ALPES

Enviado: 26-05-2025 19:35
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Unas fotos de Kaunertal de hace ya un mes







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Unas fotos de Kaunertal de hace ya un mes








Muy buenos recuerdos guardo aún del Kaunertaler Gletscher de cuando aún se podía esquiar allí en pleno verano y más concretamente en el mes de Agosto de 1997, saludos!smiling smiley
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Enviado: 10-06-2025 12:09
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Ando un poco liado. La meteo, después de un invierno seco, ha traído una primavera bastante inestable. Viniendo de un invierno con poca nieve, no fue hasta mayo que se pudo esquiar más o menos con seguridad en cuanto a encontrarte tiburones, e incluso así... porque las sucesiones de nevadas en mayo hacían que la nieve no llegara a estar isotérmica, condición necesaria para tener buena nieve primavera. Empieza junio y empezamos con lluvias, humedades altas, mucha nube. Malas condiciones también. Pero, al fin, ayer la cosa prometía. Aire más frío, más seco, varias horas bajo cero a partir de unos 2500 y el punto de rocío rozando los -10 arriba. También hacía viento. Me preguntaba como habría ido el rehielo, si sería una crosta o un buen rehielo portante incluso al transformar.

Con esas reflexiones, el objetivo era claro: Innere Schwarze Schneide y Linker Fernerkogel, acceso desde los glaciares de Soelden, con una webcam para comprobar condiciones tanto de nieve, como de las grietas del glaciar, como de nubes, y un par de estaciones meteorológicas para confirmar las previsiones.

Así se ven las dos montañas elegidas la tarde anterior. Buena pinta



Lunes era festivo nacional en Austria, por lo que el transporte público va a medio gas. Toca coger bus para ir a Völs bien prontito. He quedado con un amigo que viene con otro bus. Justo subiendo a mi bus me llama, se le ha escapado. Igual en bici llega a la parada de tren anterior, Westbahnhof. Mientras tanto, llego a Völs y al andén, son las 06:25. Me llama otra vez, se le ha escapado. Si coge el siguiente, el bus que sube al glaciar sale 1h30 después. No las tiene todas, y decide abortar.

Medio durmiendo llego a Ötztal, me subo al bus hacia Obergurgl para bajarme en Soelden. Todo bien. Subo al bus y pregunto si hay que pagar el peaje en el peaje (así lo hicimos en Kaunertal dos semanas antes) o en el mismo bus. Sí, sí, aquí. Me explica de mala manera que es un bus privado (aunque sea una línea de la VVT, con horarios de la VVT, que sale en la app de la VVT y con el logo de la VVT en el bus) en una carretera privada y que mi ticket para transporte público no es válido. Me imprime un ticket de 15,20€, con el logo de la VVT. Además, los 7,50 del peaje.

(Inciso: hoy he llamado con el servicio de transporte de Ötztal que me han confirmado el precio de 15,20, sólo ida. Ida, vuelta y peaje, 37,90€. Precios, por cierto, que no están publicados en ninguna parte. Una web he encontrado donde dice que sí es válido el ticket de transporte público, pero no era oficial. Me han dicho que para saber los precios hay que acudir a la oficina de turismo. En fin. Que sea caro subir a 2800 metros desde 1300 lo entiendo, pero lo que me jode es que un coche, incluyendo hasta 5 pasajeros, paga 25,50€. Se llenan la boca con la sostenibilidad de su red de buses cuando le sale más barato al Porsche de turno subir que a un estudiante con abono de transporte público en bus. En ese sentido, mucho mejor Kaunertal, donde el peaje en bus se paga a 8 euros por persona, ticket aparte si no tienes, y el coche paga 28 euros de peaje. Fin de la pataleta)

No por gastar un poco más de lo que me esperaba voy a dejar de disfrutar del día, y acabo de prepararme llegando arriba. Botas, crema de sol, pieles, zapatillas en la mochila, listos.

A las 9 llega el bus a Tiefenbachgletscher y empiezo a caminar. Buena noticia, la nieve sigue bastante dura.

Subiendo por la traza de un telesquí para evitar una zona donde han pasado las pistenbully para mover nieve. Hay mucha calima hoy... Me pregunto si es polvo sahariano. Inspiro y me parece oler humo... igual son los incendios del canadá...



Subo a un ritmo decente teniendo en cuenta lo que me cuestan las cosas a partir de los 3000 metros. Arriba en el glaciar las pistas presentan buen aspecto. Cremita con base bien dura. Se podría esquiar de lujo aquí con los remontes abiertos. A la derecha empieza a verse el pico de Innere Schwarze Schneide, 3369 metros que desde aquí parecen poca cosa.



Hasta los 3250 llego con las pieles, luego toca subir un trozo con los esquís.... ¿a la mochila? Mejor sí. ¿Crampones? Mejor, también.



Después de trastear un rato para dejarlo todo en su sitio, son las 10:23 cuando empiezo a subir la cresta final. En esta orientación sureste, la crosta no es portante, y tengo que subir a gatas para evitar hundirme demasiado. Una ventana en la cresta, se ve el Linker Fernerkogel.



Después de un paso algo expuesto, otro vistazo a la imponente cara noroeste me permite ver el fondo del valle de Pitztal, objetivo final del día. En primer plano, la sombra del Innere Schwarze Schneide sobre el Hangender Ferner (que abajo se convierte en Karlesferner, aunque sea el mismo glaciar)



Después del paso de escalada no me molesta nada el "Ötztal-style" de la cresta sobreequipada. Con esta calidad de roca y tamaño patio para una cima al ladito de los remontes, no me parece tampoco mala idea.



Cima! 10:44, se ve el coloso de la zona, Wildspitze con su Mittelbergferner. Segundo pico más alto de Austria y segundo glaciar más grande del Tirol. Aún con el humo de los fuegos canadienses, buenas vistas. Más cerca queda el Linker Fernerkogel, con un grupo que me parece que van con esquís llegando arriba.



La nieve en la cima está podrida, y la inspección visual me hace pensar que también lo está en la cara. Un golpe con el bastón me dice que, al contrario, está duro como una piedra. Vaya.



Bajo igualmente, nieve dura en las orientaciones norte y bastante buena crema en las contrapendientes a este. Decido no hacer exactamente la bajada planeada, no me apetece caerme por el precipicio que hay debajo, y subo un repecho para echar la vista atrás. Alguna firma se intuye en la parte inferior donde la nieve es más blanca. Lo demás, nieve dura, dura.



Queda la parte picante de la bajada, expuesta, nieve dura y alguna bola. En este momento me alegro que mi amigo no haya venido, había planeado venir con sus esquís de 120 de patín, que en nieve podrida funcionan muy bien.

Ya en el glaciar, se aprecia lo poco que cortan los cantos en la superfície irregular, y eso que en el glaciar ya había ablandecido un poco... Vengo de la zona de rocas en sombra en el centro de la imagen (en la captura de webcam del principio del report se aprecia el paso)



Estoy a unos 2900-2950 metros, me queda por delante una agradable subida hasta los 3278 del Linker Fernerkogel. En ese tiempo calculo que la nieve estará en su punto, más tarde de lo que imaginaba pero no nos vamos a quejar. Sigo la traza de crampones de grupos que han hecho la cima la pasada semana. Desde luego que se encontraron nieve más blanda que yo ahora.



Este glaciar tiene grietas bastante importantes y me daba cierto respeto, pero como las grietas han estado tapadas desde octubre y la nieve ahora está bien dura, no me preocupo. Además, que si puede pasar un grupo sin esquís con la nieve blanda, el riesgo es más que asumible.

A unos 3150, bonita perspectiva del pico que acabo de bajar. Desde luego, esta cara no se esquía.




La nieve realmente empieza a tener buena pinta. Ya queda poco. El grupo encordado empieza su bajada. Van muy despacio (hace más de hora y cuarto que los vi a 100 y pocos metros de la cima), y se empiezan a hundir. Con los esquís la crosta me sigue portando, pero me tengo que apurar un poco, vete a saber como está la zona baja.

Hago cima con los esquís (los últimos 15 metros hubieran sido mucho más fáciles sin esquís) y justo llegan dos que venían de la cresta. Los había visto en la zona superior del glaciar y me preguntaba si todo iba bien. Estaban decidiendo qué hacer, me dicen. Han pasado la noche en el refugio, y esta noche la vuelven a pasar allí. Les pregunto sobre las canales noroeste del Karleskopf, pero me dicen que no había nada de nieve. No me los creo (en la webcam de Rifflsee parecían decentes) pero les agradezco la información.

