Sierra Nevada ha sido hoy la primera estación de esquí española en incorporar pisapistas híbridas a su parque de máquinas tras recibir cuatro Pisten Bully 600 E+, con propulsión combinada de diésel y electricidad, que reducen sustancialmente el consumo energético y producen un 20% menos de emisiones de CO2.
Las nuevas máquinas han sido presentadas en Borreguiles por el jefe de ventas de PistenBully, Harr Häge, quien ha asegurado que,
"hoy es un día muy importante para nosotros no sólo por entregarlas en España sino porque también, a nivel mundial, se muestra tanto el compromiso de Sierra Nevada como de PistenBully con el medio ambiente, y también se muestra que Kässbohrer tiene un producto para ayudar a la sostenibilidad”.
El directivo de la empresa alemana ha estado acompañado del consejero delegado de Cetursa Sierra Nevada, quien ha querido añadir que
“Es un gran día para Sierra Nevada y para el esquí en España. Son máquinas que, junto a la reducción de consumo y emisiones de CO2, son muy potentes y totalmente digitalizadas. Subrayan el compromiso de Cetursa y Andalucía de invertir en esta estación de esquí. Con las máquinas recibidas hoy y las que vendrán la temporada que viene habremos renovado el 50% de viejo parque de pisapistas”.
También ha asistido al acto de entrega el equipo de mecánicos de la estación encargado del mantenimiento y puesta a punto de las máquinas pisapistas de la estación de esquí. Para ellos, la principal ventaja de las Pisten Bully 600 E+
“es que son máquinas más eficientes y eso se traduce directamente en una reducción de un 20% en el consumo de combustible y por tanto en las emisiones (de CO2). Las máquinas, conceptualmente, son más modernas”.
Las nuevas máquinas, Pisten Bully 600 E+, diseñadas y fabricadas por Kässbohrer -la multinacional alemana adjudicataria del concurso público- han sido cofinanciadas por el Programa Operativo FEDER de Andalucía a través de los recursos REACT-UE, destinados a proyectos con ahorro energético, como parte de la respuesta de la Unión Europea a la pandemia de COVID-19.
La autonomía de las pisapistas híbridas, entendida como el intervalo de repostaje, es mayor que la Pisten Bully 600 convencional, gracias a su menor consumo de combustible. La gestión inteligente de la energía garantiza que en el pisado pendiente abajo, los motores eléctricos funcionen como generadores y apoyen las bombas hidráulicas mediante la caja de distribución.
Las cuatro nuevas máquinas Pisten Bully 600E+ en Sierra Nevada