Llevaba unos días sin poder esquiar en Masella. Y este fin de semana volvía a tener jaleo, pero en vista de que había nevado y de que las temperaturas iban a ser bajas, me ha animado a subir y ver qué tal. Acabo de llegar, ventajas de tener esto tan cerca.

La primera impresión que me he llevado es que el aspecto había mejorado mucho. Había mucho verde que ha quedado cubierto por una capa de nieve, lo que siempre es una alegría para la vista. Y encima, como ha hecho frío y los cañones han trabajado, la sensación de la nieve en pistas era muy buena.

Enamorats


La temperatura era baja y quitarse el guante era complicado. Como tenía poco tiempo, he esquiado solo a primera hora y muy, muy bien. Buena nieve, con agarre, poca gente y una ligera nevada que alegraba un poco el frío día, que lo era más en las zonas altas por el viento.

El día no ha dado para mucho más, pero lo principal es que me quedo con que la cosa ha mejorado bastante. Porque llevamos un año que costará de olvidar. O no, lo olvidaremos pronto. Pero mientras, aprovechemos lo que tenemos, que, como diría alguno, no estamos tan mal. Y por lo que dicen, parece que puede nevar algo más y que las temperaturas sigan bajas.