Sin embargo, la FIS no ha querido acceder a la petición de la bicampeona mundial y oro olímpico, que lamentó la decisión adoptada. El presidente de la federación canadiense Max Gartner aseguró que la intención de Vonn era "elevar el perfil" de este deporte,
"Vio una gran oportunidad para elevar el perfil de este deporte, atrayendo el interés de la gente que normalmente no siguen pruebas de esquí, sobre todo en América del Norte".
Aún así, Vonn se guarda una opción de poder competir con los hombres en el caso que opte por apelar la decisión. Si se produce esta situación, la esquiadora norteamericana no podría tomar la salida en la prueba femenina, que se celebrará seis días después.
