El caso es que ni siquiera se prevén temperaturas suficientes para poder poner en marcha los cañones de innivación artificial en todo lo que resta de mes, a no ser en momentos puntuales como el de anoche. De hecho, hoy y mañana rondarán los dos bajo cero y los cero respectivamente, lo que no es suficiente para casi nada.
Aún así, el hecho de que la temperatura haya bajado ya de cero grados es un alivio para todos los trabajadores de la estación, que vieron como el fin de semana de Reyes los 10 kilómetros esquiables se convertían en 600 metros por el aumento de las temperaturas en dos días y como, desde entonces, apenas se han tenido que poner los abrigos en la estación. Sin embargo, desde la infraestructura lenense se aseguró ayer que sino regresa el viento sur en forma de temporal, como sucedió la segunda semana de este mes, y las temperaturas no ascienden de golpe, los 600 metros repartidos en dos pistas que la estación mantiene abiertos, podrían ser aprovechables hasta febrero.
Lo que si tienen claro desde Pajares, como ayer mismo explicaba su director, Felipe García Pertierra, es que "abrir abriremos, pero se estará bajo mínimos". García Pertierra mostró poca confianza en que los partes se equivoquen y pueda nevar en los próximos días, aunque aseguró tener esperanza en que "las cosas cambien a partir de febrero".
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