La primera mitad de la bajada sabe a gloria. ¡Qué buena cremita! Curvas a alta velocidad con nieve genial, me tengo que parar para sacar una foto de las firmas después de los pimeros 200 de desnivel.



La segunda parte requiere un poquito más de atención, hay una zona con grietas en la nieve que no pintan nada bien y que prefiero evitar, y una canal algo sucia que, después de una paradita para comprobar la continuidad desde arriba, se deja hacer muy bien. Vistazo atrás desde la lengua del glaciar justo debajo de los 2700.



El final de los glaciares es siempre interesante debido a como interaccionan los ríos de fusión y el hielo. Bonita cueva de hielo me encuentro, tanto desde fuera....



Como desde dentro. Al fondo, estación de Pitztal.



Decido que se ha hecho tarde para ir a ver el Karleskopf. Tocaría subir 200 metros, esquís en la espalda, y sin saber qué me iba a encontrar. En cambio, hay una canal que creo que sí me va a permitir bajar otros 200 metros, hasta los 2400 de la pista de esquí que baja al valle.

Voy disfrutando del paisaje, admirando las potentes canales del Linker Fernerkogel (parece que la central aún se podría haber hecho)



Cuando de repente me hundo. Un riachuelo cubierto, la nieve se empieza a ablandecer de verdad. Confirmación de que no tengo que ir a probar suerte ahí arriba.



Llego a la zona donde tendría que empezar la canal. Se ha ido mucha nieve los últimos días y toca quitar esquís para saber dónde me toca bajar.

Ahí está:



Por una canal lateral con algo de hielo y alguna piedra suelta se puede destrepar hasta la nieve (izquierda en la foto de arriba), que encuentro dura aún en la sombra. Con crampones hubiera sido un momento pero ya he mirado la hora y creo poder coger el bus de las dos y media, por lo que decido hacerlo sin ellos.

Consigo poner esquís en una posición algo precaria y se acaba la inseguridad. Un trocito cóncavo con nieve dura y una piedra en medio de la lengua de nieve lo bajo derrapando, luego ya sí, nieve de verano con agarre decente.



Tiene un punto técnico la bajada, y de nuevo me alegro que no haya venido mi amigo. Hay una parte estrecha que, si bien creo que se podría haber derrapado, bajo recto para controlar abajo la velocidad. Adrenalina en la última bajada.



Después se ensancha y, esquivando rocas medio hundidas en la superfície, se hace una bajada de lo más divertida. Sabe a la última...



Ya en la pista de esquí, me apresuro a cambiar de botas a zapatillas, a poner esquís en la mochila, quitar casco, etc etc. Empiezo a bajar delante de la espectacular pared este del Mittagskogel, 1000 metros de desnivel, la mayoría de más de 30 grados, hasta la misma pista. Y se llega en media hora de pieles desde la estación de Pitztal. No he ido este invierno por falta de nieve, pero creo que en cuánto a terreno hay muyyyy pocas estaciones del mundo que la igualen.



Abajo queda Mittelberg in Pitztal, quedan 50 minutos para el bus, 4,5km y 650 de desnivel. Vamos.



Vistazo atrás con el río que baja con importante caudal, la pequeña canal que he aprovechado para bajar hasta los 2400 y, al fondo, el pico de Linker Fernerkogel. Bonita postal.



Ya abajo en el valle, Karleskopf (que, efectivamente, no era ya esquiable), Innere Schwarze Schneid (primer pico del día) y Linker Fernerkogel (segundo pico). Gracias, Pitztal.



Llego con cinco minutos para dejar todo en orden para subir al bus, con un conductor muy estricto que no me deja dejar los esquís ni al suelo, ni atados a una barra (como hago siempre en los autobuses, pues no se mueven, no molestan y no dañan nada). La señora que va sentada delante siente lástima por como me ha gritado, y me ofrece un pequeño cruasán que hizo por la mañana. Le digo que no me puede dar comida, que no está permitido comer en el bus, pero insiste y me lo guardo en la mochila. La hora de bus con la calefacción puesta a por lo menos 40º, sin poder beber y con los pantalones de esquí negros al sol se hace eterna, pero no pasa nada. Otro año aprovechando el esquí en junio, con lo que a mí me gusta.

Bajando del tren de nuevo en Völs para esperar el último bus, unos niños en bicicletas me preguntan a gritos si he ido a esquiar. Sonrío y asiento con la cabeza. Cómo mola Innsbruck.

Un saludo
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TMG
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Enviado: 10-06-2025 12:40
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Impresionante como siempre, y esta vez solo y a contra reloj para darle más emoción sorprendidosorprendido
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Enviado: 10-06-2025 14:57
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Ando un poco liado. La meteo, después de un invierno seco, ha traído una primavera bastante inestable. Viniendo de un invierno con poca nieve, no fue hasta mayo que se pudo esquiar más o menos con seguridad en cuanto a encontrarte tiburones, e incluso así... porque las sucesiones de nevadas en mayo hacían que la nieve no llegara a estar isotérmica, condición necesaria para tener buena nieve primavera. Empieza junio y empezamos con lluvias, humedades altas, mucha nube. Malas condiciones también. Pero, al fin, ayer la cosa prometía. Aire más frío, más seco, varias horas bajo cero a partir de unos 2500 y el punto de rocío rozando los -10 arriba. También hacía viento. Me preguntaba como habría ido el rehielo, si sería una crosta o un buen rehielo portante incluso al transformar.

Con esas reflexiones, el objetivo era claro: Innere Schwarze Schneide y Linker Fernerkogel, acceso desde los glaciares de Soelden, con una webcam para comprobar condiciones tanto de nieve, como de las grietas del glaciar, como de nubes, y un par de estaciones meteorológicas para confirmar las previsiones.

Así se ven las dos montañas elegidas la tarde anterior. Buena pinta



Lunes era festivo nacional en Austria, por lo que el transporte público va a medio gas. Toca coger bus para ir a Völs bien prontito. He quedado con un amigo que viene con otro bus. Justo subiendo a mi bus me llama, se le ha escapado. Igual en bici llega a la parada de tren anterior, Westbahnhof. Mientras tanto, llego a Völs y al andén, son las 06:25. Me llama otra vez, se le ha escapado. Si coge el siguiente, el bus que sube al glaciar sale 1h30 después. No las tiene todas, y decide abortar.

Medio durmiendo llego a Ötztal, me subo al bus hacia Obergurgl para bajarme en Soelden. Todo bien. Subo al bus y pregunto si hay que pagar el peaje en el peaje (así lo hicimos en Kaunertal dos semanas antes) o en el mismo bus. Sí, sí, aquí. Me explica de mala manera que es un bus privado (aunque sea una línea de la VVT, con horarios de la VVT, que sale en la app de la VVT y con el logo de la VVT en el bus) en una carretera privada y que mi ticket para transporte público no es válido. Me imprime un ticket de 15,20€, con el logo de la VVT. Además, los 7,50 del peaje.

(Inciso: hoy he llamado con el servicio de transporte de Ötztal que me han confirmado el precio de 15,20, sólo ida. Ida, vuelta y peaje, 37,90€. Precios, por cierto, que no están publicados en ninguna parte. Una web he encontrado donde dice que sí es válido el ticket de transporte público, pero no era oficial. Me han dicho que para saber los precios hay que acudir a la oficina de turismo. En fin. Que sea caro subir a 2800 metros desde 1300 lo entiendo, pero lo que me jode es que un coche, incluyendo hasta 5 pasajeros, paga 25,50€. Se llenan la boca con la sostenibilidad de su red de buses cuando le sale más barato al Porsche de turno subir que a un estudiante con abono de transporte público en bus. En ese sentido, mucho mejor Kaunertal, donde el peaje en bus se paga a 8 euros por persona, ticket aparte si no tienes, y el coche paga 28 euros de peaje. Fin de la pataleta)

No por gastar un poco más de lo que me esperaba voy a dejar de disfrutar del día, y acabo de prepararme llegando arriba. Botas, crema de sol, pieles, zapatillas en la mochila, listos.

