Estos eventos me ponen nervioso. No sé muy bien en calidad de qué voy. ¿Asistente sin más? Yo quiero disfrutar del evento, hablar con foreros, esquiar y hacer bajadas pero también quiero grabarlo, sacar buenas tomas, grabar alguna pequeña entrevista, tener material de los distintos momentos del evento. En resumen, hacer un buen vídeo.
Siento cierta presión porque siempre me imagino el vídeo que a mi me gustaría ver e intento acercarme todo lo posible. Sé que a la hora de la verdad es imposible estar en todos los sitios con la cámara adecuada, montada con el micro correcto y hay que hacer sacrificios.

Todas estas dudas y preocupaciones se me disiparon en cosa de unos 5 minutos el sábado pasado. Recogí a Jordi para llevarle a Madrid Snowzone y tenía preparada la GoPro encendida para tener una toma suya subiendo al coche. Después tenía pensado ir mezclando GoPro con la cámara de vídeo buena, con su micro de escopeta montado encima y probablemente mi micro de corbata puesto para que se me oyera a mi. Además pensaba llevar la GoPro en el bolsillo (con gimbal) para grabar las tomas de acción.
Lo que pasó a continuación (te sorprenderá) no tuvo nada que ver. Las conversaciones con Jordi fluyen de forma natural a pesar de tener una cámara delante. A mi me cuesta horrores parecer humano mientras hablo mirando al objetivo y a él simplemente le sale. No hizo falta ni llegar a entrar a la nevera para improvisar una buena parte del vídeo, ni segundas tomas, ni preparación.

Una vez dentro, solo preparando los esquís ya grabamos más tonterías que a la hora de editar quedaron muy bien. Lo mismo pasó cuando nos pusimos a buscar a Juli Sala, colaborador habitual de hablamos de esquí, alrededor de la competición de copa de españa U16 que se estaba celebrando.
Tuve que salir unos minutillos de la nevera y cuando entré ya estaba todo el mundo esquiando. Ahí ya me olvidé de todo. Me dediqué a saludar a gente conocida, a gente nueva, a gente que ni siquiera era de la kedada... Me encanta el ambiente que hay, y eso que solo he estado en dos de estas kedadas de pretemporada, espero este año poder ir a la grande, auténtica y original, en Cerler.

La charla post esquí moló mucho, primero Carolo con sus pildoritas de conocimiento y después Jordi con su presentación de los Ski The East Awards fueron muy amenos. Me hizo gracia el momento foro, en el que todo el mundo se lanzaba a opinar. Si es que somos animales de costumbres.
Además pude conocer a Camille y Nacho, cocreadores de hablamos de esquí, podcast del que soy fan absoluto y ¡me entrevistaron! Tengo que reconocer que me puse algo nervioso, y tiendo a liarme con un micro delante sin saber cuando parar, pero bueno, espero que haya una próxima entrevista y me salga algo mejor.
Y ya por fin, la cena, que más que cena en un restaurante, fue como merendar en un gran telesilla de 40 personas. Todas las conversaciones eran de nieve, viajes, esquí, material, sensaciones, competición, freeride, freestyle. Creo que nadie quería marcharse de allí (a parte de los camareros). Estoy super contento con el vídeo que ha salido, porque cuando la gente se lo pasa bien, todo fluye y queda bien así que ¡nos vemos en Cerler!