«Alto Campoo está a tope». Esta es la frase más escuchada de todos cuantos se han acercado hasta le estación cántabra en el final de año e inicio de 2005. Hasta el punto de que uno de los responsables de la estación, el jefe de montaña, Gerardo Ortega, dejara entrever que el pasado viernes la estación ha podido batir su récord de asistencia en una sola jornada desde su inauguración, cifrándola en 6.500-7.000 esquiadores. Eso sí, advirtiendo de la dificultad que entraña obtener una 'cifra real' .
Lo cierto es que Alto Campoo puede estar batiendo referencias históricas en la presente temporada si se tienen en cuenta los datos registrados en el pasado Puente de la Constitución, en los que el propio director de la estación, José María Fernández, hablaba de récords. «Ha sido un puente histórico para la estación invernal. Hemos batido todo los récords, no recuerdo otro arranque de temporada como este», dijo. Y es que según los datos aportados por la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes, más de 24.000 esquiadores pasaron por las pistas en el Puente de primeros de diciembre. Una cifra que se habrá quedado pequeña cuando se añadan las correspondientes al final y principio de año.
Jornadas esplendidas
Estas últimas jornadas han sido espléndidas para la práctica del esquí. Al buen tiempo -ha sido posible contemplar la bahía de Santander y la Universidad Pontificia de Comillas desde Tres Mares- se la ha unido la abundancia de nieve, lo que ha provocado la llegada masiva de esquiadores. Muchos de ellos procedentes de Madrid, del País Vasco y de Portugal. El aparcamiento de arriba ha quedado cerrado todos los días sobre las 9.30 de la mañana y se han empleado autobuses para subir a los esquiadores. La carretera de acceso a la estación ha tenido que ser cortada en varias ocasiones.
Las mejoras en la propia estación han hecho que las colas en los remontes no sean excesivamente largas (alrededor de quince minutos), mientras que la pista recientemente abierta ha posibilitado aliviar la masificación de antaño.
Alto Campoo puso el colofón a estas jornadas con el recuperado descenso de las antorchas, que se celebró el pasado sábado. Un centenar de esquiadores, con la colaboración del Grupo de Montaña de la Guardia Civil, participaron en el descenso.
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