Las estaciones de esquí y montaña de Ferrocarrils son equipamientos turísticos y deportivos, pero al mismo tiempo se convierten en una herramienta imprescindible de promoción y dinamización del territorio donde se ubican, poniendo en valor la oferta del sector de la nieve y las actividades en aire libre durante los 365 días al año.
De hecho, en esta temporada de invierno 2023-2024, las seis estaciones han generado un impacto económico sobre el territorio de casi 50 millones de euros y han creado casi 3.000 puestos de trabajo.
Por tanto, FGC Turisme es un impulsor clave del dinamismo económico, social y deportivo en Cataluña, el cual se traduce en una prácticamente plena ocupación hotelera en los establecimientos de los valles de montaña. Según los datos estudiados y recogidos por la UPF, el impacto directo e indirecto de las estaciones de montaña en el territorio supone un 9% del total del VAB (Valor Agregado Bruto) comarcal y un 1,2% del PIB total por cada euro adicional del total del gasto asociado.
Propuestas más allá del esquí
Durante la temporada de invierno, las estaciones de esquí de Ferrocarrils cuentan con un amplio abanico de actividades heterogéneas que van más allá del esquí. De esta forma, los y las visitantes pueden aprovechar al 100% su experiencia en la alta montaña.
La Molina, por ejemplo, ofrece el paseo panorámico del Telecabina Cadí-Moixeró hasta el punto más alto de la estación: el refugio Niu de l'Àliga y el pico de La Tosa, a 2.537 m de altitud sobre el nivel del mar.
Vallter, por su parte, brinda la oportunidad de vivir una de las experiencias más espectaculares: cenas nocturnas de altura en la cafetería Marmotes, después de una excursión con raquetas de nieve o con esquís de montaña.
En las estaciones del Pallars, Espot Esquí y Port Ainé, por otra parte, se propone un amplio calendario de actividades, como catas de producto locales, actuaciones, entre otras, pensadas para todos los públicos.
En cuanto a Boi Taüll, la estación ofrece un pequeño itinerario introductorio con raquetas de nieve para disfrutar de la hora mágica, ese momento entre la puesta de sol y la noche, ideal para capturar fotografías de gran belleza.
Y en Vall de Núria se pueden visitar tres exposiciones: "Memorias de nieve" y "El Valle de los cinco elementos", en el Centro de Interpretación; y “Nuenta años de historia. El Cremallera de Núria”, en la estación de Ribes Vila. Asimismo, las seis estaciones disponen de 21 itinerarios balizados para realizar esquí de montaña y excursiones con raquetas de nieve y descubrir la belleza natural de sus alrededores.
Estaciones sostenibles
Las seis estaciones de esquí y montaña de Ferrocarrils, comprometidas con el medio ambiente, trabajan activamente para reducir la reducir la huella de carbono. Durante esta temporada que acaba de concluir, se ha llegado a una progresiva descarbonización en los últimos años del 88,58% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Esta temporada 2023-2024, durante la celebración de los Campeonatos del Mundo de Esquí de Montaña los días 27 y 28 de enero en Boí Taüll, se ha medido el resultado de este evento en términos de emisiones de CO₂, de acuerdo con los requisitos establecidos en el GREENHOUSE GAS PROTOCOLO que establece el marco global para medir y gestionar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). De los resultados se desprende que el 97,7% de las emisiones indirectas corresponden mayoritariamente a la movilidad de los asistentes, con una huella de carbono por asistente de 0,211 tCO₂e.
Tras medir y verificar las emisiones producidas, FGC Turisme las compensa mediante créditos de CO₂ que la Oficina Catalana del Cambio Climático pone a disposición, con el objetivo de financiar proyectos sostenibles del territorio, cerrando así el círculo y haciendo realidad el objetivo de promover eventos sostenibles.
