Este pasado sábado 16 de marzo la FIS anunció que a partir de la próxima temporada todos los corredores y corredoras en disciplinas de velocidad deberán ir equipados con Airbag. Es una medida que ya se aprobó hace unos años e incluso se homologó un modelo de Dainesse, pero que no se hizo obligatoria. El resultado es que muchos corredores todavía no lo llevan, aunque según la FIS, a lo largo de estos años se ha ido popularizando cada vez más.
Otra de las medidas que se va a tratar de aprobar mañana martes en Saalbach donde estas dos semanas se están disputando las Finales de la Copa del Mundo de esquí alpino, es la obligatoriedad de llevar trajes anti-cortes. La lesión del noruego Alexander Kilde-Aamodt este pasado mes de enero, fue especialmente dura por las profundas laceraciones que sufrió.
Precisamente en 2014, un compatriota suyo, el ex-campeón de la Copa del Mundo de esquí alpino Aksel Lund Svindal, perdió toda una temporada después de que durante un entrenamiento para el descenso de Beaver Creek se cayera sufriendo cortes, uno en la nalga de 15 centímetros, además de otros en la cara.
La introducción del airbag en las carreras de velocidad de la Copa del Mundo se propuso en 2011. Entonces la FIS contactó con la empresa italiana Dainese para desarrollar uno similar al que fabrican para el motociclismo. Pero el proceso para la homologación no fue sencillo. Tres años después, en octubre de 2014 se presentó un modelo aprobado por la FIS, pero pocos días después la Federación se echó atrás porque el sistema no seguía las reglas del material.
Al parecer la posición del generador del gas que hace que se infle la bolsa de aire, perjudicaba la aerodinámica de los corredores que llevasen esta equipación. Tras algunos ajustes, finalmente a mediados del mes de noviembre de ese mismo año, la FIS homologaba el airbag para corredores de la Copa del Mundo de esquí alpino.
Pero no lo hizo obligatorio. Aunque al principio había bastante expectación entre la mayoría de corredores y corredoras, poco a poco a lo largo de estos años se ha ido imponiendo, especialmente en la categoría femenina.
La propuesta del Airbag para la Copa del Mundo de esquí alpino llegaba también por una temporada plagada de lesiones. Mucho peor que la que estamos cerrando estos días en Saalbach. Cuando apenas se habían disputado dos meses de circuito, ya se habían sufrido casi 30 accidentados, entre ellas figuras destacadas como Lara Gut, Denise Karbon, o Nicole Hosp en mujeres, o Peter Fill, Thomas Fanara o John Kucera en hombres.
¿Cómo funciona un airbag para esquiadores de Copa del Mundo?
Actualmente hay varias marcas que fabrican y tienen homologado un modelo de airbag para la Copa del Mundo además de la italiana Dainesse (el D-Air), entre ellas la francesa Rossignol-InMotion (Vest) o la sueca POC (Spine VPD).
En cuanto el corredor se inclina más allá de lo que sería una posición irrecuperable para un esquiador (más de unos 30 grados en cualquier dirección), la bolsa de aire se dispara, transformándolo en el 'Hombre Michelin' mucho antes de aterrizar en el suelo.
Según los fabricantes, el sistema toma 1.000 mediciones por segundo, por lo que puede calcular el instante exacto en que comienza un choque. Por su parte, la bolsa de aire diseñada para proteger el cuello, el pecho y la columna, se infla en menos de 100 milisegundos.
Todo el sistema, incluidos acelerómetros, giroscopios, GPS y el generador de gas necesario para llenar el airbag, cabe dentro del cuerpo del protector de columna que llevan los corredores. En total, tiene aproximadamente el mismo tamaño que dos teléfonos móviles puestos uno sobre otro.
Funcionamiento del sistema Airbag para esquiadores