A las 9 llega el bus a Tiefenbachgletscher y empiezo a caminar. Buena noticia, la nieve sigue bastante dura.

Subiendo por la traza de un telesquí para evitar una zona donde han pasado las pistenbully para mover nieve. Hay mucha calima hoy... Me pregunto si es polvo sahariano. Inspiro y me parece oler humo... igual son los incendios del canadá...



Subo a un ritmo decente teniendo en cuenta lo que me cuestan las cosas a partir de los 3000 metros. Arriba en el glaciar las pistas presentan buen aspecto. Cremita con base bien dura. Se podría esquiar de lujo aquí con los remontes abiertos. A la derecha empieza a verse el pico de Innere Schwarze Schneide, 3369 metros que desde aquí parecen poca cosa.



Hasta los 3250 llego con las pieles, luego toca subir un trozo con los esquís.... ¿a la mochila? Mejor sí. ¿Crampones? Mejor, también.



Después de trastear un rato para dejarlo todo en su sitio, son las 10:23 cuando empiezo a subir la cresta final. En esta orientación sureste, la crosta no es portante, y tengo que subir a gatas para evitar hundirme demasiado. Una ventana en la cresta, se ve el Linker Fernerkogel.



Después de un paso algo expuesto, otro vistazo a la imponente cara noroeste me permite ver el fondo del valle de Pitztal, objetivo final del día. En primer plano, la sombra del Innere Schwarze Schneide sobre el Hangender Ferner (que abajo se convierte en Karlesferner, aunque sea el mismo glaciar)



Después del paso de escalada no me molesta nada el "Ötztal-style" de la cresta sobreequipada. Con esta calidad de roca y tamaño patio para una cima al ladito de los remontes, no me parece tampoco mala idea.



Cima! 10:44, se ve el coloso de la zona, Wildspitze con su Mittelbergferner. Segundo pico más alto de Austria y segundo glaciar más grande del Tirol. Aún con el humo de los fuegos canadienses, buenas vistas. Más cerca queda el Linker Fernerkogel, con un grupo que me parece que van con esquís llegando arriba.



La nieve en la cima está podrida, y la inspección visual me hace pensar que también lo está en la cara. Un golpe con el bastón me dice que, al contrario, está duro como una piedra. Vaya.



Bajo igualmente, nieve dura en las orientaciones norte y bastante buena crema en las contrapendientes a este. Decido no hacer exactamente la bajada planeada, no me apetece caerme por el precipicio que hay debajo, y subo un repecho para echar la vista atrás. Alguna firma se intuye en la parte inferior donde la nieve es más blanca. Lo demás, nieve dura, dura.



Queda la parte picante de la bajada, expuesta, nieve dura y alguna bola. En este momento me alegro que mi amigo no haya venido, había planeado venir con sus esquís de 120 de patín, que en nieve podrida funcionan muy bien.

Ya en el glaciar, se aprecia lo poco que cortan los cantos en la superfície irregular, y eso que en el glaciar ya había ablandecido un poco... Vengo de la zona de rocas en sombra en el centro de la imagen (en la captura de webcam del principio del report se aprecia el paso)



Estoy a unos 2900-2950 metros, me queda por delante una agradable subida hasta los 3278 del Linker Fernerkogel. En ese tiempo calculo que la nieve estará en su punto, más tarde de lo que imaginaba pero no nos vamos a quejar. Sigo la traza de crampones de grupos que han hecho la cima la pasada semana. Desde luego que se encontraron nieve más blanda que yo ahora.



Este glaciar tiene grietas bastante importantes y me daba cierto respeto, pero como las grietas han estado tapadas desde octubre y la nieve ahora está bien dura, no me preocupo. Además, que si puede pasar un grupo sin esquís con la nieve blanda, el riesgo es más que asumible.

A unos 3150, bonita perspectiva del pico que acabo de bajar. Desde luego, esta cara no se esquía.




La nieve realmente empieza a tener buena pinta. Ya queda poco. El grupo encordado empieza su bajada. Van muy despacio (hace más de hora y cuarto que los vi a 100 y pocos metros de la cima), y se empiezan a hundir. Con los esquís la crosta me sigue portando, pero me tengo que apurar un poco, vete a saber como está la zona baja.

Hago cima con los esquís (los últimos 15 metros hubieran sido mucho más fáciles sin esquís) y justo llegan dos que venían de la cresta. Los había visto en la zona superior del glaciar y me preguntaba si todo iba bien. Estaban decidiendo qué hacer, me dicen. Han pasado la noche en el refugio, y esta noche la vuelven a pasar allí. Les pregunto sobre las canales noroeste del Karleskopf, pero me dicen que no había nada de nieve. No me los creo (en la webcam de Rifflsee parecían decentes) pero les agradezco la información.

La primera mitad de la bajada sabe a gloria. ¡Qué buena cremita! Curvas a alta velocidad con nieve genial, me tengo que parar para sacar una foto de las firmas después de los pimeros 200 de desnivel.



La segunda parte requiere un poquito más de atención, hay una zona con grietas en la nieve que no pintan nada bien y que prefiero evitar, y una canal algo sucia que, después de una paradita para comprobar la continuidad desde arriba, se deja hacer muy bien. Vistazo atrás desde la lengua del glaciar justo debajo de los 2700.



El final de los glaciares es siempre interesante debido a como interaccionan los ríos de fusión y el hielo. Bonita cueva de hielo me encuentro, tanto desde fuera....



Como desde dentro. Al fondo, estación de Pitztal.



Decido que se ha hecho tarde para ir a ver el Karleskopf. Tocaría subir 200 metros, esquís en la espalda, y sin saber qué me iba a encontrar. En cambio, hay una canal que creo que sí me va a permitir bajar otros 200 metros, hasta los 2400 de la pista de esquí que baja al valle.

Voy disfrutando del paisaje, admirando las potentes canales del Linker Fernerkogel (parece que la central aún se podría haber hecho)



Cuando de repente me hundo. Un riachuelo cubierto, la nieve se empieza a ablandecer de verdad. Confirmación de que no tengo que ir a probar suerte ahí arriba.



Llego a la zona donde tendría que empezar la canal. Se ha ido mucha nieve los últimos días y toca quitar esquís para saber dónde me toca bajar.

Ahí está:



Por una canal lateral con algo de hielo y alguna piedra suelta se puede destrepar hasta la nieve (izquierda en la foto de arriba), que encuentro dura aún en la sombra. Con crampones hubiera sido un momento pero ya he mirado la hora y creo poder coger el bus de las dos y media, por lo que decido hacerlo sin ellos.

Consigo poner esquís en una posición algo precaria y se acaba la inseguridad. Un trocito cóncavo con nieve dura y una piedra en medio de la lengua de nieve lo bajo derrapando, luego ya sí, nieve de verano con agarre decente.



Tiene un punto técnico la bajada, y de nuevo me alegro que no haya venido mi amigo. Hay una parte estrecha que, si bien creo que se podría haber derrapado, bajo recto para controlar abajo la velocidad. Adrenalina en la última bajada.



Después se ensancha y, esquivando rocas medio hundidas en la superfície, se hace una bajada de lo más divertida. Sabe a la última...



Ya en la pista de esquí, me apresuro a cambiar de botas a zapatillas, a poner esquís en la mochila, quitar casco, etc etc. Empiezo a bajar delante de la espectacular pared este del Mittagskogel, 1000 metros de desnivel, la mayoría de más de 30 grados, hasta la misma pista. Y se llega en media hora de pieles desde la estación de Pitztal. No he ido este invierno por falta de nieve, pero creo que en cuánto a terreno hay muyyyy pocas estaciones del mundo que la igualen.



Abajo queda Mittelberg in Pitztal, quedan 50 minutos para el bus, 4,5km y 650 de desnivel. Vamos.



Vistazo atrás con el río que baja con importante caudal, la pequeña canal que he aprovechado para bajar hasta los 2400 y, al fondo, el pico de Linker Fernerkogel. Bonita postal.



Ya abajo en el valle, Karleskopf (que, efectivamente, no era ya esquiable), Innere Schwarze Schneid (primer pico del día) y Linker Fernerkogel (segundo pico). Gracias, Pitztal.



