Un semana en Montafon
Ha sido una semana fabulosa en la que hemos combinado esquí y turismo cuando el tiempo no ha acompañado, nos alojamos en la casa de Veronika Hocher en Schruns(realmente confortable).
De nuestrio valle visitamos tres estaciones: Gargellen, Silvretta Nova y Hochjoch.
Gargellen es una pequeña estación que tiene la base a 1500 metros y con muchas posibilidades de fuerapistas, a nivel de paisajes quizás sea la más bonita de todo el valle.
La noche anterior había caído una nevada de un palmo y nos dejo una nieve en "inmejorables condiciones"
A nivel de pistas tiene muy pocas, basicamente la estación son 5 pistas y el resto itinerarios.
En general el ambiente de la estación es familiar y se llena de gente local que escapa de la masificación de Silvretta Nova.
Al día siguiente fuimos a Silvretta Nova
Es la estación más grande del valle de Montafon con unos 115 km de pistas.
En general las pistas están muy bien preparadas y tiene mucha variedad de pistas.
Aunque en el valle se ve que no había nieve en el fondo del valle en pistas la situación cambiaba radicalmente, aquí en la foto Hander, Ana y Josema
No se andan con tonterias pedazo de intersport que tienen a más de 2000 metros
El tercer día fuimos a Hochjoch
Es una estación pequeña de poco más de 40 Km. esquiables
Aquí una foto de Silvretta Nova desde Hochjoch
En general las pistas son sencillas principalmente azules. Pero también tenía alguna roja y negra divertida.
Pero con muchas posibilidades para hacer fuerapista
Una vista del Zimba y la pequeña estación de Golm desde Hoch Joch
Como no todo es esquí y nos hizo mal tiempo, aprovechamos para hacer una visita a los castillos del rey loco en Baviera.
El último día hicimos una visita a la estación en mayusculas, el Arlberg.
Lo malo fueron las colas en algún remonte como la subida a la Valluga
Aunque mereció la pena, menuda nieve había arriba.
Desde allí bajamos esquiando al Flexen Pass para coger el skibus a Lech
Como un día no da para mucho decidimos hacer el anillo para por lo menoc echar un vistazo a toda la estación.
A pesar de no ser un buen año el espesor que daban era de 226 cm de nieve.
Aquí hicimos una cola enorme, un cuello de botella, una silla de 2 de pinza fija para acceder al itinerario que baja a Zug.
Aquí la vista desde el pueblo de Zug
En definitiva un viaje estupendo, en el que esperaba encontrarme unas condiciones mucho peores y que al final a servido para quitarme la espinita clavada que tenía por la mala temporada que había tenido hasta esta semana.