Por este motivo, precisó que no se ha formalizado aún el proyecto de la empresa y rechazó que se pongan “trabas técnicas” al mismo, como expresó Otero, al tiempo que le recordó que ella siempre ha impulsado, desde que esta en la consejería, la construcción de una estación de esquí en San Glorio. “Si las modificaciones no son sustanciales, no hay ningún problema”, argumentó Otero, quien se refirió a la posible incompatibilidad en una zona, que es la que más nieve acumula, porque es la zona donde vive el oso pardo, de manera que el proyecto perdería viabilidad económica para la empresa.
Ruiz afirmó que los osos han estado allí siempre y no es un inconveniente si se ponen las medidas para que la afección por la construcción de la estación sea la mínima y subrayó que en la reunión mantenida ayer con la empresa se trató de que corrijan algunos aspectos para evitar retrasos en el futuro.
En cuanto a la participación económica de la Junta en el proyecto, reconoció que existe un retraso en su formalización, pero señaló que es la Sociedad Patrimonial, que depende de la Consejería de Hacienda, la que tiene que determinar los detalles, por lo que, de este modo, la consejera pasó la pelota para el tejado de su homóloga Pilar del Olmo, quien deberá decidir ahora en qué momento la Junta va a hacer pública cuál va a ser su participación en la empresa promotora.
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