La estación de
Valgrande-Pajares ha abierto hoy sus pistas por primera vez en la presente campaña invernal, que arrancó oficialmente hace mes y medio. Casi
1.400 aficionados han pagado su abono de temporada en las estaciones asturianas y de momento no han podido pisar las pistas debido a la falta de nieve. Solamente la estación leonesa de
San Isidro, y con una pírrica superficie esquiable, ha permitido a los deportistas disfrutar del esquí en la Cordillera Cantábrica.
Desde que se abriera el plazo, ya en noviembre del año pasado, para la venta de abonos de temporada para las estaciones de Valgrande-Pajares y Fuentes de Invierno, un total de
1.389 personas lo han adquirido en alguna de sus modalidades. En el complejo lenense se han vendido
972 abonos para la presente temporada, mientras que en Fuentes de Invierno, donde aún no hay una previsión concreta de apertura, se tramitaron
417 abonos para la temporada 2011-2012.
Buena parte de esos esquiadores, los que tengan abono para Pajares, podrán estrenar hoy la campaña. Y es que la dirección del complejo invernal anunciaba ayer por la tarde que tras analizar la situación en la que se encontraban las pistas, el complejo lenense abriría hoy sus puertas, salvo inclemencias del tiempo. Desde el complejo lenense indicaron que se estaban
«ultimando todos los preparativos para proceder a la apertura de la estación a la práctica del esquí por primera vez en esta temporada».
La nevada de la madrugada del domingo y de las primeras horas del lunes y, fundamentalmente, la
producción a destajo de nieve con el sistema de innivación artificial, han permitido al complejo lenense acumular
«los espesores necesarios para garantizar» la apertura. La estación ha puesto hoy a disposición de los usuarios
1,8 kilómetros esquiables, que comprenderían la pistas innivadas de las zonas de Hoya de Cueto Negro y Valle del Sol. Los remontes que se pondrán en funcionamiento son tres telesillas, en concreto los telesillas Cueto Negro, Valle del Sol y Hoya de Cueto Negro. De cara a los próximos días, la previsión meteorológica vuelve a ser poco optimista, por lo que desde la estación han priorizado
«la posibilidad de esquiar cuanto antes en la estación más que a esperar a tener unas muy buenas condiciones para la práctica del esquí».
Mientras, la estación allerana de
Fuentes de Invierno sigue sin tener los espesores necesarios para abrir sus puertas. Y es que a pesar de que la nevada fue similar a la de Pajares, la falta del sistema de innivación artificial (vinculado a la falta de suministro eléctrico) impide reforzar los espesores naturales. De momento, las previsiones meteorológicas tampoco acompañan de cara a los próximos días.
La que sigue abierta, y ayer ampliaba su oferta esquiable hasta los
2,5 kilómetros, era la estación leonesa de
San Isidro. El pasado lunes reabrió sus puertas, tras un paréntesis de una semana, con una única pista para principiantes en la zona de Cebolledo.