Sölden --------------------------
El Miércoles volvió a salir el sol, perfecto para esquiar en un glaciar !! Tras un día entero nevando, el cuarto día de esquí consecutivo amaneció con la intención de despejarse. Era el día ideal para volver hacer un trayecto largo, una hora y media de conducción para llegar al valle de Ötzal y esquiar en la archiconocida Sölden. Este era el aspecto del pueblo de Tobadill al salir de nuestro apartamento.
Todo el valle del Inn, donde está la ciudad de Landeck, se encontraba completamente nevado tras lo caído durante todo el día anterior. Estabamos contentos, ahora ya si la estampa invernal era completa, contrasta con la que nos encontramos los dos primeros días al llegar, en la que la nieve escaseaba, sobre todo en el fondo del valle y en las laderas soleadas.
Aquí nuestro conductor oficial del club durante el trayecto.
Al llegar aparcamos en el parking gratuito del telecabina Giggijoch Tal, remonte ideal para acceder hacia el glaciar. Ya estamos en Sölden!! Que ilusión, es mi primera vez en Sölden !! Toda la vida queriendo visitar esta estación y por fin ha llegado !!
Las primeras impresiones nada más llegar era muy buenas.
Esta estación tiene 150km de pistas perfectamente pisadas.
Esta es la primera pista que teníamos que bajar...
...para poder llegar al glaciar de la estación, el famoso Rettenbach Gletscher.
Pues para allá que vamos!!
Uff, que sensación más buena!! Hoy lo vamos a disfrutar ¿verdad Paola?
Pau prefería ir por el "delicioso" lateral de la pista. Vaya tela, si parece que se lo va a tragar la nieve ¡¡Vaya paquetón hay en Sölden!!
Juan y Sergio posando felices antes de subir al glaciar.
Pero antes de seguir camino del glaciar, vamos a repetir esta linea del telesilla que la nieve esta casi sin trillar. Esta estación tiene muchísimo potencial para el freeride, habían muchas palas de fácil acceso para trillar, y zonas controladas dedicadas exclusivamente al freeride.
Vamos Gato Tesorero, a disfrutar!! Yujuuu!!
Vaya tela, que nieve y que pistones se gastan el Sölden. Son pistas anchas de narices.
A le Blas, dale kaña !!
Ahora ya hemos calentado, estamos listos para subir al glaciar.
Por fin hemos llegado al Stadium del glaciar. Ahora se encuentra sepultado por la nieve, pero debajo hay unas gradas donde el público se situa, para ver el desarrollo de las citas anuales del inicio de la Copa del Mundo de Esquí Alpino, que se celebran en este glaciar en el mes de Octubre. Llevo toda la vida viendo la Copa del Mundo y ahora, al estar aquí en el muro de Sölden y verlo con mis propios ojos y no a través de una pantalla de TV...no se...¡¡parece que estoy soñando!!
Foto grupal en el glaciar.
Desde aquí ya se veía el remonte...
...que te da acceso a la famosa pista de la Copa del Mundo y su muro, aunque a mi se me iban los ojos por trillar esos laterales jaja, ¡¡fijaros!!
Sergio no se lo pensó mucho para lanzarse por el muro.
Al llegar abajo, foto con Sergio, Pau y el Tesorero.
Volvimos a subir arriba del glaciar, hasta los 3340 meros del altitud. Desde aquí las vistas eran acojonantes.
Una panorámica de los picos.
Impresionante la vista que teníamos desde el glaciar, era como estar en el cielo, no es para menos, nos encontramos a 3370m de altitud, la cota máxima de toda la semana.
Ha llegado el momento de la verdad, vamos a disfrutar de ese medio metro de nieve nueva caida en el glaciar, ¡¡ momento extasis !!
Ufff, demasiada nieve para un grupo de valencianos jajaja, no sabemos esquiar esa nieve!!
Buaaa, madre de dios, hay demasiado paquete ... pero ¿y lo bien que lo estamos pasando?
