Como ya adelantó al Diari Conrad Blanch, consejero delegado de Grandvalira, durante la celebración a principios de mes de la Copa de Europa masculina, las reformas incluyen un par de retoques en la zona de llegada y en la parte intermedia.
El acondicionamiento de la meta es uno de los problemas por la falta de espacio que hay y que ahora se intentará ganar. Allí se ha previsto que se haga una barraca fija, donde se situaría, por ejemplo, la zona de cronometraje, además de las gradas, con una cabida para 400 o 500 espectadores y una zona para los medios. En ningún caso se ubicarán los camiones para la retransmisión televisiva de la prueba, ya que estarán situados en el aparcamiento de Soldeu y los técnicos pondrán cable.
La reforma en la parte intermedia del trazado incluye la construcción de un túnel en la intersección de la pista con la del Os, una bajada azul que a estas alturas debe cerrarse cuando hay competición. Con el túnel, la pista del Os podría seguir siendo operativa para el esquí de ocio, lo que beneficiaría a la estación, y la del Avet sería más aprovechada para hacer entrenamientos.
La parte alta del trazado de Soldeu no vería modificada su fisonomía actual, ya que se optará por instalar una barraca móvil desde la cual se realizará la salida de los participantes.
Todas estas mejoras se añaden a las que ya se han hecho los últimos años, bajo la tutela de la FIS, para que el Avet se convierta en una pista de la Copa del Mundo. Al margen de todo el movimiento de tierras que ha sido necesario, han tenido que instalar redes de seguridad, tanto móviles como fijas, y un sistema de megafonía, instalación que se hizo el pasado verano. La Copa del Mundo femenina está prevista que visite Andorra con un Gigante en febrero del 2012 y luego el circuito se desplazará a la Molina.
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