Caviahue - una lugar diferente y mágico
Digo esto porque cuando uno va llegando a Caviahue se da cuenta que esta metiéndose en un paisaje distinto a todo lo conocido, el lago, el volcán Copahue y ese bosque de Araucarias le dan un aspecto realmente diferente.
La Araucaria o Pehuen en lengua Mapuche, es un árbol emblemático de esa región, y es una especie que crece únicamente en esa latitud de la Patagonia.
Tiene algo “especial” porque es un árbol sagrado para la cultura Mapuche, y de hecho su fruto es todavía una de las principales fuentes de alimentación de esa comunidad.
Caviahue esta situado al noroeste de la provincia de Neuquén, casi en el límite con Chile. Es un pequeño pueblo de 800 habitantes a orillas del lago y al pie del volcán Copahue que se encuentra aún en actividad. Aunque por ahora esta tranquilo…La única erupción conocida fue en el año 2000 y dejó un manto de cenizas que obligó a suspender las actividades turísticas.
A unos 20km de allí funciona un centro terapéutico termal, uno de los mas importantes del país por la calidad de sus aguas, pero en invierno no se puede acceder por la cantidad de nieve que bloquea el camino.
Llegamos desde Buenos Aires (a 1500 km) en medio de una nevada que no permitió esquiar ese día pero dejo unos 10/20cm de nieve fresca.
Al día siguiente amaneció soleado así que nos fuimos a esquiar.
El centro de esquí esta sobre la ladera del volcán a 1km del pueblo. Es una estación pequeña, muy tranquila y familiar, un reflejo de lo que es el pueblo…ideal para una semana de real descanso.
La base esta a 1650 msm lo cual garantiza buena nieve hasta bien entrada la primavera.
La primer parte de la estación es la mas pintoresca, tiene pendientes suaves y esta rodeada de Araucarias. Esto permite esquiar en medio del bosque sin la necesidad de tener un gran nivel de esquí.
En la parte alta mas allá de los 2000 msm se termina el bosque y se puede apreciar el volcán en toda su dimensión.
Inclusive se ve la fumarola producto de los vapores de azufre que tiene la laguna que se encuentra en el interior del cráter.
Las pistas pisadas no tiene grandes pendientes solo algunas rojas, pero tiene la posibilidad de grandes extensiones de fuera de pista con pendientes para todos los gustos, inclusive algunas palas importantes. (de esas que no son para mi, jeje)
Pero la frutilla de la torta es sin duda la excursión al cráter del volcán.
Si el clima lo permite y se juntan entre un mínimo de 8 y un máximo de 12 personas, sale un vehículo tipo track a orugas y te lleva hasta el cráter. La opción es bajarlo esquiando hasta la base por nieve virgen, o los que no tienen suficiente nivel de esquí pueden optar por bajar en el mismo vehículo. El costo es de $180 p/pax (unos 35 EUR) Realmente imperdible, vale la pena !!
Así que ahí fuimos!! Tal cual nos dijeron luego de unos 45 min de subida el track te deja a unos 50mts del cráter, y desde ahí a pata hasta la cumbre.
La vista del valle desde casi 3000mts, alucinante!!
El Cráter es un agujero de unos 500mts de diámetro con una laguna sulfurosa de agua caliente. Al fondo se aprecia un glaciar con una pared de hielo de unos 80 mts de alto. El viento soplaba muy fuerte y los vapores de azufre se hacían sentir, así que no pudimos quedarnos mas de 15 min en el cráter.
La visión realmente era intimidante, pero en días de poco viento se puede descender por el cráter casi hasta la laguna
Y ahora venia lo mejor de todo, bajar esquiando por nieve virgen hasta la base acompañados siempre por un guía. Llevaba ya algunos días sin grandes nevadas, por lo tanto no encontraríamos el powder que esperábamos. Debido al viento la nieve estaba bastante dura por sectores, de todas maneras en las zonas los mas protegidas se mantenía una nieve polvo de unos 30 cm, suficiente para disfrutarla como enanos!!
Una parte muy divertida, hay un sector que se pone plano y ahí aparece el track para tirarte con una soga hasta llegar a la nueva pendiente.
Ultima parte de nieve virgen, luego se empalma con las pistas y regresas a la base, auque todos preferimos seguir bajando por cuanto fuera de pista veíamos hasta llegar al bosque nuevamente.
Realmente una experiencia imperdible y muy recomendable para hacer con un grupo de amigos!!
Y como broche de oro, todos los viernes se organiza una bajada de antorchas donde puede participar todo el que quiera y se anime. Se imaginaran que no me lo podía perder… Muy divertido
Al día siguiente había que regresar a casa, y para peor amaneció un día totalmente soleado y sin una gota de viento…
Las peores condiciones para dejar un lugar encantado como este luego de una semana tan estresante, jeje .
Pero esto es así.., hay que volver a trabajar para poder repetir dentro de un año.
Espero que disfruten de las fotos y el relato.
Un abrazo
Marcelo