Vaya gozada de nieve, espectacular el glaciar
La mejor nieve de todo el viaje, ¿verdad Victor?
A la llegada, de nuevo al remonte del estadio, se nos notaba la carita de felicidad.
Vamos a cambiar de tercio, tanta nieve nos está dejando agotados jaja. Vamos a admirar el paisaje, mirad que bonito!!
Vaya desnivel que tiene esta estación, mirad abajo lo lejos que esta el valle, y eso que estoy con el zoom de la cámara a tope!!
Nada menos que 2000 metros de desnivel, una auténtica pasada. Eso convierte a esta estación en una rompepiernas total. Nos llamó la curiosidad que vieramos, durante todo el día, demasiados rescates en helicóptero por la estación. Esto nos causó mucho respeto por estas montañas, la realidad es que tienen tanto desnivel que acabas derrotado y llegas al final de las pistas con las fuerzas justas, algo peligroso porque puedes sufrir una caida y hacerte una lesión grave. Ojito con Sölden que es mucho Sölden !!
Sölden nos pareció la mejor estación de todas las visitadas en esta semana, no se si fué por el día que nos salió tan bueno, por su gran cantidad de nieve en el glaciar o por sus pistones; yo creo que fué una mezcla de todo. Había bastante gente en la estación pero la verdad es que colas en remontes...casi nada, solo de buena mañana un poco, ya que todo el mundo tenía ansia por subir al glaciar a trillar lo recién caido la noche anterior.
Otro aliciente que tiene esta estación es el tunel en altura que hay para conectar los dos glaciares de la estación.
Las vistas desde el otro glaciar, el de Tiefenbach, son fantásticas. El Tesorero se nos quedó embobado jajaja.
Que pedazo estación, menudos pistones tiene, son anchísimos, son autopistas!!
Y ahora, llega el momento rompepiernas total. Vamos hacer la bajada continuada más larga de la semana. Si visitáis Sölden no os podéis perder la sensación de hacer esta pedazo de bajada de 2000 metros de desnivel. Se trata de salir desde lo alto del glaciar a 3300 y bajar, enlazando una serie de pistas azules, alguna negra y un último tramo de roja, hasta el pueblo situado a 1300. ¿Qué os parece? ¿Impresionante verdad? Esta es la larga pista azul intermedia por donde se baja.
Tramo intermedio de roja.
Juan bajando a tope.
Vistas del pueblo en el tramo final del descenso.
Llega el momento de la parada para comer.
Los austriacos comen muy prontito, a las 12:30. Cuando lo vamos hacer los españoles, esta tan tarde que ya están todas las mesas vacias
Y poco más ya. El resto del día lo dedicamos a regresar hacia nuestro parking, y a pasar frio, porque la temperatura caía a la misma velocidad que el sol se marchaba. La cámara de vídeo hasta se me congeló y no quería funcionar, deberíamos estar a -15º a la sombra.
Todavía nos quedarían por bajar algunas "autopistas" más.
En resumen, Sölden nos encantó, y le dimos el 1º premio a la mejor estacion del viaje. Por pistas, por cantidad y calidad de nieve, por vistas, por el glaciar, por fuera pistas, por desnivel...es impresionante esta estación. Por pornerle un "pero", quizás falte algún que otro remonte y substituir alguno que es lento, pero aún así es flipante esta estación, no me estraña que sea la sede del US SKI TEAM en el continente europeo.
Ains que recuerdos!! Jamas olvidaremos Sölden ¿verdad Victor?
El quinto día del viaje, para variar, amaneció nevando de nuevo. Nuestros caseros, la familia Peter de Tobadill, nos limpiaban cada mañana el acceso.
Las previsiones pintaban muy malas, sobre todo para la mañana, la nubes estaban muy bajas y la visibilidad escasa. Yo me encontraba con dolor de garganta, otros estaban reventados del día anterior en Sölden, otros directamente estaban llenos de agujetas jajaja. En fin, todo escusas, el caso es que se dieron una serie de circunstancias que nos hicieron tomar la decisión de no esquiar ese día .
