina logró la medalla de oro en la disciplina de eslalon.
Rienda, integrada ya en la estructura deportiva de la estación de esquí de SSierra Nevada, ha agradecido al CSD (que ya le otorgó la medalla de bronce al Mérito Deportivo) esta nueva distinción:
“Es para mí un honor recibir este reconocimiento a tantos años dedicados a la competición de élite en Deportes de Invierno, representando a mi país por todo el mundo.
Esta medalla quiere decir que las cosas se han hecho bien y con sentido; estoy muy contenta de la carrera deportiva que he llevado y creo que no es sólo un reconocimiento a mi persona sino también a todo el equipo de trabajo que ha estado conmigo durante todos estos años”.
María José Rienda empezó a deslizarse sobre la nieve cuando sus padres le regalaron unos esquíes a los ocho años. A los 14 empezó a prepararse en serio para conseguir algún día su sueño: participar en la Copa del Mundo, algo que acabó consiguiendo en 1994, precisamente en Sierra Nevada.Esta medalla quiere decir que las cosas se han hecho bien y con sentido; estoy muy contenta de la carrera deportiva que he llevado y creo que no es sólo un reconocimiento a mi persona sino también a todo el equipo de trabajo que ha estado conmigo durante todos estos años”.
Después de estar una década entre las 10 primeras quedándose a las puertas del podio, el 25 de octubre de 2003 consiguió su primer podio en una prueba de la Copa del Mundo, al ser tercera en el Gigante de Soelden (Austria). Esa misma temporada volvió a conseguirlo otras dos veces: bronce en Maribor (Eslovenia) y plata en el de Are (Suecia). Al final, acabó tercera en la general de la Copa del Mundo de Gigante, que ganó la sueca Anja Paerson. La siguiente temporada, 2004-2005, empezó con un nuevo podio, repitiendo el tercer puesto del año anterior en Soelden, para poco después repetir bronce en St. Moritz (Suiza).
Por fin, el 20 de febrero de 2005, Rienda logró su objetivo: ganar por primera vez una prueba de la Copa del Mundo. Fue, de nuevo en Gigante, en Are, donde había sido segunda el año anterior. Era la primera esquiadora española que conseguía un éxito tan importante desde 1992, cuando lo hizo Blanca Fernández-Ochoa. Blanca y su hermano, el fallecido Paquito Fernández Ochoa, único campeón olímpico invernal español (Slalom, en Sapporo 1972, Japón) son, junto con María José, los únicos españoles con triunfos en la Copa del Mundo de esquí alpino. Ya en el último Gigante de aquella temporada 2004-2005, en Lenzerheide (Suiza), Rienda repitió éxito y, una vez más, acabó la temporada tercera en la clasificación general de Gigante.
Rienda ha participado en siete ediciones de los Campeonatos Mundiales: Sierra Nevada 1996, Sestriere 1997, Vail 1999, St. Anton 2001, St. Moritz 2003, Bormio 2005 y Garmisch-Partenkirchen 2011. Sus mejores resultados son dos novenos lugares, uno en Sestriere 1997 y otro en Bormio 2005, de nuevo en Gigante. De sus cinco participaciones en Juegos Olímpicos, su actuación más destacada fue en Salt Lake 2002, logró un sexto lugar (diploma olímpico).
El momento culminante de la carrera de la granadina fue en la campaña 2005-2006. Logró cuatro victorias en pruebas de Gigante de la Copa del Mundo: Aspen (EEUU), dos consecutivas en Ofterschwang (Alemania) y Hafjell (Noruega). Con estos resultados logró ser subcampeona en la Copa del Mundo de Gigante, de nuevo dominada por la sueca Anja Paerson. Además, finalizó 13ª en la clasificación general de la Copa del Mundo. Con estas victorias se convirtió en la española con más triunfos en la competición con un total de seis.
A finales de ese año, entrenándose en Aspen (Estados Unidos) y cuando se encontraba en su mejor forma y el esquí parecía mostrarle su lado más amable, la andaluza sufrió una grave lesión de rodilla (la tríada) que le impidió competir en toda la temporada y perderse la primera prueba de la siguiente.
Recuperada de aquella grave lesión, en el inicio de temporada de Soelden en octubre de 2008-2009 Rienda quedó la sexta en la primera manga de la carrera demostrando que había vuelto a la élite. Pero poco después, en noviembre de 2008, cuando disputaba el gigante en la misma estación de Aspen, volvió a sufrir una grave caída en la que se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, por lo que tuvo que volver a ser operada y por lo que se perdió toda la temporada 2008-2009. De regreso a la competición, ya no consiguió más podios internacional, aunque siempre se mostró competitiva, hasta el punto de ganar la medalla de oro en su última carrera: el eslalon del Campeonato de España de Esquí Alpino Sierra Nevada 2011.
