Por ello, ambos, empleados y clientes, son partícipes en las acciones concretas que se llevan a cabo para mantener intacto el entorno natural de las estaciones y para que la calidad de su medio ambiente no se vea alterada. Las actuaciones tienen lugar en distintos ámbitos (paisaje, transporte, residuos, energía y suelo): revisión de la configuración de las pistas y de las zonas de obras en colaboración con el Conservatorio Botánico de los Pirineos; implementar dispositivos de señalización anticolusión para los pájaros en los cables de remontes mecánicos; incitar a los esquiadores a usar el coche compartido, seguimiento del consumo de carburante de la flota de vehículos; implementar recogida selectiva de residuos (peligrosos o no); recuperación y tratamiento de los residuos; creación de un diagnostico energético para analizar los consumos y elaborar un programa de acciones apropiado con objetivos precisos (disminuir un 10% la necesidad en energía para cada usuario en los remontes mecánicos en 5 años y en un 20% el consumo de gasoil por hora de apisonamiento); utilización de aceites hidráulicos biodegradables en los equipamientos de los sitios ....
Además durante el invierno se llevan a cabo varias acciones de sensibilización: distribución de ceniceros de bolsillo, puntos de limpieza en las pistas, carteles de información y sensibilización, recorrido educativo para los niños bajo forma de juegos en las colas... Todas estas pautas generales para la preservación del entorno natural han permitido la ejecución de determinadas acciones puntuales que refuerzan el carácter de desarrollo sostenible que mantiene Hautes-Pyrenées en cada una de sus estaciones.
Medidas concretas de cuatro estaciones
Peyragudes es la primera estación francesa en comprar una pisanieves que mide el espesor del manto de nieve para producir una nieve artificial de manera razonada. Durante el mantenimiento de las pistas, la máquina, gracias a un radar, evalúa el grosor. Estos datos se tramiten directamente al cañón de nieve vía bluetooth que, gracias al perfil de la pista, define de manera precisa las zonas que cubrir de nieve en primer lugar.
La producción de nieve se lanza y la red de cañones de nieve se pilota por informática. Este proceso permite al innivador, ser extremadamente preciso acerca de la cantidad de nieve que producir y la zona a cubrir de nieve. La estación controla mejor su producción de nieve y optimiza así sus recursos en agua.
Piau-Engaly ha creado más de 250 metros de para-nieves en la parte alta del dominio esquiable, en los perímetros más difíciles de que la nieve se aposente a causa del viento lo que permite controlar el espesor de la nieve y que esta no se vaya.
Saint Lary se ha comprometido además mucho más a fondo con un proceso de desarrollo sostenible. Más del 90% del territorio de la estación está protegido (Natura 2000). Es la primera estación de los Pirineos que ha firmado la Carta de Desarrollo Sostenible iniciado por la ANMSM (Asociación Nacional de Medicina y Rescate en Montaña, de Francia).
Entre los compromisos que ha adoptado están: compra de coches eléctricos, red de transporte público gratuito entre los diferentes alojamientos, y la construcción el pasado año 2009 de un telecabina entre el pueblo y el dominio esquiable que ha permitido eliminar los 18 buses lanzadera que conectaban la población con las pistas, evitando así la emisión de toneladas de CO2.
Val Louron es la única estación francesa en utilizar un cañón de nieve con temperatura positiva que permite una mejor calidad de la nieve.
Desde 1997, esta estación de esquí localizada a 1400m de altura, ha probado un nuevo prototipo de innivador que permite producir nieve a partir de 0º y hasta temperaturas que pueden alcanzar los 10 o 15º. El principio es sencillo : un gran refrigerador de 14 toneladas congela el agua, transformada en hielo, molida y expulsada como nieve muy densa, resistiendo bien a las radiaciones.