David Bowie, la legendaria estrella del rock, icono estético y artístico de la segunda mitad del siglo XX, falleció este domingo a los 69 años, víctima del cáncer. Con él se va un artista en permanente revolución que desafió todas las tendencias en la música, la moda y hasta la sexualidad. Fue más que la voz de una generación. Su imaginación y su talento marcaron la segunda mitad del siglo XX.
Nacido en 1947, con el nombre de David Robert Jones, adoptó el apellido de Bowie para diferenciarse de Davy Jones, de los Monkees, y emprendió su carrera en solitario a mediados de los años 60. Su primer éxito fue Space Oddity, el tema que daba título a su segundo disco, en 1969. Hunky Dory (1971) y The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders of Mars (1972) cimentaron su leyenda global. La segunda mitad de los setenta trajo la llamada trilogía de Berlín, sus discos con Brian Eno, inlcuido el inmortal Heroes (1977). En los ochenta abrazó el pop y bajó a la pista de baile, con éxitos como Let's Dance (1983). Fame fue su primer número 1 en América, y llegó a vender mas de 130 millones de copias.
Lo que pocos saben de él, es su unión con el esquí. Sus orígenes con esta afición comienzan en 1976, cuando se traslada con su esposa Angie Barnett al Chalet Clos de Mesanges en Blonay, cerca de Vevey (Suiza). Cuando cuatro años después se divorcian, el se queda en el país, aunque se traslada a Lausanne donde se compra un castillo de 20 habitaciones, escapándose periódicamente a esquiar. En 1992 se casa con la excéntrica modelo Iman, y juntos pasan muchos días de invierno esquiando en Gstaad. Según dijo hace unos pocos años a varios medios de prensa, "Suiza es el único sitio donde vuelvo feliz. Allí me dejan en paz". Pese a que sus esquiadas siempre van rodeadas de paparazis, esta es una faceta que el artista da poco a conocer. De hecho su viejo amigo Geoff MacCormack comentó hace un par de años en la prensa, que cuando se enteró, lo primero que pensó fue "¿a esquiar? David va a esquiar?".
Y eso que A Bowie le debía gustar tanto la nieve, que incluso puso su voz para bandas sonoras de películas con temática de esquí como la versión de Space Odyssey que hizo para la productora TGR en Tangerine Dream o Rebel Rebel en la apertura de Hunting Yeti de Nimbus. En 1998 la pareja deja Suiza y se traslada a Nueva York, aunque sigue escapándose siempre que puede.
Con todo, el mejor tributo que le han hecho fue el que Armada le hizo en las temporadas 2005-2006 y 2008-2009. La compañía de Park City encargó a Rick Stultz que diseñara un gráfico de David Bowie para uno de sus modelos, el cual ahora mismo debe ser objeto de deseo de coleccionistas y fans de la musica de Bowie.
Con sus discos, sus apariciones cinematográficas y sus looks, David Bowie deja una huella imborrable en la música y en la cultura popular del último medio siglo. Y también una pequeña huella en el mundo de la nieve. Aquí os dejamos el video de Hunting Yeti (a partir del minuto 1 empieza a sonar su música. Ideal para ir escuchando mientras lees este artículo, aunque el video está lleno de música maravillosa para ir dejando sonar...)