Llego con cinco minutos para dejar todo en orden para subir al bus, con un conductor muy estricto que no me deja dejar los esquís ni al suelo, ni atados a una barra (como hago siempre en los autobuses, pues no se mueven, no molestan y no dañan nada). La señora que va sentada delante siente lástima por como me ha gritado, y me ofrece un pequeño cruasán que hizo por la mañana. Le digo que no me puede dar comida, que no está permitido comer en el bus, pero insiste y me lo guardo en la mochila. La hora de bus con la calefacción puesta a por lo menos 40º, sin poder beber y con los pantalones de esquí negros al sol se hace eterna, pero no pasa nada. Otro año aprovechando el esquí en junio, con lo que a mí me gusta.

Bajando del tren de nuevo en Völs para esperar el último bus, unos niños en bicicletas me preguntan a gritos si he ido a esquiar. Sonrío y asiento con la cabeza. Cómo mola Innsbruck.

Un saludo
Cita
Medicine
Ando un poco liado. La meteo, después de un invierno seco, ha traído una primavera bastante inestable. Viniendo de un invierno con poca nieve, no fue hasta mayo que se pudo esquiar más o menos con seguridad en cuanto a encontrarte tiburones, e incluso así... porque las sucesiones de nevadas en mayo hacían que la nieve no llegara a estar isotérmica, condición necesaria para tener buena nieve primavera. Empieza junio y empezamos con lluvias, humedades altas, mucha nube. Malas condiciones también. Pero, al fin, ayer la cosa prometía. Aire más frío, más seco, varias horas bajo cero a partir de unos 2500 y el punto de rocío rozando los -10 arriba. También hacía viento. Me preguntaba como habría ido el rehielo, si sería una crosta o un buen rehielo portante incluso al transformar.

Con esas reflexiones, el objetivo era claro: Innere Schwarze Schneide y Linker Fernerkogel, acceso desde los glaciares de Soelden, con una webcam para comprobar condiciones tanto de nieve, como de las grietas del glaciar, como de nubes, y un par de estaciones meteorológicas para confirmar las previsiones.

Así se ven las dos montañas elegidas la tarde anterior. Buena pinta



Lunes era festivo nacional en Austria, por lo que el transporte público va a medio gas. Toca coger bus para ir a Völs bien prontito. He quedado con un amigo que viene con otro bus. Justo subiendo a mi bus me llama, se le ha escapado. Igual en bici llega a la parada de tren anterior, Westbahnhof. Mientras tanto, llego a Völs y al andén, son las 06:25. Me llama otra vez, se le ha escapado. Si coge el siguiente, el bus que sube al glaciar sale 1h30 después. No las tiene todas, y decide abortar.

Medio durmiendo llego a Ötztal, me subo al bus hacia Obergurgl para bajarme en Soelden. Todo bien. Subo al bus y pregunto si hay que pagar el peaje en el peaje (así lo hicimos en Kaunertal dos semanas antes) o en el mismo bus. Sí, sí, aquí. Me explica de mala manera que es un bus privado (aunque sea una línea de la VVT, con horarios de la VVT, que sale en la app de la VVT y con el logo de la VVT en el bus) en una carretera privada y que mi ticket para transporte público no es válido. Me imprime un ticket de 15,20€, con el logo de la VVT. Además, los 7,50 del peaje.

(Inciso: hoy he llamado con el servicio de transporte de Ötztal que me han confirmado el precio de 15,20, sólo ida. Ida, vuelta y peaje, 37,90€. Precios, por cierto, que no están publicados en ninguna parte. Una web he encontrado donde dice que sí es válido el ticket de transporte público, pero no era oficial. Me han dicho que para saber los precios hay que acudir a la oficina de turismo. En fin. Que sea caro subir a 2800 metros desde 1300 lo entiendo, pero lo que me jode es que un coche, incluyendo hasta 5 pasajeros, paga 25,50€. Se llenan la boca con la sostenibilidad de su red de buses cuando le sale más barato al Porsche de turno subir que a un estudiante con abono de transporte público en bus. En ese sentido, mucho mejor Kaunertal, donde el peaje en bus se paga a 8 euros por persona, ticket aparte si no tienes, y el coche paga 28 euros de peaje. Fin de la pataleta)

No por gastar un poco más de lo que me esperaba voy a dejar de disfrutar del día, y acabo de prepararme llegando arriba. Botas, crema de sol, pieles, zapatillas en la mochila, listos.

A las 9 llega el bus a Tiefenbachgletscher y empiezo a caminar. Buena noticia, la nieve sigue bastante dura.

Subiendo por la traza de un telesquí para evitar una zona donde han pasado las pistenbully para mover nieve. Hay mucha calima hoy... Me pregunto si es polvo sahariano. Inspiro y me parece oler humo... igual son los incendios del canadá...



Subo a un ritmo decente teniendo en cuenta lo que me cuestan las cosas a partir de los 3000 metros. Arriba en el glaciar las pistas presentan buen aspecto. Cremita con base bien dura. Se podría esquiar de lujo aquí con los remontes abiertos. A la derecha empieza a verse el pico de Innere Schwarze Schneide, 3369 metros que desde aquí parecen poca cosa.



Hasta los 3250 llego con las pieles, luego toca subir un trozo con los esquís.... ¿a la mochila? Mejor sí. ¿Crampones? Mejor, también.



Después de trastear un rato para dejarlo todo en su sitio, son las 10:23 cuando empiezo a subir la cresta final. En esta orientación sureste, la crosta no es portante, y tengo que subir a gatas para evitar hundirme demasiado. Una ventana en la cresta, se ve el Linker Fernerkogel.



Después de un paso algo expuesto, otro vistazo a la imponente cara noroeste me permite ver el fondo del valle de Pitztal, objetivo final del día. En primer plano, la sombra del Innere Schwarze Schneide sobre el Hangender Ferner (que abajo se convierte en Karlesferner, aunque sea el mismo glaciar)



Después del paso de escalada no me molesta nada el "Ötztal-style" de la cresta sobreequipada. Con esta calidad de roca y tamaño patio para una cima al ladito de los remontes, no me parece tampoco mala idea.



Cima! 10:44, se ve el coloso de la zona, Wildspitze con su Mittelbergferner. Segundo pico más alto de Austria y segundo glaciar más grande del Tirol. Aún con el humo de los fuegos canadienses, buenas vistas. Más cerca queda el Linker Fernerkogel, con un grupo que me parece que van con esquís llegando arriba.



La nieve en la cima está podrida, y la inspección visual me hace pensar que también lo está en la cara. Un golpe con el bastón me dice que, al contrario, está duro como una piedra. Vaya.



Bajo igualmente, nieve dura en las orientaciones norte y bastante buena crema en las contrapendientes a este. Decido no hacer exactamente la bajada planeada, no me apetece caerme por el precipicio que hay debajo, y subo un repecho para echar la vista atrás. Alguna firma se intuye en la parte inferior donde la nieve es más blanca. Lo demás, nieve dura, dura.



Queda la parte picante de la bajada, expuesta, nieve dura y alguna bola. En este momento me alegro que mi amigo no haya venido, había planeado venir con sus esquís de 120 de patín, que en nieve podrida funcionan muy bien.

Ya en el glaciar, se aprecia lo poco que cortan los cantos en la superfície irregular, y eso que en el glaciar ya había ablandecido un poco... Vengo de la zona de rocas en sombra en el centro de la imagen (en la captura de webcam del principio del report se aprecia el paso)



Estoy a unos 2900-2950 metros, me queda por delante una agradable subida hasta los 3278 del Linker Fernerkogel. En ese tiempo calculo que la nieve estará en su punto, más tarde de lo que imaginaba pero no nos vamos a quejar. Sigo la traza de crampones de grupos que han hecho la cima la pasada semana. Desde luego que se encontraron nieve más blanda que yo ahora.



Este glaciar tiene grietas bastante importantes y me daba cierto respeto, pero como las grietas han estado tapadas desde octubre y la nieve ahora está bien dura, no me preocupo. Además, que si puede pasar un grupo sin esquís con la nieve blanda, el riesgo es más que asumible.

A unos 3150, bonita perspectiva del pico que acabo de bajar. Desde luego, esta cara no se esquía.




La nieve realmente empieza a tener buena pinta. Ya queda poco. El grupo encordado empieza su bajada. Van muy despacio (hace más de hora y cuarto que los vi a 100 y pocos metros de la cima), y se empiezan a hundir. Con los esquís la crosta me sigue portando, pero me tengo que apurar un poco, vete a saber como está la zona baja.

