Esta declaración se produce, al tiempo, “como llamada de atención sobre la respetable pero quizá perjudicial disparidad provocada por la coincidencia este fin de semana en Formigal, de una concentración contra la ampliación de este centro, y de un encuentro con agentes turísticos de otras comunidades y países, organizado por Turespaña y la ‘marca Pirineos’ en la que participa el GA.
En este sentido, el Comité critica “que las obras en Formigal hayan sido aprovechadas para reagrupar a quienes mantienen una oposición sin alternativas viables. Respetando todas las posiciones políticas y opiniones, carece de sentido que desde lejanas ciudades se acuda al Pirineo para decir a los vecinos de estos pueblos cómo deben vivir, qué deben hacer y que la principal actividad socioeconómica local no puede desarrollarse”.
Por ello, el PAR de Alto Gállego llega a preguntarse “si se entendería que grupos de montañeses se desplazaran a Zaragoza para negar la Expo, o a Madrid para criticar la candidatura olímpica, con todo el derecho que les concediera su condición de ciudadanos, pero con el único motivo de ser un visitante temporal de esas grandes urbes. Se trataría de una evidente falta de respeto que, sin embargo, está sucediendo a la inversa, sin contar con nuestra opinión mayoritaria”.
Iglesias pasa un viernes de esquí.
El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, decidió ayer tomarse un día de fiesta, como anticipo de las próximas vacaciones de Semana Santa. Por eso, se trasladó hasta el Pirineo oscense y pasó la mañana esquiando junto al presidente de Endesa, el turolense Manuel Pizarro, y el director de Formigal, José María Abós, en dicha estación invernal. Este fin de semana hay un encuentro de empresas del sector en Formigal y quizá decidieron adelantar su estancia en la zona y comprobar, de paso, cómo van las obras.
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