The North Face contra The South Butt

Con solo 16 años, Jimmy Winkelmann decidió crear una marca de ropa que parodiara a la marca The North Face, como una autoexclusión de lo que consideraba el símbolo de estatus que se veía en los pasillos de su colegio. De aquello hace dos años, y ahora a los 18, ya en la Universidad, se encuentra con una empresa que está teniendo éxito gracias a la venta por Internet, hasta el punto que ha puesto nerviosa a la propia The North Face, que ha decidido demandarle por daños y perjuicios. No hay que decir que las ventas de The South Butt han subido como la espuma.

La disputa ha atraído a los medios de comunicación

Y con esas ventas se ha pagado un abogado, porque dice que no se va a plegar a las exigencias del gigante norteamericano. De hecho la disputa comenzó hace dos meses, cuando The North Face le envió una carta exigiendo que detuviera la venta de sus camisetas, forros polares y pantalones cortos. The South Butt no solamente no se detuvo, sino que usó la carta para incrementar sus ventas gracias a una publicidad que no tiene precio. Mientras el está en la Universidad, otras empresas se encargan de la comercialización y fabricación de las prensas, y el solo cobra por los derechos de imagen.

The North Face argumenta en un pliego de 84 páginas, que "desafortunadamente e inevitablemente, la marca The North Face atrae a un buen número de oportunistas que buscan piratear su marca para hacerse famoso pero su calidad es inferior". La parodia incluye el logo de The North Face colocado al revés simulando un culo, y el lema de la compañía “Never Stop Exploring” ha sido cambiado por “Never Stop Relaxing”. Por tanto, a juicio de Albert S. Watkins, el abogado defensor, al público ya le queda claro cual es la diferencia entre una cara y un culo.

Samson contra Golia
La disputa ha captado la atención de los medios de prensa de Norteamérica, que ya lo han bautizado como un Samson contra Goliat, en referencia a dos colosos. Por una parte The North Face, propiedad de VF Corporation, una empresa que facturó 7.000 millones de dólares en el anterior ejercicio fiscal y es una de las empresas téxtiles mas grandes del mundo.

En el otro bando está Internet, un gigante a través del cual se están haciendo las ventas, y que se puede volver en contra de The North Face, si miles de consumidores deciden apoyar al joven Jimmy Winkelmann. De momento ha comenzado un rápido movimiento en Facebook y Twitter, donde se ha puesto toda la maquinaria de márketing en marcha.
Desde el enlace http://apps.facebook.com/south-butt-challenge/, puedes participar en el juego "Face or Butt Challenge", y casi 4.000 personas se han hecho fan rápidamente mientras desde The South Butt ya esperan con ansia las ventas que van a acarrear toda esta polémica.

Si los apoyos en Internet crecen, quizás The North Face reconsidere la demanda, pero mientras tanto The South Butt, está ansioso de aprovechar el tirón de ventas que le va a reportar todo este asunto.

The South Butt ha cambiado el lema por el de 'Never Stop Relaxing'