El tercer caso conocido esta semana se trata de la estación de Swain Ski Resort en el Estado de Nueva York, que ya ha anunciado que si para el 15 de Agosto no tiene comprador, desmonta los remontes y cerrará para siempre, tal como anunció a sus empleados el pasado miércoles. Eric Stearns, su propietario, afirma que los tiempos están cambiando y que no tiene recursos para construir un hotel y desarrollar otras cosas que serían necesarias para atraer a los 150.000 esquiadores que venían hace 20 años. Esta temporada apenas han llegado a los 45.000 aficionados.
El pasado viernes 3 de Abril Swain Ski Resort cerró la temporada de esquí y snowboard, y los empleados finiquitados. Al mismo tiempo se envió una e-mail a los Ski patrol advirtiéndoles que las actividades de verano han sido canceladas, por lo tan to actualmente la propia estación no tiene trabajadores. De momento, y por si encuentra un comprador, la empresa sigue vendiendo los forfaits de temporada para la próxima temporada, aunque con un contrato escrito que si no se vende la estación antes del 15 de Agosto, ese mismo día se devolverá el importe íntegro de lo pagado.
Situada al sur de la ciudad de Rochester, (Noroeste del Estado de Nueva York), la ciudad ha ido perdiendo su poderío económico que había tenido hace años cuando empresas como Eastman-Kodak y Xerox tenían allí se sede social. En los últimos años la ciudad se ha ido despoblando, quedando edificios enteros abandonados y la delincuencia y los robos se han ido adueñando de la ciudad. Son casos frecuentes en la historia del país, donde muchas ciudades van perdiendo músculo financiero a favor de otras, como es el caso de la antes poderosa Pittsburgh que sufrió el embate de la crisis del acero, o la actual Detroit, hasta ahora centro mundial del motor, y ahora en claro y notable declive económico y despoblación acusada.
Swain Ski Resort tiene tres telesillas de cuatro plazas y el 92% de sus 40 hectáreas esquiables están aseguradas con nieve artificial y además tiene iluminación para el esquí nocturno.