Pistenbully nació en un día de esquí en los Alpes suizos, en que Karl Kässbohrer, dueño de una marca de automoción, encontró una máquina pisapistas averiada y sin posibilidad de repararse. En aquel momento Kässbohrer y su hermano Otto encargaron a Walter Haug, su ingeniero de diseño, un sistema de rodadura especialmente diseñado para vehículos de nieve que resolvería las demandas del mercado en materia de tecnología. Walter Haug acabó el prototipo den Junio de 1.968, y desde entonces se le ha considerado el verdadero creador de Pisten Bully.
La primera máquina pisapista que se vio en las televisiones de todo el mundo, fué la que se usó en las olimpiadas celebradas en Squaw Valley de 1.960, y las manejaba el ejército. Por tanto, entrar en este negocio en 1.968 fue una decisión importante al haber en ese momento unas 10 compañías y algunos ingenieros aficionados que trabajaban este tipo de vehículos. Básicamente modelos con un motor de gasolina, control manual de frenos, cambio manual y frenos de disco o de tambor.
A ese modelo reconvertido se le bautizó como 39.145 D y su primera prueba a la que se le sometió, fue en la estación de Flaine y dejó a todos sus competidores atrás, gracias a su conducción hidrostática, mientras que la competencia seguía con la manual. El Pistenbully subía por las cuestas a una velocidad constante, pudiendose adaptar así perfectamente a las condiciones del terreno y de la nieve. Fue en ese momento cuando se convencieron de que la máquina iba a venderse, y a ello se le unió el Jefe de ventas de la filial SETRA, fabricante de carrocerías y autobuses, que organizó la primera sala de ventas en 1.971, y se quedó hasta 2001.
Así, en 1.979, diez años después de la primera producción, ya habían 2.000 Pisten Bully en 35 países de todo el mundo. Durante esta década se hicieron sucesivas innovaciones que la llevó al éxito, pero una de las innovaciones mas esperadas, aunque internamente, fué la que en 1.977 permitió que los empleados tuvieran que dejar de empujar a pulso cada una de las máquinas en su proceso de fabricación. A finales de los '70, la fábrica fué renovada por segunda vez, y a Pisten Bully se le dotó de un edificio propio para su fabricación.
La década de los '90 fué tambien importante para la compañía. En 1.994 la compañía se separa financieramente de Geländefahrzeuge, la empresa de la Karl Kässbohrer Fahrzeugwerke GmbH dedicada a la fabricación de vehículos todo terreno. En 1.997 se entrega el vehículo número 10.000, y ya se vendía entre 52 países de todos los continentes. También salió de la cadena de montaje el PistenBully 300, un nuevo concepto de vehículo con mantenimiento mas bajo, podia subir pendientes verdaderamente extremas y un tensor automático del track. El 16 de septiembre de 1.998 sus acciones se colocan en la bolsa de Frankfurt y cuatro años despues, la compañía se movió desde la población de Ulm hasta la de Laupheim, donde se construyó una fábrica de diseño, y muy moderna.
Ambición personal, patentes adelantadas para la época como la conducción hidrostática y mucho trabajo, según relatan los actuales mandatarios de la compañía, han llevado al éxito de la Pisten Bully, que ya tiene el 50% del mercado mundial y hace unos días entregó su máquina número 15.000.