Hago cima con los esquís (los últimos 15 metros hubieran sido mucho más fáciles sin esquís) y justo llegan dos que venían de la cresta. Los había visto en la zona superior del glaciar y me preguntaba si todo iba bien. Estaban decidiendo qué hacer, me dicen. Han pasado la noche en el refugio, y esta noche la vuelven a pasar allí. Les pregunto sobre las canales noroeste del Karleskopf, pero me dicen que no había nada de nieve. No me los creo (en la webcam de Rifflsee parecían decentes) pero les agradezco la información.

La primera mitad de la bajada sabe a gloria. ¡Qué buena cremita! Curvas a alta velocidad con nieve genial, me tengo que parar para sacar una foto de las firmas después de los pimeros 200 de desnivel.



La segunda parte requiere un poquito más de atención, hay una zona con grietas en la nieve que no pintan nada bien y que prefiero evitar, y una canal algo sucia que, después de una paradita para comprobar la continuidad desde arriba, se deja hacer muy bien. Vistazo atrás desde la lengua del glaciar justo debajo de los 2700.



El final de los glaciares es siempre interesante debido a como interaccionan los ríos de fusión y el hielo. Bonita cueva de hielo me encuentro, tanto desde fuera....



Como desde dentro. Al fondo, estación de Pitztal.



Decido que se ha hecho tarde para ir a ver el Karleskopf. Tocaría subir 200 metros, esquís en la espalda, y sin saber qué me iba a encontrar. En cambio, hay una canal que creo que sí me va a permitir bajar otros 200 metros, hasta los 2400 de la pista de esquí que baja al valle.

Voy disfrutando del paisaje, admirando las potentes canales del Linker Fernerkogel (parece que la central aún se podría haber hecho)



Cuando de repente me hundo. Un riachuelo cubierto, la nieve se empieza a ablandecer de verdad. Confirmación de que no tengo que ir a probar suerte ahí arriba.



Llego a la zona donde tendría que empezar la canal. Se ha ido mucha nieve los últimos días y toca quitar esquís para saber dónde me toca bajar.

Ahí está:



Por una canal lateral con algo de hielo y alguna piedra suelta se puede destrepar hasta la nieve (izquierda en la foto de arriba), que encuentro dura aún en la sombra. Con crampones hubiera sido un momento pero ya he mirado la hora y creo poder coger el bus de las dos y media, por lo que decido hacerlo sin ellos.

Consigo poner esquís en una posición algo precaria y se acaba la inseguridad. Un trocito cóncavo con nieve dura y una piedra en medio de la lengua de nieve lo bajo derrapando, luego ya sí, nieve de verano con agarre decente.



Tiene un punto técnico la bajada, y de nuevo me alegro que no haya venido mi amigo. Hay una parte estrecha que, si bien creo que se podría haber derrapado, bajo recto para controlar abajo la velocidad. Adrenalina en la última bajada.



Después se ensancha y, esquivando rocas medio hundidas en la superfície, se hace una bajada de lo más divertida. Sabe a la última...



Ya en la pista de esquí, me apresuro a cambiar de botas a zapatillas, a poner esquís en la mochila, quitar casco, etc etc. Empiezo a bajar delante de la espectacular pared este del Mittagskogel, 1000 metros de desnivel, la mayoría de más de 30 grados, hasta la misma pista. Y se llega en media hora de pieles desde la estación de Pitztal. No he ido este invierno por falta de nieve, pero creo que en cuánto a terreno hay muyyyy pocas estaciones del mundo que la igualen.



Abajo queda Mittelberg in Pitztal, quedan 50 minutos para el bus, 4,5km y 650 de desnivel. Vamos.



Vistazo atrás con el río que baja con importante caudal, la pequeña canal que he aprovechado para bajar hasta los 2400 y, al fondo, el pico de Linker Fernerkogel. Bonita postal.



Ya abajo en el valle, Karleskopf (que, efectivamente, no era ya esquiable), Innere Schwarze Schneid (primer pico del día) y Linker Fernerkogel (segundo pico). Gracias, Pitztal.



Llego con cinco minutos para dejar todo en orden para subir al bus, con un conductor muy estricto que no me deja dejar los esquís ni al suelo, ni atados a una barra (como hago siempre en los autobuses, pues no se mueven, no molestan y no dañan nada). La señora que va sentada delante siente lástima por como me ha gritado, y me ofrece un pequeño cruasán que hizo por la mañana. Le digo que no me puede dar comida, que no está permitido comer en el bus, pero insiste y me lo guardo en la mochila. La hora de bus con la calefacción puesta a por lo menos 40º, sin poder beber y con los pantalones de esquí negros al sol se hace eterna, pero no pasa nada. Otro año aprovechando el esquí en junio, con lo que a mí me gusta.

Bajando del tren de nuevo en Völs para esperar el último bus, unos niños en bicicletas me preguntan a gritos si he ido a esquiar. Sonrío y asiento con la cabeza. Cómo mola Innsbruck.

Un saludo

Yo cómo que nunca he hecho esquí de travesía pues aprovecho este repo para recordar viejos tiempos, y tan viejos, de cuando habíamos esquiado en el Rettenbach Gletscher y en el Pitztaler Gletscher cuando aún se esquiaba aquí con remontes en pleno mes de Agosto. Por cierto la muy pequeña aldea de Mittelberg junto con su vecina Mandarfen son un auténtico paraíso natural y de tranquilidad incluso en pleno Verano. Saludos!smiling smiley
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Enviado: 10-06-2025 17:16
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Ando un poco liado. La meteo, después de un invierno seco, ha traído una primavera bastante inestable. Viniendo de un invierno con poca nieve, no fue hasta mayo que se pudo esquiar más o menos con seguridad en cuanto a encontrarte tiburones, e incluso así... porque las sucesiones de nevadas en mayo hacían que la nieve no llegara a estar isotérmica, condición necesaria para tener buena nieve primavera. Empieza junio y empezamos con lluvias, humedades altas, mucha nube. Malas condiciones también. Pero, al fin, ayer la cosa prometía. Aire más frío, más seco, varias horas bajo cero a partir de unos 2500 y el punto de rocío rozando los -10 arriba. También hacía viento. Me preguntaba como habría ido el rehielo, si sería una crosta o un buen rehielo portante incluso al transformar.

Con esas reflexiones, el objetivo era claro: Innere Schwarze Schneide y Linker Fernerkogel, acceso desde los glaciares de Soelden, con una webcam para comprobar condiciones tanto de nieve, como de las grietas del glaciar, como de nubes, y un par de estaciones meteorológicas para confirmar las previsiones.

Así se ven las dos montañas elegidas la tarde anterior. Buena pinta



Lunes era festivo nacional en Austria, por lo que el transporte público va a medio gas. Toca coger bus para ir a Völs bien prontito. He quedado con un amigo que viene con otro bus. Justo subiendo a mi bus me llama, se le ha escapado. Igual en bici llega a la parada de tren anterior, Westbahnhof. Mientras tanto, llego a Völs y al andén, son las 06:25. Me llama otra vez, se le ha escapado. Si coge el siguiente, el bus que sube al glaciar sale 1h30 después. No las tiene todas, y decide abortar.

Medio durmiendo llego a Ötztal, me subo al bus hacia Obergurgl para bajarme en Soelden. Todo bien. Subo al bus y pregunto si hay que pagar el peaje en el peaje (así lo hicimos en Kaunertal dos semanas antes) o en el mismo bus. Sí, sí, aquí. Me explica de mala manera que es un bus privado (aunque sea una línea de la VVT, con horarios de la VVT, que sale en la app de la VVT y con el logo de la VVT en el bus) en una carretera privada y que mi ticket para transporte público no es válido. Me imprime un ticket de 15,20€, con el logo de la VVT. Además, los 7,50 del peaje.

