Y entre todo ellos hubo un tipo que se hizo los 42 kilómetros con unas botas de esquí puestas. ¿Has caminado con ellas hasta el parquing después de una dura jornada de esquí? Pues imagina ir con ellas por el duro asfalto durante decenas de kilómetros...
Colin Haylock lo hizo, y además en... 5 horas y 52 minutos. Es decir, se pasó casi seis horas corriendo y caminando con unas botas de esquí puestas. No ha trascendido la cantidad de ampollas y rozaduras que habrá tenido que rtatarse después, pero eso sí tiene un record bajo el brazo.
Hay que decir que todas estas personas que corren de esta guisa, lo hacen por una buena causa. El dinero que logran recaudar, lo donan íntegramente a una fundación benéfica. En el caso de Colin es para la Shooting Star Chase, para la que ha logrado recaudar ya, 3.100 libras esterlinas de las 5.000 que tenian como objetivo.
Desde el primer maratón de Londres en 1981, casi 60 millones de Libras se han recaudado para actos benéficos, y los mismos corredores han recaudado otros 770 millones más para entidades benéficas a su elección.