La afición al esquí, crece en Argentina

El primer centro de esquí de la Argentina fue Bariloche, cuya historia turística comienza a perfilarse en 1936, cuando el arquitecto Ezequiel Bustillo concretó obras como el Centro Cívico y el Hotel Llao Llao, en tanto que el centro mendocino de Las Leñas está cumpliendo 21 años y el fueguino Cerro Castor, apenas 2.

Quienes manejan números afirman que la movida anual de este deporte genera un ingreso de divisas que ronda los 200 millones de dólares, y que abarca cuatro centros principales: Catedral, Chapelco, Las Leñas y Castor, y otros más pequeños, entre ellos el sofisticado Cerro Bayo, en Villa La Angostura.

Para Alberto Vigna, de la operadora mayorista TTS Viajes, un experto en la difícil comercialización de la nieve, “este invierno el turismo blanco crecerá entre un 10 y un 20 por ciento con relación a la temporada pasada”, y no duda que “ese crecimiento se debe a que tenemos un país económicamente más estable”. Como integrante de una operadora que comercializa los cuatro centros principales, y también el Bayo, sabe que estos días del año son, climatológicamente, fundamentales para tener una temporada con buena nieve.

Temporada que comienza a mediados de junio y finaliza a fines de septiembre o principios de octubre. Sobre esto dijo: “Hace mucho frío y se registran temperaturas bajo cero en todos los centros, lo que enfría la tierra y la deja en óptimas condiciones para recibir las grandes nevadas”.

Pero seguramente este invierno 2003 será una temporada histórica para el Cerro Catedral de Bariloche, donde se implementará un pase único para toda la montaña. El pase permitirá acceder a los 17 medios de elevación que transportan, simultáneamente, a 13.400 esquiadores por hora, la mayor capacidad de arrastre de Sudamérica.

Imagen de Cerro Castor, una de las estaciones más nuevas de Argentina