(Inciso: hoy he llamado con el servicio de transporte de Ötztal que me han confirmado el precio de 15,20, sólo ida. Ida, vuelta y peaje, 37,90€. Precios, por cierto, que no están publicados en ninguna parte. Una web he encontrado donde dice que sí es válido el ticket de transporte público, pero no era oficial. Me han dicho que para saber los precios hay que acudir a la oficina de turismo. En fin. Que sea caro subir a 2800 metros desde 1300 lo entiendo, pero lo que me jode es que un coche, incluyendo hasta 5 pasajeros, paga 25,50€. Se llenan la boca con la sostenibilidad de su red de buses cuando le sale más barato al Porsche de turno subir que a un estudiante con abono de transporte público en bus. En ese sentido, mucho mejor Kaunertal, donde el peaje en bus se paga a 8 euros por persona, ticket aparte si no tienes, y el coche paga 28 euros de peaje. Fin de la pataleta)

No por gastar un poco más de lo que me esperaba voy a dejar de disfrutar del día, y acabo de prepararme llegando arriba. Botas, crema de sol, pieles, zapatillas en la mochila, listos.

A las 9 llega el bus a Tiefenbachgletscher y empiezo a caminar. Buena noticia, la nieve sigue bastante dura.

Subiendo por la traza de un telesquí para evitar una zona donde han pasado las pistenbully para mover nieve. Hay mucha calima hoy... Me pregunto si es polvo sahariano. Inspiro y me parece oler humo... igual son los incendios del canadá...



Subo a un ritmo decente teniendo en cuenta lo que me cuestan las cosas a partir de los 3000 metros. Arriba en el glaciar las pistas presentan buen aspecto. Cremita con base bien dura. Se podría esquiar de lujo aquí con los remontes abiertos. A la derecha empieza a verse el pico de Innere Schwarze Schneide, 3369 metros que desde aquí parecen poca cosa.



Hasta los 3250 llego con las pieles, luego toca subir un trozo con los esquís.... ¿a la mochila? Mejor sí. ¿Crampones? Mejor, también.



Después de trastear un rato para dejarlo todo en su sitio, son las 10:23 cuando empiezo a subir la cresta final. En esta orientación sureste, la crosta no es portante, y tengo que subir a gatas para evitar hundirme demasiado. Una ventana en la cresta, se ve el Linker Fernerkogel.



Después de un paso algo expuesto, otro vistazo a la imponente cara noroeste me permite ver el fondo del valle de Pitztal, objetivo final del día. En primer plano, la sombra del Innere Schwarze Schneide sobre el Hangender Ferner (que abajo se convierte en Karlesferner, aunque sea el mismo glaciar)



Después del paso de escalada no me molesta nada el "Ötztal-style" de la cresta sobreequipada. Con esta calidad de roca y tamaño patio para una cima al ladito de los remontes, no me parece tampoco mala idea.



Cima! 10:44, se ve el coloso de la zona, Wildspitze con su Mittelbergferner. Segundo pico más alto de Austria y segundo glaciar más grande del Tirol. Aún con el humo de los fuegos canadienses, buenas vistas. Más cerca queda el Linker Fernerkogel, con un grupo que me parece que van con esquís llegando arriba.



La nieve en la cima está podrida, y la inspección visual me hace pensar que también lo está en la cara. Un golpe con el bastón me dice que, al contrario, está duro como una piedra. Vaya.



Bajo igualmente, nieve dura en las orientaciones norte y bastante buena crema en las contrapendientes a este. Decido no hacer exactamente la bajada planeada, no me apetece caerme por el precipicio que hay debajo, y subo un repecho para echar la vista atrás. Alguna firma se intuye en la parte inferior donde la nieve es más blanca. Lo demás, nieve dura, dura.



Queda la parte picante de la bajada, expuesta, nieve dura y alguna bola. En este momento me alegro que mi amigo no haya venido, había planeado venir con sus esquís de 120 de patín, que en nieve podrida funcionan muy bien.

Ya en el glaciar, se aprecia lo poco que cortan los cantos en la superfície irregular, y eso que en el glaciar ya había ablandecido un poco... Vengo de la zona de rocas en sombra en el centro de la imagen (en la captura de webcam del principio del report se aprecia el paso)



Estoy a unos 2900-2950 metros, me queda por delante una agradable subida hasta los 3278 del Linker Fernerkogel. En ese tiempo calculo que la nieve estará en su punto, más tarde de lo que imaginaba pero no nos vamos a quejar. Sigo la traza de crampones de grupos que han hecho la cima la pasada semana. Desde luego que se encontraron nieve más blanda que yo ahora.



Este glaciar tiene grietas bastante importantes y me daba cierto respeto, pero como las grietas han estado tapadas desde octubre y la nieve ahora está bien dura, no me preocupo. Además, que si puede pasar un grupo sin esquís con la nieve blanda, el riesgo es más que asumible.

A unos 3150, bonita perspectiva del pico que acabo de bajar. Desde luego, esta cara no se esquía.




La nieve realmente empieza a tener buena pinta. Ya queda poco. El grupo encordado empieza su bajada. Van muy despacio (hace más de hora y cuarto que los vi a 100 y pocos metros de la cima), y se empiezan a hundir. Con los esquís la crosta me sigue portando, pero me tengo que apurar un poco, vete a saber como está la zona baja.

Hago cima con los esquís (los últimos 15 metros hubieran sido mucho más fáciles sin esquís) y justo llegan dos que venían de la cresta. Los había visto en la zona superior del glaciar y me preguntaba si todo iba bien. Estaban decidiendo qué hacer, me dicen. Han pasado la noche en el refugio, y esta noche la vuelven a pasar allí. Les pregunto sobre las canales noroeste del Karleskopf, pero me dicen que no había nada de nieve. No me los creo (en la webcam de Rifflsee parecían decentes) pero les agradezco la información.

La primera mitad de la bajada sabe a gloria. ¡Qué buena cremita! Curvas a alta velocidad con nieve genial, me tengo que parar para sacar una foto de las firmas después de los pimeros 200 de desnivel.



La segunda parte requiere un poquito más de atención, hay una zona con grietas en la nieve que no pintan nada bien y que prefiero evitar, y una canal algo sucia que, después de una paradita para comprobar la continuidad desde arriba, se deja hacer muy bien. Vistazo atrás desde la lengua del glaciar justo debajo de los 2700.



El final de los glaciares es siempre interesante debido a como interaccionan los ríos de fusión y el hielo. Bonita cueva de hielo me encuentro, tanto desde fuera....



Como desde dentro. Al fondo, estación de Pitztal.



Decido que se ha hecho tarde para ir a ver el Karleskopf. Tocaría subir 200 metros, esquís en la espalda, y sin saber qué me iba a encontrar. En cambio, hay una canal que creo que sí me va a permitir bajar otros 200 metros, hasta los 2400 de la pista de esquí que baja al valle.

Voy disfrutando del paisaje, admirando las potentes canales del Linker Fernerkogel (parece que la central aún se podría haber hecho)



Cuando de repente me hundo. Un riachuelo cubierto, la nieve se empieza a ablandecer de verdad. Confirmación de que no tengo que ir a probar suerte ahí arriba.



Llego a la zona donde tendría que empezar la canal. Se ha ido mucha nieve los últimos días y toca quitar esquís para saber dónde me toca bajar.

Ahí está:



Por una canal lateral con algo de hielo y alguna piedra suelta se puede destrepar hasta la nieve (izquierda en la foto de arriba), que encuentro dura aún en la sombra. Con crampones hubiera sido un momento pero ya he mirado la hora y creo poder coger el bus de las dos y media, por lo que decido hacerlo sin ellos.

Consigo poner esquís en una posición algo precaria y se acaba la inseguridad. Un trocito cóncavo con nieve dura y una piedra en medio de la lengua de nieve lo bajo derrapando, luego ya sí, nieve de verano con agarre decente.



Tiene un punto técnico la bajada, y de nuevo me alegro que no haya venido mi amigo. Hay una parte estrecha que, si bien creo que se podría haber derrapado, bajo recto para controlar abajo la velocidad. Adrenalina en la última bajada.



Después se ensancha y, esquivando rocas medio hundidas en la superfície, se hace una bajada de lo más divertida. Sabe a la última...



Ya en la pista de esquí, me apresuro a cambiar de botas a zapatillas, a poner esquís en la mochila, quitar casco, etc etc. Empiezo a bajar delante de la espectacular pared este del Mittagskogel, 1000 metros de desnivel, la mayoría de más de 30 grados, hasta la misma pista. Y se llega en media hora de pieles desde la estación de Pitztal. No he ido este invierno por falta de nieve, pero creo que en cuánto a terreno hay muyyyy pocas estaciones del mundo que la igualen.



Abajo queda Mittelberg in Pitztal, quedan 50 minutos para el bus, 4,5km y 650 de desnivel. Vamos.



