Nada de todo esto echó para atrás a este 'aventurero', que en Semana Santa del año pasado ya tenía rodado un trailer bajo las órdenes del Director Pablo Caruncho, y siguiendo el guión que unos años atrás el mismo Jorge Grande había escrito, pero que ante la imposibilidad en aquel momento de llevar adelante su proyecto, dejó guardado en un cajón.
Para el trailer se contó con actores de talla nacional como Rafa 'Turbo' Reaño (Al salir de clase), gran amigo de Jorge y que se mostró feliz con la idea desde el primer momento, igual que Raquel Quintana (Amar en tiempos revueltos) y Javier Bolea. Otros actores se sumaron rápidamente tras leer el guión y la 'biblia' del proyecto. El resultado es un producto enfocado a adolescentes, al estilo de 90210 Sensación de Vivir, Salvados Por La Campana, California Dreams, etc...
Acabado el rodaje, el siguiente paso fue tratar de vender el proyecto a las diferentes cadenas de televisión de nuestro país. Y ahí es donde Jorge se dio cuenta de lo difícil que es este sector, donde 'entrar en la parrilla' son esfuerzos y contactos. De eso se dio cuenta al salir de Tve, donde presentó a Lola Molina, responsable de contenidos de la cadena pública, a la que le encantó el trailer, pero que no acabó de ver encajado en el perfil de espectador de Tve, "me animó bastante el hecho de que en un momento dado retrocediera una escena en mitad de la audición. Fue determinante para saber que el producto le gustaba, aunque como ya me imaginaba, el target de mi serie no correspondía con la cadena" afirma Jorge Grande.
Tras esta entrevista tuvo otra con Telecinco, con resultados parecidos. Entonces se dio cuenta que necesitaba ser presentado por gente de confianza, y es así, gracias a algunos amigos, que acaba bajo al paraguas de Tony Sevilla (Plural Entertainment), la persona que maneja las riendas de la promoción para la venta de la serie.
La estación coreana de Yong-Pyong incrementó en un 260% la afluencia de esquiadores al convertirse en la estación de moda de los habitantes de Malasia e Indonesia, con una telenovela. Los responsables de la estación cedieron las instalaciones para ambientar en esas pistas un culebrón televisivo. La idea funcionó, y decenas de familias se iniciaron en el esquí al acudir a ese complejo para pisar la misma nieve que sus ídolos de la televisión.
No cabe duda de que si en nuestro país algo así tuviera éxito, serían miles los nuevos esquiadores que querrían probar este deporte de ocio.