Otro ejemplo de compromiso con el medio ambiente se encuentra en Vall de Núria, con el proyecto ECOVALL, que incorpora energías renovables. Esta herramienta permite reforzar la capacidad de adaptación y resiliencia frente a la emergencia climática, a la vez que articula y define las futuras estrategias en términos de mitigación, siendo un referente mediante este instrumento. Esta temporada, además, se ha estado trabajando en la ampliación de las actuales instalaciones térmicas a través del Proyecto "Gasoil Zero" de cara a aumentar la producción de energía renovable, así como también en la incorporación de otros combustibles sintéticos para las máquinas de mantenimiento de pistas con el objetivo de reducir las emisiones en este ámbito en un 90%.
Actualmente, las estaciones de FGC cuentan con sistemas de gestión y de calidad medioambiental que siguen las directrices de la Agenda 2030 y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas. Asimismo, colaboran con Parques Naturales y tienen Sistemas de Gestión Ambiental (SGA) fundamentados en la Norma ISO 14001 con la que disponen las estaciones de La Molina, Valle de Nuria, Espot, Vallter y Port Ainé, para realizar una gestión más transversal, eficiente y dinámica, siguiendo el Plan de Acción Climática de FGC Turisme 2030.
Un ejemplo de economía circular del agua
En la Cumbre de Acción Climática del Gobierno, celebrada en enero de 2020, FGC adquirió el compromiso de reducir el consumo del agua y la energía en el ámbito de la producción de nieve, como es el ejemplo de ahorro energético en la producción de nieve del 19,7% que ha alcanzado esta temporada la estación de Vallter. Las estaciones de montaña disponen de concesiones otorgadas a la administración para el uso del agua, que se almacena en lagos a disposición, en pozos o captaciones que respetan en todo caso los caudales mínimos ecológicos.
En la producción de nieve no existe ningún elemento que altere la composición del agua. Sólo se realiza un cambio de estado (agua transformada en hielo y hielo transformado en agua). En el contexto de una estación de esquí, la producción de nieve no tiene impacto sobre ríos y lagos. El agua que sale por los innivadores no se obtiene directamente de ningún arroyo, siempre es agua previamente almacenada en época de lluvias, sobre todo durante la primavera o el otoño. Son lagos de construcción artificial y que han sido impermeabilizados y se ubican en puntos estratégicos del área esquiable.
Por otra parte, a menudo estas balsas de agua están destinadas a otros usos fuera de la temporada de nieve, que pueden ser lúdicos, favoreciendo la desestacionalización, de emergencia para el consumo humano y animal. En caso de sequía o, incluso, para abastecimiento en caso de incendio forestal en zonas cercanas.
FGC Turisme asegura, a través de controles internos, la salvaguarda de los caudales ecológicos de los ríos y torrentes. Por tanto, toda esta nieve caída, con el deshielo volverá a las balsas y ríos y quedará preparada en forma de agua para la producción de nieve de la próxima temporada. Y así se cierra el ciclo.
Cabe destacar que este invierno han comenzado en La Molina las pruebas del Laboratorio de la Nieve, un innovador sistema pionero en el mundo para producir nieve con menos agua, en menos tiempo y con menos temperatura.
Desestacionalización de las actividades turísticas en el Pirineo catalán
Las seis estaciones de esquí de FGC ya trabajan para empezar la nueva temporada de verano 2024, que estará cargada de propuestas lúdicas y deportivas al aire libre para todos los públicos, para que disfruten del entorno sin prisa: viajes panorámicos en teleférico en diferentes puntos de las estaciones, salidas de senderismo por el entorno de los Parques Naturales, rutas de ciclismo de carretera o de montaña en circuitos trazados para todos los niveles, y actividades familiares en la base de las estaciones.
Uno de los principales objetivos de Ferrocarrils consiste en dinamizar el turismo en el Pirineo catalán para crear negocio 365 días al año, con una clara dinámica para la desestacionalización. Desde hace años, FGC Turisme pretende conseguir un equilibrio equitativo e igualitario en todo el ámbito catalán y ser un referente turístico tanto en invierno como en verano.