Vistazo atrás con el río que baja con importante caudal, la pequeña canal que he aprovechado para bajar hasta los 2400 y, al fondo, el pico de Linker Fernerkogel. Bonita postal.



Ya abajo en el valle, Karleskopf (que, efectivamente, no era ya esquiable), Innere Schwarze Schneid (primer pico del día) y Linker Fernerkogel (segundo pico). Gracias, Pitztal.



Llego con cinco minutos para dejar todo en orden para subir al bus, con un conductor muy estricto que no me deja dejar los esquís ni al suelo, ni atados a una barra (como hago siempre en los autobuses, pues no se mueven, no molestan y no dañan nada). La señora que va sentada delante siente lástima por como me ha gritado, y me ofrece un pequeño cruasán que hizo por la mañana. Le digo que no me puede dar comida, que no está permitido comer en el bus, pero insiste y me lo guardo en la mochila. La hora de bus con la calefacción puesta a por lo menos 40º, sin poder beber y con los pantalones de esquí negros al sol se hace eterna, pero no pasa nada. Otro año aprovechando el esquí en junio, con lo que a mí me gusta.

Bajando del tren de nuevo en Völs para esperar el último bus, unos niños en bicicletas me preguntan a gritos si he ido a esquiar. Sonrío y asiento con la cabeza. Cómo mola Innsbruck.

Un saludo
Cita
Medicine
Ando un poco liado. (...)

No; si, el que más o el que menos, todos andamos con líos. Yo, sin ir más lejos, tengo una montaña de exámenes por corregir. Levanto la vista de los papeles para ver qué se cuentan en el foro y me encuentro con esto. Ahora voy a tener que hacer un esfuerzo extraordinario para que se me pase el enfado y no pagarlo con el próximo examen que corrija.

¡Magnifico! Y no, no me he puesto de mal humor sino todo lo contrario. Solo de imaginarte por ahí sacando giros se me alegra el alma. Igual el próximo examen que corrija sale beneficiado smiling smiley
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Enviado: 10-06-2025 18:34
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Ando un poco liado. La meteo, después de un invierno seco, ha traído una primavera bastante inestable. Viniendo de un invierno con poca nieve, no fue hasta mayo que se pudo esquiar más o menos con seguridad en cuanto a encontrarte tiburones, e incluso así... porque las sucesiones de nevadas en mayo hacían que la nieve no llegara a estar isotérmica, condición necesaria para tener buena nieve primavera. Empieza junio y empezamos con lluvias, humedades altas, mucha nube. Malas condiciones también. Pero, al fin, ayer la cosa prometía. Aire más frío, más seco, varias horas bajo cero a partir de unos 2500 y el punto de rocío rozando los -10 arriba. También hacía viento. Me preguntaba como habría ido el rehielo, si sería una crosta o un buen rehielo portante incluso al transformar.

Con esas reflexiones, el objetivo era claro: Innere Schwarze Schneide y Linker Fernerkogel, acceso desde los glaciares de Soelden, con una webcam para comprobar condiciones tanto de nieve, como de las grietas del glaciar, como de nubes, y un par de estaciones meteorológicas para confirmar las previsiones.

Así se ven las dos montañas elegidas la tarde anterior. Buena pinta



Lunes era festivo nacional en Austria, por lo que el transporte público va a medio gas. Toca coger bus para ir a Völs bien prontito. He quedado con un amigo que viene con otro bus. Justo subiendo a mi bus me llama, se le ha escapado. Igual en bici llega a la parada de tren anterior, Westbahnhof. Mientras tanto, llego a Völs y al andén, son las 06:25. Me llama otra vez, se le ha escapado. Si coge el siguiente, el bus que sube al glaciar sale 1h30 después. No las tiene todas, y decide abortar.

Medio durmiendo llego a Ötztal, me subo al bus hacia Obergurgl para bajarme en Soelden. Todo bien. Subo al bus y pregunto si hay que pagar el peaje en el peaje (así lo hicimos en Kaunertal dos semanas antes) o en el mismo bus. Sí, sí, aquí. Me explica de mala manera que es un bus privado (aunque sea una línea de la VVT, con horarios de la VVT, que sale en la app de la VVT y con el logo de la VVT en el bus) en una carretera privada y que mi ticket para transporte público no es válido. Me imprime un ticket de 15,20€, con el logo de la VVT. Además, los 7,50 del peaje.

(Inciso: hoy he llamado con el servicio de transporte de Ötztal que me han confirmado el precio de 15,20, sólo ida. Ida, vuelta y peaje, 37,90€. Precios, por cierto, que no están publicados en ninguna parte. Una web he encontrado donde dice que sí es válido el ticket de transporte público, pero no era oficial. Me han dicho que para saber los precios hay que acudir a la oficina de turismo. En fin. Que sea caro subir a 2800 metros desde 1300 lo entiendo, pero lo que me jode es que un coche, incluyendo hasta 5 pasajeros, paga 25,50€. Se llenan la boca con la sostenibilidad de su red de buses cuando le sale más barato al Porsche de turno subir que a un estudiante con abono de transporte público en bus. En ese sentido, mucho mejor Kaunertal, donde el peaje en bus se paga a 8 euros por persona, ticket aparte si no tienes, y el coche paga 28 euros de peaje. Fin de la pataleta)

No por gastar un poco más de lo que me esperaba voy a dejar de disfrutar del día, y acabo de prepararme llegando arriba. Botas, crema de sol, pieles, zapatillas en la mochila, listos.

A las 9 llega el bus a Tiefenbachgletscher y empiezo a caminar. Buena noticia, la nieve sigue bastante dura.

Subiendo por la traza de un telesquí para evitar una zona donde han pasado las pistenbully para mover nieve. Hay mucha calima hoy... Me pregunto si es polvo sahariano. Inspiro y me parece oler humo... igual son los incendios del canadá...



Subo a un ritmo decente teniendo en cuenta lo que me cuestan las cosas a partir de los 3000 metros. Arriba en el glaciar las pistas presentan buen aspecto. Cremita con base bien dura. Se podría esquiar de lujo aquí con los remontes abiertos. A la derecha empieza a verse el pico de Innere Schwarze Schneide, 3369 metros que desde aquí parecen poca cosa.



Hasta los 3250 llego con las pieles, luego toca subir un trozo con los esquís.... ¿a la mochila? Mejor sí. ¿Crampones? Mejor, también.



Después de trastear un rato para dejarlo todo en su sitio, son las 10:23 cuando empiezo a subir la cresta final. En esta orientación sureste, la crosta no es portante, y tengo que subir a gatas para evitar hundirme demasiado. Una ventana en la cresta, se ve el Linker Fernerkogel.



Después de un paso algo expuesto, otro vistazo a la imponente cara noroeste me permite ver el fondo del valle de Pitztal, objetivo final del día. En primer plano, la sombra del Innere Schwarze Schneide sobre el Hangender Ferner (que abajo se convierte en Karlesferner, aunque sea el mismo glaciar)



Después del paso de escalada no me molesta nada el "Ötztal-style" de la cresta sobreequipada. Con esta calidad de roca y tamaño patio para una cima al ladito de los remontes, no me parece tampoco mala idea.



Cima! 10:44, se ve el coloso de la zona, Wildspitze con su Mittelbergferner. Segundo pico más alto de Austria y segundo glaciar más grande del Tirol. Aún con el humo de los fuegos canadienses, buenas vistas. Más cerca queda el Linker Fernerkogel, con un grupo que me parece que van con esquís llegando arriba.



La nieve en la cima está podrida, y la inspección visual me hace pensar que también lo está en la cara. Un golpe con el bastón me dice que, al contrario, está duro como una piedra. Vaya.



Bajo igualmente, nieve dura en las orientaciones norte y bastante buena crema en las contrapendientes a este. Decido no hacer exactamente la bajada planeada, no me apetece caerme por el precipicio que hay debajo, y subo un repecho para echar la vista atrás. Alguna firma se intuye en la parte inferior donde la nieve es más blanca. Lo demás, nieve dura, dura.



Queda la parte picante de la bajada, expuesta, nieve dura y alguna bola. En este momento me alegro que mi amigo no haya venido, había planeado venir con sus esquís de 120 de patín, que en nieve podrida funcionan muy bien.