No somos gente de dejar escapar un jornada de esquí, pero la verdad es que las circunstacias mandaban. Estaba previsto visitar ese día Lech, la cual yo ya conocía de mi anterior viaje al Arlberg en 2009. Pero resulta que para acceder desde St Anton a Lech hay que atravesar un pequeño paso de montaña que exigían llevar cadenas a todos los vehiculos, y nuestra furgona solo tenía ruedas de invierno, asi es que imposible ir. Quizas desde St Anton podríamos a ver ido a Lech en autobús, pero la verdad es que se nos habían quitado las ganas.
Yo no soy de los de quedarme sin esquiar un día, y como nieve teníamos de sobra, con la ayuda Raúl, nos fabricamos un rampa para saltar en los exteriores de nuestro alojamiento y al menos esquiar un poquito jeje.
Fue una gran acierto, todos pasamos un buen rato.
Vaya saltito más chulo que os montó el Richi ehh!!!
A laaaa, que cara de concentrado
Y vuelta otra vez para arriba.
Otra vez para abajo.
Oleee el Raulin !!
Juan al final aprendió
Victor mejoró
Aquí una toma a cámara lenta de Sergio saltando.
Y hasta Paola saltó !! Esta chica le pega a todo !!
A media mañana, después de los saltos, no fuimos a Landeck a tomar algo. La furgoneta presentaba este aspecto.
Antes de nada, como todas las mañanas, a comprar en el supermercado Lidl. Era un lujo poder comprar la comida aquí, a precio como en España, en otros viajes a Alpes nos hemos gastado el doble.
Llama la curiosidad la repercusión y la cultura que tiene el esquí en Austria, habrías un periodico cualquiera y tachan, 4 o 5 páginas enteras relacionadas con el esquí; esto en España sería impensable.
Después, carretera y hacia St. Anton, hoy tocaba relax. Teniamos tareas pendientes del viaje, como ir al Spa y fiestuqui en el apre-ski, ¡¡benditas tareas!!
Al llegar a St. Anton no nos gustó mucho comprobar que no nevaba
Se había quedado una tarde muy chula, sin nevar y con otro montón más de nieve recién caida. Pero bueno, de nada sirven ahora las lamentaciones, nosotros a lo nuestro, al Spa de St. Anton am Arlberg !!
Dentro del agua calentita se estaba en la gloria, ¿esquiar? ¿eso que es?
Impresionante el Spa, 100% recomendado. Yo ya lo conocía, y es que si vas una vez seguro que repites. Al final salió el sol y todo, aunque solo por momentos.
Tras el "Relaxing cup in St Anton am Arlberg", callejeamos en busca de papeo.
Comimos como dios manda, comida Tirolesa jaja, que al final resulta que es lo mismo que en España pero servido "más mono"
Después de comer, a cojer el bus en dirección al mejor apre-ski de Austria. Ojo, para mi gusto ehh jaja, que no se me enfaden los seguidores del Schatzi y otros lugares )
De noche, las calles de St. Anton estan muy guapas.
Y nuestro Tesorero buscaba souvenirs
Fotito nocturna de St. Anton.
Y ahora si que si, bajando por la pista para llegar...
... al mítico Mooserwirt.
Fuera había ambientazo.
Pero ya dentro era brutal, todo abarrotado, gente mamadísima de cerveza, gente bailando encima de las mesas con jarras de cerveza en la mano, camareros con bandejas de 25 cervezas pasando entre la multitud...en fin, con tanta cerveza era normal que la gente estuviera mas bien borracha jaja, ¡¡vaya desmadre!!
Los gatos por fin en el Mooserwirt, como disfrutamos!!
Fieles a su horario establecido, a las 20:00 cerraron, pero aún nos quedaba los más divertido, bajar como podamos hasta el pueblo por la pista. ¡¡Vaya risas que nos hechamos, no lo olvidaré nunca!!