Ya en el glaciar, se aprecia lo poco que cortan los cantos en la superfície irregular, y eso que en el glaciar ya había ablandecido un poco... Vengo de la zona de rocas en sombra en el centro de la imagen (en la captura de webcam del principio del report se aprecia el paso)



Estoy a unos 2900-2950 metros, me queda por delante una agradable subida hasta los 3278 del Linker Fernerkogel. En ese tiempo calculo que la nieve estará en su punto, más tarde de lo que imaginaba pero no nos vamos a quejar. Sigo la traza de crampones de grupos que han hecho la cima la pasada semana. Desde luego que se encontraron nieve más blanda que yo ahora.



Este glaciar tiene grietas bastante importantes y me daba cierto respeto, pero como las grietas han estado tapadas desde octubre y la nieve ahora está bien dura, no me preocupo. Además, que si puede pasar un grupo sin esquís con la nieve blanda, el riesgo es más que asumible.

A unos 3150, bonita perspectiva del pico que acabo de bajar. Desde luego, esta cara no se esquía.




La nieve realmente empieza a tener buena pinta. Ya queda poco. El grupo encordado empieza su bajada. Van muy despacio (hace más de hora y cuarto que los vi a 100 y pocos metros de la cima), y se empiezan a hundir. Con los esquís la crosta me sigue portando, pero me tengo que apurar un poco, vete a saber como está la zona baja.

Hago cima con los esquís (los últimos 15 metros hubieran sido mucho más fáciles sin esquís) y justo llegan dos que venían de la cresta. Los había visto en la zona superior del glaciar y me preguntaba si todo iba bien. Estaban decidiendo qué hacer, me dicen. Han pasado la noche en el refugio, y esta noche la vuelven a pasar allí. Les pregunto sobre las canales noroeste del Karleskopf, pero me dicen que no había nada de nieve. No me los creo (en la webcam de Rifflsee parecían decentes) pero les agradezco la información.

La primera mitad de la bajada sabe a gloria. ¡Qué buena cremita! Curvas a alta velocidad con nieve genial, me tengo que parar para sacar una foto de las firmas después de los pimeros 200 de desnivel.



La segunda parte requiere un poquito más de atención, hay una zona con grietas en la nieve que no pintan nada bien y que prefiero evitar, y una canal algo sucia que, después de una paradita para comprobar la continuidad desde arriba, se deja hacer muy bien. Vistazo atrás desde la lengua del glaciar justo debajo de los 2700.



El final de los glaciares es siempre interesante debido a como interaccionan los ríos de fusión y el hielo. Bonita cueva de hielo me encuentro, tanto desde fuera....



Como desde dentro. Al fondo, estación de Pitztal.



Decido que se ha hecho tarde para ir a ver el Karleskopf. Tocaría subir 200 metros, esquís en la espalda, y sin saber qué me iba a encontrar. En cambio, hay una canal que creo que sí me va a permitir bajar otros 200 metros, hasta los 2400 de la pista de esquí que baja al valle.

Voy disfrutando del paisaje, admirando las potentes canales del Linker Fernerkogel (parece que la central aún se podría haber hecho)



Cuando de repente me hundo. Un riachuelo cubierto, la nieve se empieza a ablandecer de verdad. Confirmación de que no tengo que ir a probar suerte ahí arriba.



Llego a la zona donde tendría que empezar la canal. Se ha ido mucha nieve los últimos días y toca quitar esquís para saber dónde me toca bajar.

Ahí está:



Por una canal lateral con algo de hielo y alguna piedra suelta se puede destrepar hasta la nieve (izquierda en la foto de arriba), que encuentro dura aún en la sombra. Con crampones hubiera sido un momento pero ya he mirado la hora y creo poder coger el bus de las dos y media, por lo que decido hacerlo sin ellos.

Consigo poner esquís en una posición algo precaria y se acaba la inseguridad. Un trocito cóncavo con nieve dura y una piedra en medio de la lengua de nieve lo bajo derrapando, luego ya sí, nieve de verano con agarre decente.



Tiene un punto técnico la bajada, y de nuevo me alegro que no haya venido mi amigo. Hay una parte estrecha que, si bien creo que se podría haber derrapado, bajo recto para controlar abajo la velocidad. Adrenalina en la última bajada.



Después se ensancha y, esquivando rocas medio hundidas en la superfície, se hace una bajada de lo más divertida. Sabe a la última...



Ya en la pista de esquí, me apresuro a cambiar de botas a zapatillas, a poner esquís en la mochila, quitar casco, etc etc. Empiezo a bajar delante de la espectacular pared este del Mittagskogel, 1000 metros de desnivel, la mayoría de más de 30 grados, hasta la misma pista. Y se llega en media hora de pieles desde la estación de Pitztal. No he ido este invierno por falta de nieve, pero creo que en cuánto a terreno hay muyyyy pocas estaciones del mundo que la igualen.



Abajo queda Mittelberg in Pitztal, quedan 50 minutos para el bus, 4,5km y 650 de desnivel. Vamos.



Vistazo atrás con el río que baja con importante caudal, la pequeña canal que he aprovechado para bajar hasta los 2400 y, al fondo, el pico de Linker Fernerkogel. Bonita postal.



Ya abajo en el valle, Karleskopf (que, efectivamente, no era ya esquiable), Innere Schwarze Schneid (primer pico del día) y Linker Fernerkogel (segundo pico). Gracias, Pitztal.



Llego con cinco minutos para dejar todo en orden para subir al bus, con un conductor muy estricto que no me deja dejar los esquís ni al suelo, ni atados a una barra (como hago siempre en los autobuses, pues no se mueven, no molestan y no dañan nada). La señora que va sentada delante siente lástima por como me ha gritado, y me ofrece un pequeño cruasán que hizo por la mañana. Le digo que no me puede dar comida, que no está permitido comer en el bus, pero insiste y me lo guardo en la mochila. La hora de bus con la calefacción puesta a por lo menos 40º, sin poder beber y con los pantalones de esquí negros al sol se hace eterna, pero no pasa nada. Otro año aprovechando el esquí en junio, con lo que a mí me gusta.

Bajando del tren de nuevo en Völs para esperar el último bus, unos niños en bicicletas me preguntan a gritos si he ido a esquiar. Sonrío y asiento con la cabeza. Cómo mola Innsbruck.

Un saludo
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Medicine

Cómo mola Innsbruck.

Que maravilla, que gozada poder acceder a la nieve con "tan poco" porteo, quien lo pillase por estos lares enamorado - love

Efectivamente, Innsbruck mola mucho, por donde te mueves tú, aún más me quito el sombrero
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Enviado: 11-06-2025 13:57
Registrado: 7 años antes
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Joder la nieve que queda por esos lares!!! En el piri porteo majo, disfruta que todavía sacas unos giros.
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Enviado: 11-06-2025 21:24
Moderador
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Medicine
Ando un poco liado. (...)

No; si, el que más o el que menos, todos andamos con líos. Yo, sin ir más lejos, tengo una montaña de exámenes por corregir. Levanto la vista de los papeles para ver qué se cuentan en el foro y me encuentro con esto. Ahora voy a tener que hacer un esfuerzo extraordinario para que se me pase el enfado y no pagarlo con el próximo examen que corrija.

¡Magnifico! Y no, no me he puesto de mal humor sino todo lo contrario. Solo de imaginarte por ahí sacando giros se me alegra el alma. Igual el próximo examen que corrija sale beneficiado smiling smiley
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ManuelV
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Medicine
Ando un poco liado. (...)

No; si, el que más o el que menos, todos andamos con líos. Yo, sin ir más lejos, tengo una montaña de exámenes por corregir. Levanto la vista de los papeles para ver qué se cuentan en el foro y me encuentro con esto. Ahora voy a tener que hacer un esfuerzo extraordinario para que se me pase el enfado y no pagarlo con el próximo examen que corrija.

¡Magnifico! Y no, no me he puesto de mal humor sino todo lo contrario. Solo de imaginarte por ahí sacando giros se me alegra el alma. Igual el próximo examen que corrija sale beneficiado smiling smiley

Aptobado general y arreglado!



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Enviado: 04-09-2025 16:43
Registrado: 10 años antes
Mensajes: 3.627
hacia tiempo que no pasaba por este subforo y menudos reportajes me encuentro sorprendido pulgar arribapulgar arribapulgar arriba
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